Hoy me gustaría decirle a un amigo hoy que me siento bien.
Que tal vez los días no han sido tan emocionantes pero que puedo disfrutar los días y que vivo en gratitud.
Me gustaría contarle que antes pensaba que mi vida se estaba estancando, que me sentí fracasada y que tenía miedo de convertirme en alguien infeliz por no haber luchado por aquello que me da felicidad. Pero que estoy aprendiendo, que la vida te va enseñando poco a poco y que ahora tengo mucha más paciencia que antes.
Le contaría también que siento que tengo la suerte que pocos tienen de poder sentir paz en el corazón, y que soy tan feliz que si me llegara a morir mañana del único arrepentimiento que podría causarme remordimiento fuese no haber sufrido un poco más. Pero solo procedente de aquel sentimiento que tanto placer a la vez causa.
Remarcaría que le deseo lo mismo que a mi, que ojalá pudiese poner una sonrisita en su cara por un mínimo y absurdo detalle pero al fin y al cabo acaba completando un poco más lo que somos por dentro.
También le reconocería con una sonrisilla avergonzada lo espiritual y lo hippie que me he vuelto. Que la ambición hay veces que pierde su fuera y que hay veces que quisiera ser un poco más una bussines woman que una loquilla desinteresada.
Me gustaría decirle a mi amigo que muchas veces soy muy feliz, y cuando no lo soy, estoy buscando de nuevo esa felicidad; que intento no hacer daño a nadie y que siempre intento crear un mundo mejor para mi y para los demás. Y aunque muchas veces mis planes no siempre acaben saliendo como yo quería, aunque sienta ira o tal vez hayan dolores que regresan, o el ego gane terreno en mis guerras...sigo haciendo el intento de levantarme todos los días con ganas de ser una mejor persona, aunque mi miedos quieran pintarme de otros colores más oscuros.
Y por último me gustaría decirle que soy fuerte y valiente, y que espero serlo siempre porque la vida da muchas vueltas y nunca sabes que te puedas encontrar en la siguiente esquina; que espero que no se me caigan mis gafas imaginarias que hacen que vea la vida de esa manera tan extraordinaria, con sus colores tan vivos y las sensaciones tan reales que, al final, que hacen que al final solo quede una única esencia: la belleza de vivir. Que ojalá siempre tenga esta sed de curiosidad por todo lo que nos rodea y nunca pierda mis valores ni el respeto que tengo hacia mi misma.

ESTÁS LEYENDO
Cuando hay silencio
DiversosEsto es como la vida... Incomprensible, un caos, pero alguien podría sentirse identificado. Ojalá cada palabra de este pequeño diario te llegue hasta el alma.