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Nota: A este cap no le pongo trigger warning en el título porque lo que viene a continuación ya se avisa desde la descripción de la historia:( 

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– Hace unos instantes, las complicaciones en el pulmón de Reki llevaron su cuerpo a un punto en el que ya no pudo resistir más –informó el doctor a todos los presentes–. Lamento mucho su pérdida, señora Kyan. La hora del deceso fue...

Masae, la madre de Reki, no aguantó más y cayó al suelo sollozando sin remedio, al mismo tiempo que gritaba que su niño había muerto. Nanako se arrodilló al costado de ella, tratando de consolarla, pero ni siquiera ella pudo evitar llorar al saber la noticia. También había conocido a Reki y había llegado a quererlo como a un familiar. Las dos mujeres se abrazaron en el suelo del hospital, sin saber qué hacer ahora que el chico no estaba.

– ...a las 10:30 de la noche. –terminó de decir el doctor, apenado por tal reacción.

Justo detrás de ellas, Langa se quedó helado por la noticia. No lloraba, no gritaba... Ni siquiera podía escuchar a los demás.

Su cerebro se había quedado en trance desde que escuchó la palabra "resistir". No concebía la idea de la muerte de Reki, pues siquiera pensar en eso era muy tonto. Él no podía estar muerto, no había manera. Ya había perdido a su padre, el destino no podría ser tan cruel como para arrebatarle otra persona valiosa.

¿Acaso no iba a invitarlo a salir hacía unas horas? Langa intentó convencerse de que había caído de la patineta en el camino, se había golpeado la cabeza y estaba teniendo una pesadilla. Debía ser eso, era lo más coherente en su mente.

Son mentiras, pensó. Solo son mentiras de mi cabeza.

Incluso, ese 9 de febrero a las 2:30 de la tarde, tan solo unas horas antes, Langa conversaba con él por mensajes de texto.

El canadiense estaba en clase, ansioso, deseoso de volver a ver a Reki esa misma noche, apenas este regresara de visitar a su padre.

Obviamente, ya había escrito todo lo que iba a decirle esa noche. Nanako, quien estaba igual de entusiasmada que él, reservó una mesa para esa noche en un lugar muy lindo, en el que a Langa y a Reki les encantaba patinar por la vista.

Al acabar su última clase, revisó de nuevo su celular para ver si había más mensajes de Reki –algo que realizaba cada 10 minutos desde que despertó esa mañana– y se dio con la sorpresa de que este le había enviado una foto, en la que se podía observar un peluche de un oso polar.

Como no entendía muy bien por qué se la había enviado, le contestó con lo primero que se le ocurrió, solo para seguirle la conversación:

LANGA: Está muy bonito. ¿Dónde lo viste? 2:31 P.M.

REKI: Una tienda cerca de la casa de mi papá 2:31 P.M.

REKI: Me recuerda a ti:) 2:32 P.M.

LANGA: ¿Por qué?:( 2:33 P.M.

LANGA: ¿Así de pálido me veo? ;-; 2:33 P.M.

REKI: Todo lo que se relacione con el frío me recuerda a ti (-_-)' 2:35 P.M.

REKI: Creo que es porque usas colores fríos solamente. Tú me recuerdas al invierno 2:36 P.M.

El canadiense sintió mucha alegría al leer eso. Su amigo había observado bien cuáles eran sus colores favoritos, tal y como él había notado los del otro.

LANGA: Y tú usas solo colores cálidos. Tú me recuerdas al verano 2:37 P.M.

Langa guardó su celular en el bolsillo de su saco, tomó su mochila y se encaminó a la parada del bus, emocionado por llegar a casa. Ya en el bus, sentado y en marcha, sacó la hoja en la que estaba su discurso de esa noche. No era un texto muy extenso, pero él necesitaba aprenderlo de memoria para no arruinar el momento, pues su improvisación a veces podía ser un fracaso total.

Ghost of You (Renga - SK8 The Infinity)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora