𝙸𝙽𝙵𝙸𝙳𝙴𝙻𝙸𝙳𝙰𝙳 | ♡ 𝙹𝚊𝚎𝚖𝚓𝚞𝚗 ♡

𝙲𝚊𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟸𝟽

Al día siguiente los omegas amanecieron en una posición algo comprometedora, por alguna extraña razón del sonambulismo, Haechan abrazaba la cintura de Renjun, pasando la pierna por encima de su cadera, también, en algún momento de la noche se quedó sin camiseta.

Un sonrojo muy fuerte atacó sus mejillas, por primera vez se sentía en verdad muy apenado. Separó su cuerpo con cuidado, viendo dormir a Renjun, esta vez noto que sus pestañas eran largas y oscuras, contrastando perfectamente con su piel.

La puerta se abrió lentamente, dejando ver a un Jaemin con cara de pocos amigos del otro lado. Este le hizo una seña de que se levantara. Haechan lo siguió en silencio hasta la cocina.

― Cuando regresemos del hospital te irás a instalar en mi departamento, ¿Comprendes? ― habló firme.

Haechan asintió y suspiró.

― Está bien, lo entiendo, ¿Puedo pedirte una cosa? ― lo miró dubitativo.

― Adelante. ― Jaemin blanqueó los ojos.

― Tu amistad...Ojalá algún día volvamos a ser los amigos que éramos, y me enseñes a ser un buen alfa. ― Sonrió, respirando aliviado.

― ¿Alfa? ― lo miró confundido.

― A nivel hormonal no puedo llegar a eso, como mucho tal vez logre vivir como un beta, pero, si tengo que ser honesto, eres el tipo de alfa que siempre quise ser. ― Sus palabras fluyeron cargadas de sinceridad.

Jaemin sonrió, halagado, nunca se consideró ejemplo de nada, pero si el omega podía verlo sin rencor, sin pensarlo como un fracaso en su vida ya era suficiente.

― Me siento muy halagado en primer lugar, pero seré sincero, incluso yo estoy aprendiendo, junto a un alfa siempre hay un valioso omega que lo convierte en una mejor persona, Renjun es esa clase de omega, él es fuerte, decidido, independiente, si alguien te dice que los omegas son débiles es porque no lo conocen, ― río. ― Siempre pensé que protegería a un omega, pero, me doy cuenta que Renjun es quien ha estado cuidándome, y se lo agradezco.

El omega en cuestión sonrió escondido en el pasillo, decidió aparecerse por la entrada, ambos chicos voltearon a verlo, su imagen era realmente tierna, el cabello algo revuelto y la carita de recién levantado le daban un toque especial.

― Resulta que soy quien cuida de todos y apenas me enteró, ― sonrió, siendo abrazado por Jaemin, quien colocó sus manos en la cintura del omega.

― ¿Qué haríamos sin ti? ― plantó un beso en su nuca.

― Quién sabe, tampoco soy tan esencial. ― Se sonrojo.

Terminada la conversación los tres se dedicaron a preparar el desayuno, claro que Haechan ya se sentía mucho mejor, pero Renjun insistía con que una revisión médica no vendría mal.

El momento fue agradable para todos, tras el desayuno se prepararon para el hospital, según Jaemin, desde ahí viajarían a la casa donde el menor estaba viviendo y mudarían sus cosas al departamento vecino. Sin dudas tendrían un día algo ocupado, por suerte sus puestos de trabajo estaban cubiertos. De camino al hospital Renjun supo que Kun puso a Jungwoo, el chef de confianza a cubrirlo, mientras tanto Jaemin continuaba confiando en su hermano para los negocios familiares.

Una vez llegados al hospital Haechan fue ingresado en guardia, dada la baja cantidad de pacientes no pasó mucho tiempo antes de que sea atendido. En lo que esperaban Renjun decidió hacer una consulta extra.

― Tengo algo que hacer en el ala de psiquiatría. ― aviso al alfa.

― ¿Quieres que te acompañe? ― quiso levantarse del asiento, más el omega se lo impidió.

― No te preocupes, seguro Haechan no tarda en salir, yo voy y vuelvo. ― beso sus labios y se alejó.

Le tomó unos minutos recordar el camino y llegar al sitio indicado. Allí fue recibido por la doctora Kim, una vieja amiga.

― Cariño, ¿Por fin se decidieron? ― pregunto esperanzada.

― Es una larga historia Noona, verás... ― El omega le platico a su mayor todo lo acontecido y lo que esperaba conseguir ahora. ― No me dará el divorcio por las buenas y no sé qué hacer.

Su angustia podía notarse a kilómetros.

― Trabajaremos en esto juntos, Mark debe ponerle un alto a su lobo por sí mismo, entiendo que tenga miedo, pero el primer paso es que él entienda que está mal. ― hablo calmada.

― Lo sé, debe ser fuerte. ― suspiró.

― Si... ¿Por qué ese empeño en ayudarlo? ― El omega sabía que a ella no podía engañarla.

― ¿Acaso vio a su familia? Soy la única familia cuerda que tiene, me duele dejarlo solo, su hermana es muy manipuladora, puede ponerlo peor de lo que ya está.

Kim sonrió compasiva, como psicóloga, conocía a Renjun desde sus veinte años, el omega fue su primer paciente, comenzó a investigar la patología de Mark después de enterarse del terrible incidente.

― Entiendo, no dejaremos que eso pase, tu solo convéncelo de internarse, nosotros haremos el resto. ― tomo las manos del omega, lucía preocupada por él. ― Haz pasado por muchas cosas, tengo un espacio libre en mi registró ¿Quieres...?

No sabía si Renjun estaba dispuesto a intentar, pero el acompañamiento psicológico podía serle de ayuda al menos para desahogarse. El omega asintió, recibiendo un abrazo de la beta.

― Unas sesiones estarían bien, he estado muy tenso últimamente, ayer tuve un ataque de pánico horrible.

El omega se explayó con su psicóloga, contándole de los pequeños avances que había conseguido. En la guardia, Jaemin recibió a Haechan después de que lo revisaran. En palabras del médico, Renjun le hizo excelentes vendajes, aun así, le hicieron pequeñas suturas para asegurarse de que la herida cierre correctamente.

― ¿Dónde fue? ― preguntó el omega frente a la ausencia del omega mayor.

― No lo sé, dijo que tenía algo que hacer en psiquiatría. ― respondió el alfa.

Tras despedirse de la doctora, Renjun regreso al sector principal del hospital e ingresó al baño. Allí sacó una botella de agua, debía tomar el medicamento que le receto el doctor para las convulsiones. Llevó una mano a la marca que pronto se convertiría en una cicatriz, la misma comenzó a arder, Renjun abrió el grifo de agua fría y se humedeció la marca. Su vista comenzó a nublarse, no entendía lo que le pasaba, pero no estaba bien.