𝗧𝗶𝘁𝗮𝗻𝗶𝗰 - 𝗦𝗮𝗿𝗮𝗵

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 08

Rose se estaba terminando de preparar para dormir, se sentó frente al espejo de tocador, escuchando la melodía de la caja de música. No estaba segura de qué hacer con lo que acababa de ocurrir. Hacía menos de una hora, se había sentido absolutamente miserable sentada junto a Cal y su madre en el comedor de primera clase, luego lo siguiente que supo fue que estaba de pie en la parte trasera del barco, deseando saltar y morir. Luego aparecieron Jack y Sarah, y la convencieron de que no lo hiciera, justo antes de que Cal se la llevara. Era casi como estar en un sueño, con lo rápido que había sucedido todo.

Rose se quedó mirando su reflejo, todavía tratando de comprender los eventos. ¿Cómo lo habían hecho? ¿Cómo pudieron Jack y Sarah ver más allá de la máscara que ella usaba frente a todos y realmente verla ?, ellos, entre todos los que había conocido, en realidad la habían hecho sentir como si valiera la pena escucharla... Como si ella tuviera un propósito para estar viva...

Un golpe en la puerta interrumpió sus pensamientos. Cal entró, sosteniendo una pequeña caja. Ella lo miró a través del espejo.

-Sé que has estado melancólica- dijo Cal suavemente-, y no intento saber por qué...- camino hacia ella-. Quería guardar esto hasta la fiesta de compromiso de la próxima semana...- hizo una pausa para cerrar la caja de música. Ella luchó contra el impulso de fruncirle el ceño. Ella realmente no tenía ningún deseo de recibir más de sus regalos sin corazón-, pero... pensé que esta noche...- abrió la caja.

-Dios mío- susurro sorprendida, llevándose la mano al pecho en estado de shock. Incluso para él, era demasiado. Dentro de la caja había una hermosa piedra azul cortada en forma de corazón en una hermosa cadena de oro blanco. 

Rose ni siquiera podía comenzar a imaginar cuánto había costado, o dónde había logrado obtener una joya tan exquisita. Cal se rio entre dientes ante la sorpresa de su regalo.

-Como un recordatorio de mis sentimientos por ti- dijo Cal

-¿Es un...

-...diamante?- terminó, sacando el collar de la caja y colocándolo alrededor de su cuello con una sonrisa-, sí. 56 quilates, para ser exactos. Fue usado por Luis XVI, y lo llamaron Le Coeur de la Mer

-El corazón del mar...- Rose tradujo con asombro, tocando suavemente los bordes del collar-. Es abrumador...

-Es para la realeza- dijo Cal con orgullo mientras miraba sus reflejos en el espejo -.Somos  la realeza, Rose- él la miró y continuó-. No hay nada que no te daría. Nada que te negaría... solo un rechazo hacia mi. Ábreme tu corazón, Rose.

Rose lo miró por un momento antes de volver a mirar el espejo mientras envolvía su mano completamente sobre la piedra, protegiéndola tanto de los ojos de él como de los suyos. ¿Cómo podía siquiera comenzar a abrir su corazón a Cal, cuando él lo cerraba constantemente con sus regalos sin sentido como estos? Eran solo reflejos de la suprema riqueza y grandeza de Caledon Hockley, no de su amor. Por lo tanto, no significaban nada para ella en absoluto, porque en realidad, ella no significaba absolutamente nada para él.

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Barco Keldysh
Presente

-Era una piedra fría, un corazón de hielo- explicó Rose, su mano sobre su cuello mientras recordaba ese día -. Después de todos estos años, todavía puedo sentirla ceñida alrededor de mi cuello como un collar de perro...

Jack estaba apretando su mano reconfortantemente. Sabía lo difícil que era para ella recordar cómo era cuando estaba comprometida con Cal. Él mismo podía recordar lo miserable que había sido en ese entonces.