Capitulo 8:

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Narra Harry:

Llevo cuatro horas encerrado en el baño y ella sigue afuera. Me esta entrando sueño y tengo hambre. Hace rato que no grita y creo que se a ido. Pongo la oreja en la puerta y espero. No ahi ruido. Tal vez ella se a ido a pie. Si lo ha echo ahora mismo estara con el gilipollas ese. La idea me parece casi dolorosa.
Aun que, ¿a mi que me importa? Ella no me importa. Pero mierda, tengo esa sensación que no se como coño explicar y que no me gusta. No me gusta que este con él. No me gusta que a ella le guste. Si ella se a ido con él juro por Dios que ire a buscarla, le partire la cara al capullo y la arrastrare a casa si es necesario.
Abro la puerta poco a poco y casi me rio cuando la veo echa un ovillo en el suelo, durmiendo. Se a cambiado de ropa. Lleva un pijama fijo de colores.
Siento una punzada de culpa. Ella se a quedado dormida en el suelo. Tendrá frio.
Me arrodillo a su lado y la apartó un mechón de cabello negro que se le a caido en la cara. Tiene un pelo tan negro. No parece real. Es tan sedoso y brillante.
El labio inferior le sobresale. Sonrió. Siempre le pasa cuando duerme.
Con cuidado la levanto del suelo. Ella no pesa nada. Es pequeña y delgada asique es facil cogerla. Apoya su cabeza en mi pecho y se remueve. Susurra: Letras. Y vuelve a dormise. Ella hasta dormida piensa en libros y letras.
Abro la puerta de una patada y la acuesto en mi cama. La arropo y yo me voy a su cama.
Las sabanas huelen a ella. Piña y coco. Y tiene libros por todos lados. En las estanterías, debajo de la cama y encima de ella. También tiene muchos discos y sus casos cuelgan de el cabecero. Lo que mas le gusta. La música y los libros.
Y así, rodeado de ella pero muy lejos, me duermo.

Narra Danniella:

Abro los ojos. Harry. Las llaves. Salto. Me sorprende estar en la cama. En la cama de Harry. ¿Como he llegado aqui? Él no esta por ningún lado. Me levanto. Voy al baño. No está. Estoy apunto de bajar cuando he escucho un suave ronquido. Corro a mi cama y me quedo paralizada. Harry esta durmiendo en mi cama. Tiene una expresión pacífica. Tendria que despertarle. Pero me da pena. Pero voy a despertarle. Necesito una explicación. Cierro para que no se escape. Doy dos palmadas y se remueve. Tiene un sueño muy ligero. -¡Eh tu! -grito.
Abre los ojos de sopetón.
-Mierda. -murmura.
-¡¿Es que tu eres gilipollas?! -y me avalanzo sobre él. Empiezo a darle puñetazos mientras él se cubre con los antebrazos.
-¡¿Quieres parar?! -me brama.
-¡Dame una jodida explicación! -digo dándole un tortazo en la boca.
-¡Me has echo daño!
-¡Explicamelo!
Se levanta y mi boca cae abierta. No lleva pantalón. Solo lleva una camiseta de algodón y un bóxer negro. Me alejo unos pasos abrumada por su cercanía.
-¿Quieres una explicación?
-Si.
Nunca en doscientos años me hubiera imaginado una explicación cómo aquella.
Me agarro por la cintura, y se lanzó a mi boca con agresividad. Gemi en su boca. Pego su cuerpo al mio y me empujo contra la pared. Su lengua se unio a la mia con un baile lento volviendome loca. Sus manos se deslizaron hacia abajo y empujo su pelvis con la mia. Joder. Me levanto y envolvi mis piernas en su cadera. Me empujo mas fuerte contra la pared, moviéndose. Gemi mas fuerte. No podía parar. No quería parar.
Él se sento en la cama llevándome con él.
No se porque, pero empecé a moverme contra él. Deprisa. Sentía fuego y algo me decía que esa era la única manera de apagarlo. Lo unico que nos separaba eran las finas fibras de nuestra ropa.
Le sentia duro contra mi. Joder. Queria más. Esto se quedaba corto. Metí las manos debajo de su camiseta. Roce la línea de vello de su bajo vientre y él gimió. Descendí hacia el elástico de su calzoncillos. Mientras su mano empezó a trepar por el interior de mi muslo y...
-¡Chicos! -Tia Anne cerró la puerta de abajo de un portazo. - ¿Donde estáis?
Sus separamos al instante. Nos miramos con ojos como platos.
-Mierda. -musita Harry.
Salto de su regazo y me pongo de pie planchando mi ropa con la manos. Harry se levanta y corre hacia su habitación. Le sigo y veo como se pone unos pantalones de pijama.
-Actua con normalidad. -dice mirándome.
Asiento demasiado nerviosa para hablar.
-¡Chicos! ¿Que hacéis?
Nos miramos y yo me rio nerviosamente. Harry sonrie y abre la puerta.
-Estamos aquí mama. -dice saliendo.
Le sigo de cerca y me quedo paralizada.
-¡Gemma! -grito.
-¡Baja aqui pequeñaja! -me dice sonriendo.
Corriendo bajo las escaleras y me tiro a sus brazos.
-¿Que hacías arriba los dos solos, eh pillina? -me dice al odio.
Se me explota el corazón y me pongo roja.
-Nada. -me apresuró a decir.
Nos separamos y me mira con una sonrisa juguetona.
Apartó la mirada hacia Harry que me mira con sospecha.
-¡Hermanito, ni saludas!
Harry sonrie y la abraza.
-Bueno chicos, tenemos que ponernos al día.

Como hermanos... En teoria (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora