XVI

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Miércoles 24, Febrero 2016.

Ya habían pasado unos días desde el fin de semana, donde no había asistido al trabajo por pedido de Chifuyu.

A pesar de no salir de casa me levantaba muy temprano, les hacia el desayuno a los chicos y los despedía. Una vez la casa vacía me sentía aburrida, así que recurría a algo que solía hacer cuando faltaba al colegio y aún vivía con mi madre y Kei;

Poner la radio en una vieja emisora de música y limpiar el departamento. Barrer, lustrar, cambiar sábanas, doblar ropa y colocar la lavadora. Eran cosas que hacía para adelantar los quehaceres y ayudar a mamá.

A mitad de esa mañana me interrumpió el llamado de la puerta, vi por la mirilla y era un hombre que me resultaba familiar, así que le abrí.

-Señorita Baji, otra vez unas flores para usted- Vi el ramo de rosas negras en sus manos.

-Gracias- Asentí con la sonrisa más linda que pude. El adulto se despidió y cerré la puerta.

Admiré el ramo, oliéndolo y teniendo un leve mareo por el repentino y fuerte aroma, me percaté de que esta vez sí había algo escrito en la tarjeta que lo adornaba.

"Tiempo sin vernos, Bella. No has frecuentando a la tienda de mascotas así que me tomé la molestia de mandarte las flores a tu vivienda. Disfrútalas y vuelve pronto♡."

~~~

-¡Espere!- No sé en qué momento había bajado las escaleras a toda velocidad y alcanzado al hombre -Podría darle esto a quien envía la flores- Le extendí un papel doblado a la mitad.

-Claro jovencita-

-Gracias, tenga lindo día- Volví al depa y me propuse hacer otra cosa que no hacia hace mucho;

Llamar a mamá.

Me temblaba el pulso mientras buscaba el contacto en mi celular. Dude un momento si marcar "llamar" o seguir atrasando las cosas.

Mi dedo se movió solo y cuando quise cortar ya había respuesta del otro lado.

-Hola mamá- Susurré suavemente. Si bien Ryoko no es mi madre biológica, es lo más cercano a una figura materna que tuve en mi vida.

-¡Disuko, cariño! Hacía tiempo no oía tu voz, suenas tan madura- Escuchar la voz de mamá tan delicada me encogía el corazón.

No sabía que decir, la voz no me salía.

-Te extraño mucho mamá- Inevitablemente se me escaparon las lágrimas al decir esa frase.

-Yo también a ti cielo, podrías venir a visitarme algún día-

-Claro que lo haré- Afirme limpiándome los ojos.

-Cuéntame que es de tu vida-

-Tengo muchísimas cosas que contarte, mira- Iba a hablar, pero una llamada entrante empezó en mi teléfono.

Fuyu...

-Si, te escucho- Dijo del otro lado mi mamá.

-Espera mamá, tengo otra llamada, dame un momento- Conteste.

-¡Disuko!- Lo escuché respirar agitando.

Algo anda mal.

-¿Fuyu? ¿Qué pasa? ¿Está todo bien?-

-No, Kazutora, él, esta todo golpeado en la parte trasera de la tienda, no sé qué hacer, no sabía a quién llamar, yo- La sangre se me heló de solo imaginarlo.

-No hagas nada, voy enseguida- Colgué la llamada.

-¿Hija?-

-Mamá, tengo una urgencia, debo irme, yo, prometo llamarte- Dije mientras buscaba mi abrigo y las llaves.

-Ve, no te preocupes- Dijo con voz suave.

-Gracias, te amo-

-Y yo a ti- Colgó la llamada y salí del depa a paso rápido.

Por favor que estén bien.

~~~

Narra Hanma

-Señor Hanma, le envían esto- Me dieron un papel mal doblado a la mitad.

-No sé quién seas o como sabes la dirección de mi casa, pensar eso me inquieta. Si, no he ido a trabajar porque no tengo muchos ánimos, aunque pronto volveré. Gracias por preocuparte y gracias por las flores, me animas las mañanas. Es un detalle dulce, aunque no sepa de quien vienen. Firmando: Disuko- Leí en voz baja.

Oh~ No creí que te afectará tanto la muerte de un asqueroso millonario, tienes un corazón blando. Tal vez pronto podamos hablar frente a frente, por ahora cuida de tus amigos.

Pensé con una sonrisa traviesa en el rostro.

03/06/22
Hio!
Nuevo cap!
Nada que decir- me gusto-
Espero les haya gustado-
Nos leemos!-
Cya!

Rosas Negras|| Hanma ShujiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora