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Marcelino terminó su discurso, largo pero tan emotivo y sincero, que hizo que Luisita se acercara a abrazarlo en cuanto terminó.

- Y ahora vuestros votos, chicas – dijo mirándolas a ambas – Amelia, ¿empiezas tú? – preguntó el hombre con una sonrisa y la morena asintió

Tomó aire, agitó levemente las manos como si quisiera que los nervios fluyeran hacia afuera, y posó sus ojos miel en los de la rubia dedicándole una sonrisa que, como si se tratara de un espejo, se vio correspondida al instante por su novia. Intentó no pensar en nada, ni siquiera en todas las personas que estaban observándola, y empezó a hablar.

- Luisi, me encantaría poder recordar la primera vez que te vi y te tuve entre mis brazos, porque ese tuvo que haber sido el día más importante de mi vida – dijo y la rubia sonrió con los ojos humedecidos – No siempre ha sido fácil, hemos tenido nuestros desencuentros, pero si hay algo que admiro de nosotras es la capacidad que tenemos para sobreponernos a las adversidades y salir adelante, siempre juntas, siempre de la mano. Quiero seguir andando contigo, creciendo contigo, de la mano, y descubriendo lo que la vida tiene preparado para nosotras. Te quiero Luisita, y espero que nos sigamos eligiendo cada día y que despertemos juntas por las mañanas hasta que seamos viejecitas – dijo soltando una leve risa por lo último y Luisita no pudo evitar morderse el labio inferior y soltar algunas lágrimas

Todos estaban conmovidos por las palabras de Amelia, sobretodo María, que aún no sabía por qué se había sentido identificada con esos votos. Solo podía pensar en Nacho y en las ganas que tenía de decirle que los días en los que despertaba con él a su lado, eran mucho mejores que los que despertaba sola en su cama. Fue Marcelino quien la sacó de sus pensamientos, cuando le indicó a Luisita que era su turno de hablar. La rubia estaba muy sensible aquel día, desde que salieron muy temprano por la mañana del registro civil que no paraba de soltar lágrimas. Respiró profundamente, casi con el corazón afuera del pecho de lo nerviosa que estaba, se acercó a Amelia y la tomó de las manos.

- Mi vida, pienso en ti y me dan ganas de salir corriendo contigo y darle la vuelta al mundo - dijo y la morena rió, contagiando la risa a todos los presentes - Amelia, ¿recuerdas cuando tenía diez años y te dije que te iba a fastidiar toda tu vida? – continuó y Amelia asintió con una sonrisa – Pues vaya que lo he cumplido y lo seguiré cumpliendo... Contigo he aprendido que el amor es una especie de fuerza incontrolable que me hace sentir muy pequeña y vulnerable, pero a la vez extremadamente fuerte y poderosa. Andar de tu mano es lo más bonito que me ha pasado, y esto no va de anillos o promesas, ni de decir 'si quiero' así sin más, esto va de hechos, esto va de las veces que hemos sido fuertes juntas, de las veces que nos hemos enfadado y hemos hablado para aclararnos, de las veces que hemos hecho el amor en cualquier sitio sin que nos importara ni siquiera el tiempo – dijo y la morena se sonrojó, y por primera vez se sintió algo incómoda delante de su suegro, pero Marcelino tenía una sonrisa puesta en la cara y estaba completamente abstraído por todo lo que estaba diciendo su hija – Si quiero todo contigo Amelia, pero también quiero decirte que pudimos, que podemos, y que espero que siempre podamos ser capaces de elegirnos, pase lo que pase – se acercó más y la abrazó con fuerza

- ¡Esperad, hija! ¡Que faltan los anillos! – exclamó Marcelino y miró a Manolita para que se los alcanzara

Luisita tomó el anillo de esmeralda y lo colocó en el dedo anular izquierdo de Amelia, y lo mismo hizo la morena con el anillo de Rosa de Francia, colocándolo en el dedo anular izquierdo de la rubia. Se miraron por unos segundos, y sin esperar a que Marcelino dijera que ya se podían besar, se lanzaron una a los labios de la otra con intensidad pero con dulzura, intentando grabar a fuego aquel momento, con el sol tibio inundando aquel jardín, y los aplausos de todas las personas que habían elegido que las acompañaran aquel día. 

Te amaré por siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora