Libro 1: Cambia Formas. Capítulo 1.

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Una joven rubia se encontraba caminando por la calle, era un día lluvioso y no llevaba paraguas. Ella caminaba tranquilamente bajo la lluvia, pues le encantaba la sensación de libertad que llegaba a ella estando bajo esta.

Siguió caminando con una sonrisa tranquila mientras los demás a su alrededor corrían escapando de las gotas de agua, cubriendose con sus bolsos, chaquetas o carpetas para no mojarse. Ella siguió caminando hasta que llegó frente al bosque, y recordó lo que dijeron sus compañeros de clases hace un par de días:

- ¿ya escucharon? ¡Dicen que hay un monstruo en el bosque! - comentó uno.

- dah, por algo lo llaman el bosque encantado. Hay miles de mitos sobre criaturas extraordinarias dentro de ese bosque, pero sólo son eso, mitos - habló otro, tranquilo y despreocupado con un semblante aburrido.

- ah ¿si? ¡Entonces te reto a entrar al bosque encantado y pasar una noche allí! si logras llegar vivo mañana y no vez nada, tu ganas. Pero si no vuelves o vez algo allá, ¡nosotros ganamos y sabremos que las cosas sobrenaturales si existen! - dijo el fanático de lo paranormal en el salón.

- me parece una estupidez, pero esta bien. Les demostraré que todo eso son sólo cuentos para asustar a los niños - al salir de clases ese día fueron a sus casas para cambiarse rápido y lo acompañaron hasta la entrada del bosque para despedirlo y él se llevó su bolso preparado para todo por si había algún animal peligroso.

La noche paso y a la mañana siguiente no asistió a la escuela. La policía fue a buscarlo y lo sacaron del bosque traumado y con un brazo roto, diciendo haberse topado con un extraño ser con apariencia de demonio y que le había mostrado cosas perturbadoras que era incapaz de nombrar. El suceso dejó a todos callados y asustados.

Menos a la rubia.

Ella miró el bosque y sonrió de medio lado.

- eso le pasa por subestimar a la madre naturaleza. ¿Me pregunto cómo será este bosque?, nunca he entrado... una mirada no hará daño - empezó a caminar a la entrada del bosque.

- ¡Elizabeth! ¡¿Que crees que haces?! ¡Eso es peligroso! - la llamó uno de sus compañeros que casualmente pasaba por ahí y la vio. Ella volteó y lo miró.

- descuida, de cualquier forma si algo me pasa no será tu problema, ¡nos vemos mañana en la escuela. O tal vez no! - dijo divertida. Pero de pronto escucharon disparos, al mirar hacia atrás vieron a hombres vestidos de negro y enmascarados acercándose.

El chico salió corriendo por la ciudad, despavorido, mientras que la chica no tuvo más opción que entrar corriendo al bosque, escapando de los hombres. Lograron herirla en uno de sus costados, pero siguió corriendo y logró perderlos.

¿La mala noticia?: Ella también se había perdido.

No sabía en qué parte del bosque estaba ya que no se había fijado al correr por su vida. Miró por todas partes tratando de reconocer algo, pero no había nada.

Suspiró rendida y se sentó recostada a un árbol. No tenía padres ni amigos, así que probablemente no se molestarían en enviar a alguien a buscarla, y ya se estaba haciendo de noche, así que era mejor esperar a que amaneciese para buscar el camino de regreso, después de todo la chica era muy buena en excursiones y siempre que alguien se perdía en estas ella era capaz de encontrarle.

Las Crónicas Del Bosque Encantado. Libro I: Cambia Formas(Otherkins Transmorfos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora