𝗧𝗶𝘁𝗮𝗻𝗶𝗰 - 𝗦𝗮𝗿𝗮𝗵

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 19

En el bote 6, Ruth miraba con impotencia el transatlántico mientras el diminuto bote plegable se alejaba lentamente remando. Se sintió terrible. Su hija, su única hija, todavía estaba a bordo de ese barco. Se estaba hundiendo, ya un ritmo alarmante. No lo podía creer, hace unos minutos antes, la proa solo había comenzado a inclinarse ligeramente hacia abajo. Ahora, estaba al menos una cuarta parte del camino hacia abajo y se estaba llenando rápidamente de agua. Podía ver a la gente en las cubiertas corriendo frenéticamente en pánico.

Molly miraba preocupada el barco, por las personas que estaban aun en el ya que no había suficientes botes salvavidas para todos, sobre todo por Jack, Rose y Sarah, ellos seguían en el barco.

Entonces recordó la advertencia de Sarah en la cena, la historia del barco que tenia las mismas características del Titan, el que se hundió en su viaje inaugural.

-Sarah tenia razón, el Titanic estaba maldito- susurro Molly viendo el barco

-Sarah- susurro Ruth recordando sus palabras-. No puedo creer que ella haya tenido razón.

No podía creer que la niña que trato de humillar en la cena haya tenido razón en preocuparse por el barco, ella les advirtió pero nadie la escucho.

-Esto no se ve todos los dias.

Los oficiales volvieron a lanzar otra señal de socorro que ilumino temporalmente el barco.

Una explosión sacó a Ruth de sus pensamientos y sus ojos se abrieron de golpe. Otro de los cohetes de socorro de Boxhall acababa de ser lanzado. Iluminó el barco en una visión de blanco.

Cada vez quedaban menos botes en el barco, Cal se abría paso entre la angustiada multitud, buscando frenéticamente a Rose en medio del caos. 

El orden que originalmente habían establecido los oficiales había desaparecido y se había producido el pánico. A su alrededor, las esposas gritaban, tratando de agarrar a sus maridos para quedarse con ellos, y los niños gritaban, asustados y entristecidos por dejar atrás a su padre cuando los obligaron a subir a los botes salvavidas con su madre.

-¡Lovejoy!- grito Cal al verlo caminando hacia él

-No esta en estribor tampoco señor- informo Lovejoy

-Se nos acaba el tiempo-gruñó mientras miraba a Lightoller, que en ese momento estaba llenando el bote más cercano -. Este maldito no a dejado subir a ningún hombre a los botes.

-Uno del otro lado esta dejando subir hombres.

-Estes es nuestro plan- dijo Cal, asintiendo a su sugerencia. -Necesitaremos un seguro, primero. Vamos

Se abrieron paso entre la multitud, desesperados por volver al camarote. Mientras caminan, pasaron junto a Isidor Strauss. Estaba tratando desesperadamente de convencer a su esposa de que se subiera a un bote salvavidas.

-¡No!, por favor Ida-le rogó, tomando suavemente su mano -Sube al bote.

-¡No!- grito Ida, soltando su mano. Ella se negó rotundamente a dejar morir a su esposo en el barco, mientras ella cobardemente se alejan en un bote para poder vivir-. Hemos estado juntos durante 40 años. Y a donde tú vayas, yo voy. ¡No discutas conmigo, Isidor!- añadió bruscamente, viéndolo apunto de protestar-. Sabes que no sirve de nada.

Isidor se limitó a sollozar y la abrazó con fuerza, sintiendo que se le saltaban las lágrimas a los ojos, sabia que no importaba lo que hiciera ella nunca lo abandonaría.

━━━━━━ ◦ ❖◦ ━━━━━━

-Vengan por aquí, por favor- dijo un empleado solitario en los pasillos del nivel E, ayudando a algunos pasajeros de tercera clase que intentaban encontrar la escalera principal-. Todos por aqui.