Capítulo VII

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Callie

Ezra me dejó con la Luna de la manada, su madre, quería correr a él, se que estoy siendo una niña llorona, pero lo necesito, me siento indefensa, se que es causa de encontrarnos, mi mamá ya me lo había contado, se supone que hasta que me marque vamos a estar como dos chicles, después de la marca soportaremos mejor la distancia, se supone en este momento deberíamos estar juntos, pero nada está ocurriendo como debería, he visto varias parejas y no nuestra situación no ha sido así, que hice mal.

-¿Asi que volviste ayer?- dijo la luna sacándome de mis pensamientos.

-Si mi luna, decidí estudiar medicina- levante la cabeza.

-Maravilloso,quieres ir por algo de comer, estas un poco pálida- dijo de manera calida por lo que asentí y nos dirigimos a la cocina, nunca había estado en la casa más allá del salón de eventos y técnicamente no es la casa ya que está como a cien metros de acá.

-Es muy hermosa su casa luna-dije mirando los detalles, es bastante grande.

-No sabía que Ezra y tu fueran cercanos-dijo de manera divertida dándome un poco de jugo y unas galletas.

-No lo éramos-dije sin pensarlo y gire esperando ver si ya volvía por mi, estaba nerviosa- siempre fue muy amable con todos, pero no me considero exactamente su amiga cercana- di un sorbo al jugó

-Siempre quise que Ezra comprendiera que somos iguales odio cuando en las manadas tratan a las personas de manera tan despectiva-dijo la luna-trate de que creciera con esa idea, me alegra lograrlo a pesar de que compartiera tanto tiempo con sus amigos de otras manadas y sus ideas.

-siempre fue un buen compañero-

-Asi que eres su mate- dice repentinamente, por lo que me atore con las galletas y comencé a toser.

-¿Como lo sabe?- mencioné cuando pude dejar de toser

-No olvides que pase por lo mismo..

Iba a continuar cuando el Alfa y Ezra entraron a la cocina, el Alfa saludo a la luna con un beso, Ezra me evito y se sentó a mi lado.

-Asi que Callie es tu mate-menciono a Ezra, el mismo se puso pálido y asintio de manera duditativa.

Tome la última galleta y le di un mordisco.

-Madre, ¿tienes más galletas?, Hace tiempo que no las como- pregunto Ezra a lo que su mamá negó, extendí la galleta que estaba comiendo para que tomara un trozo, lo vi dudar y me sentí mal, pareciera me tuviera asco, sus papás también se quedaron viéndolo y decidió recibirla comiendola.

-y si hablamos un rato en el jardín, está haciendo un buen clima-dijo el Alfa, asentimos y saliendo de la cocina resbale, casi caigo al suelo pero Ezra me sujeto de la cintura, y me abrazo por la espalda, me soltó unos segundos después, su papá lo veía divertido, hablamos hasta que se hizo la tarde Ezra estuvo lejos de mí y eso me hacía sentir triste, la hora de irme llegó inminentemente, no me quería ir y me decepcionaba que Ezra se comportará como si me quisiera lejos.

-Alpha, Luna, es hora de irme a casa, fue un placer poder conversar con ustedes- comencé a despedirme.

-Te acompañamos a la salida-dijeron al pararme Ezra sujeto mi mano.

-Quedate en el cuarto de invitados, avisa en tu casa, mañana te llevo-asenti y su teléfono de nuevo comenzó a sonar, me soltó y se fue lejos a contestar, que ocultara.

RECHAZADA POR MI MATEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora