Luego de tres años de estar separados, Seokjin y Taehyung vuelven a verse. Todo el amor acumulado se hace evidente con cada mirada que se dan, en cada encuentro que sostienen. Sus labios parecen estar sellados, pero sus ojos logran delatarlos. ¿por...
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— Debes tener paciencia.
— Ya llevamos mucho tiempo esperando.
— De eso se trata.
— Esto es aburrido — puchereo y golpeo la caña en el agua.
— Los has espantado — expreso cansino — así nunca atraparemos un pez el día de hoy.
— No tiene sentido esperar tanto. Mi papi los obtiene rápidamente en el super.
— Eso no tiene gracia. Pescar se trata del arte de esperar el momento indicado.
— Si claro — rodo sus ojos. — mejor cuidare a Eunseok. — dijo yendo hacia su pequeño hermano que se encontraba en el corral. Cuando Jihyun vio una de las esquinas del corral doblado y no vio a su hermano por ninguna parte, su corazón se lleno de pánico. — JI TAAAE! — grito asustada.
Este suspiro cansado sintiéndose interrumpido en su labor de pesca.
— JI TAEEEE! — grito nuevamente y volteo a mirar hacia su hermano mayor que no le miraba y con lágrimas en los ojos corrió en búsqueda de su hermano.
— ¿Qué querrá ahora? — soltó su caña de pescar a regañadientes. De pronto, sintió que alguien le tocaba. — tan pronto llegas... — sus palabras se enmudecieron al ver al pequeño Eunseok a su lado sonriendo para él y con grande esfuerzo poniéndose de pie prendiéndose de su ropa. — ¿y tu como llegaste aquí?
— EUNNI, ¿BEBÉ DÓNDE ESTÁS? — escucho gritar a su hermana a la distancia.
— Mira lo que has hecho. Has preocupado a tu hermana.
Eunseok balanceo un poco sus piernas sin soltar su ropa, demasiado feliz por su hazaña de alcanzar a su hermano, mostrando una gran sonrisa.
— Mírate, sabes que con eso lo puedes todo ¿verdad? — dijo y apretó suavemente una de sus mejillas.
Eunseok rio alto mostrando unos hermosos hoyuelos enamorando aun más a su hermano.
— Claro que si, eres demasiado adorable. Tu y Jihyun son mi debilidad.
— EUNNIIIIIIIIIII! — grito Jihyun al borde del llanto.
— Ven, vamos antes de que nuestra hermana enloquezca — dijo tomándolo en sus brazos.
— EUNNNIIIIII!
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