1. Animales fantásticos: El magizoologo y la auror

7. El fantasma de Leta

Newt se despertó al amanecer, como era su costumbre, aunque aquella mañana le dolía la cabeza y sentía la boca absolutamente seca; también daba gracias por que aún no hubiera mucha luz. Se juró no volver a beber en su vida, odiaba esa sensación de malestar. Fue a incorporarse para tomar un poco de agua del vaso que tenía en la mesilla, cuando se percató de que había alguien más junto a él en la cama.

- ¿¡Qué!? - Exclamó, llevándose automáticamente una mano a la boca para acallar el grito, al ver a Eulalie Hicks acurrucada a su lado, profundamente dormida. Pickett se asomó desde el bolsillo de la parte de arriba del pijama de Newt, adormilado y algo molesto por haber sido despertado. - ¡Lally! ¡Lally, despierta! - La llamó en voz baja, sacudiéndola de un hombro para que despertara.
- Mmmm... - rebulló la profesora, sin abrir los ojos. - Cinco minutos más, mamá... - murmuró la chica.
- Lallyyyy - siseó él, molesto, sacudiéndola con más fuerza.
- Ayh, Theseus... no seas tan bruto - se quejó Lally, por fin despierta, pero sin darse cuenta de quien le estaba hablando. Aquello confirmó lo que Newt ya pensaba, que la profesora se había metido en su cama creyendo que era la de Theseus, lo cual le hizo enrojecer.
- Lallyyyy - volvió a sisear el magizoologo.
- ¿¡Newt!? - Exclamó Lally al verlo allí, mostrando su provocativo camisón al incorporarse. - Ayh... por...
- Eso digo yo... en el nombre de Morgana... ¿qué haces aquí? - Exigió saber Newt, enfadado. - Y... yyy.... yyy... así vestida o desvestida... no sé...
- Creí que era la habitación de Theseus - explicó Lally, sonrojándose también ante todo el lío.
- Ya... eso es obvio - murmuró Newt, exasperado. -Tienes que salir ahora mismo de aquí antes de que alguien...

Justo en ese momento, la puerta se abrió y la cabeza despeinada de Theseus Scamander asomó por ella.

- ¿Newt? - Preguntó antes de percatarse de lo que realmente pasaba. - ¿Estás bien? He oído... - Levantó la mirada y vio la escena: Newt y Lally en la cama de su hermano, sonrojados. - Voces...
- Theseus... - murmuró el magizoologo maldiciendo el oído de auror de su hermano mayor. - Esto...
- ¿¡Se puede saber que está ocurriendo aquí!? - Tronó Theseus, blanco de ira, abriendo la puerta de golpe. - No... no me lo digáis... es más que obvio...
- The... Theseus... no es lo que... - intentó calmarle Lally, tapándose con las mantas, aunque daba una impresión peor con ello.
- Ha sido un malentendido, Theseus... - intentó explicar Newt, agobiado. 

Para acabar de empeorar las cosas, alertada por el grito de Theseus y el golpe de la puerta, Tina apareció en el umbral de la puerta. La auror estadounidense abrió mucho los ojos al encontrarse con aquella situación; se llevó una mano a la boca, empezando a enfadarse tanto como el auror.

- Oh... por las barbas de Merlín - murmuró Newt al verla, ocultando la cara entre las manos.
- ¿¡Qué... qué está pasando aquí!? - Preguntó Tina, viendo como su mejor amiga y su novio estaban juntos en la cama y ella con un provocativo camisón.
- Yo te lo diré, Tina - soltó Theseus, furioso. - Newton ha decidido que era el mejor momento para vengarse de mí, ¿no es así? - Su hermano pequeño levantó la cabeza extrañado, sin entender a que se refería. - Leta... nunca pusiste perdonarme que le pidiera a Leta que fuera mi novia y luego mi prometida... acostarse con esta mujer es tu revancha - dijo "esta mujer" con sumo desprecio, mientras Newt lo miraba con expresión herida.
- ¿Cómo puedes decir algo así...? - Susurró en voz baja y decepcionada, luego miró a Tina. - Tina... te lo aseguro, todo ha sido un malentendido... creeme, por favor...

Tina negó con la cabeza, apesadumbrada; las palabras de Theseus habían hecho mella en ella, demasiadas veces había pensado que Newt seguía enamorado de Leta Lestrange, incluso después de que la pobre joven fuera asesinada por Grindelwald.

- No... no... esto nunca iba a funcionar - murmuró, nerviosa. - Venir aquí desde New York fue un error... el fantasma de Leta Lestrange siempre planeara sobre tus sentimientos.