ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟙𝟙

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BATALLA CON FRIALDAD


Keizou: Hey estás mejor que en la mañana, te sientes mejor ahora? Este chico no me dice su nombre así que bueno.. haz que lo escupa antes de que regrese..

- Hakuji se quedó cuidando a Koyuki mientras que ambos estaban en un silencio profundo -.

Koyuki: … - ve el rostro de Hakuji - Tu.tu rostro… duele.. estás bien..?

"Te curare seguro".
"Te ayudare".
"Te protegere".

Pov.Akaza.
Mi vida.. no valía nada.. llena de nada más que promesas vacías..

……

-Akaza cuidaba de Koyuki como limpiando su sudor y cambiando de almohadas -.

Koyuki: Lo siento por todo.. es mi culpa que no puedas entrenar o ir a jugar..

Koyuki era una persona debil, tiene que ser atendida toda la noche y tomar agua frecuentemente y cuando debe ir al baño tenía que cargarla hasta allá.

Hakuji: Nunca he pensado en jugar antes, cuando estoy libre solo entreno así que no te preocupes.

Koyuki: En la noche habrá fuegos artificiales, así que ve..

Hakuji: Tal vez. una vez que mejores, te llevaré al puente para que podamos verlo.

Koyuki: .. Eh..?

Hakuji: Incluso si podemos ir hoy, habrá otro el año que viene, entonces podremos ir - después de terminar lo que tenía que decir vio a Koyuki sollozar -.

Lo único que me molestó de cuidarla fue que lloraba en medio de la conversación, de seguro es deprimente estar en la cama cuando estás enfermo, me siento incómodo.

Mi sensei que ni siquiera era samurai consiguió esta tierra y el dojo, había salvado a un anciano que estaba siendo atacado por bandidos, como no tenía un sucesor se lo entrego a el ya que el anciano vio que tenía un gran estilo de pelea.

Pero había gente que quería la tierra de ellos y no estaba contentos. El dojo Kenjutso del lado acosaba al dojo soryuu.
Por eso el dojo no tenía alumnos, pero entrenando aquí y cuidando de Koyuki.. sano mi corazón..

Después de tres años cumplí dieciocho años y Koyuki cumplió dieciséis, ella dejo de estar en reposo y mejoraba cada dia, estaba empezando a vivir normalmente.

Keizou: Hakuji.. ven..

Hakuji: Voy..

……

Keizou: puedes tomar mi dojo, Hakuji? Y también puedes tener a Koyuki también.

Hakuji: .. ah..? - volteo a ver a Koyuki ma cual ella estaba esperando a que aceptará con un gran sonrojó, al ver a la hermosa mujer en ese estado Hakuji también se sonrojó -.

Tenía tatuajes de un criminal.. nunca creí que podría tener una vida normal, en especial a alguien quien amar, tal vez Oto-san tenía razón, podría vivir normalmente. Mi vida se podía arreglar, esa gran posibilidad de arreglar mi vida creció tanto que no la pude controlar. En eso momento quería proteger a dos personas incluso si costaba mi vida. Nunca imaginé que ambos serían envenenados hasta la muerte..

Fue hacia la tumba de Oto-san para hablarle sobre mi matrimonio y volví antes de que se pusiera el sol.. antes de llegar sentí un gran pesar, este sentimiento me daba escalofríos y fue ahí cuando me enteré que todo ellos murieron envenandos, incluso a Koyuki.

Yo en Kimetsu no Yaiba - UNIVERSO A-01Donde viven las historias. Descúbrelo ahora