Debe haber sido el viento

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Desde que comenzaron las vacaciones de los estudiantes, Aizawa Shouta había estado escuchando ruidos como cristales rotos y golpes sobre su apartamento. Al principio, pensó que estaba soñando con los días que preferiría olvidar. Los días en los que todo el mundo parecía querer atraparlo, incluso sus padres. Cuando confirmó que no era un sueño y que eran sonidos reales, lo dejó por unos días porque pensó que tal vez solo era una pareja discutiendo y discutiendo. Al quinto día, se preocupó porque estaba seguro de escuchar los débiles sonidos del llanto de un niño. Los sonidos de un niño llorando continuaron durante toda la semana, y Shouta se preocupó demasiado como para dormir.Basado en los ruidos que había estado escuchando durante toda la semana; parece que hay un caso de violencia doméstica en el apartamento de arriba. Y de todos los casos, Shouta odia la violencia doméstica. Porque no había forma de que pudieran obtener pruebas a menos que la víctima cooperara y/o el policía/héroe viera la violencia que sucedía ante sus ojos.Se necesita mucha confianza y discreción para resolver casos como estos, así que Shouta espera, realmente espera que por una vez su instinto esté equivocado. También espera que no haya abuso infantil. Los sonidos de un niño llorando que escuchó son débiles, por lo que puede que no sea un niño, pero si lo es, empeorará.Porque si la víctima es un niño, será muy difícil ganarse su confianza y el caso puede congelarse si no cooperan y no tienen pruebas suficientes.

Después de una semana, se hizo pasar por un 'ciudadano' preocupado (sí, por una vez trató de verse presentable para no asustar a los que estaban arriba), tomó el ascensor hasta el segundo piso y caminó por el pasillo. Una vez que llegó a la puerta que está arriba de su apartamento, tocó.

Hubo silencio durante un minuto entero y Shouta comenzó a sentirse preocupado. No se oía ningún sonido detrás de la puerta cerrada y esperó conteniendo la respiración. Volvió a llamar tres veces, y esta vez escuchó pasos detrás de la puerta.

Unos segundos después, la puerta se abrió. Lo que Shouta estaba a punto de decir murió en su garganta, cuando vio al que abrió la puerta. Cabello verde, ojos verdes y pecas salpicando sus mejillas. No había duda de que el niño que había estado escuchando es su alumno.

"Oh... Hola, Aizawa-sensei. ¿Qué estás haciendo aquí?" El niño, no su alumno, preguntó Midoriya Izuku. El niño evita sus ojos, los dedos se mueven inquietos y una mano se sube el suéter hasta la barbilla.

Muchas preguntas surgieron en la mente de Shouta mientras inspeccionaba al niño problemático. Antes de que el niño se subiera el suéter, estaba seguro de que vio moretones y una huella de mano en el cuello del niño. Parece que Midoriya no ha dormido en toda la semana, y si la corazonada de Shouta es cierta, entonces su estudiante nunca tendrá la oportunidad de dormir debido al abuso.

"He estado escuchando muchos ruidos aquí desde que comenzaron las vacaciones. ¿Te importaría explicarlo, Midoriya?"

El chico rió torpemente, antes de rascarse el cuello. La manga de su suéter se bajó cuando se rascó el cuello, y allí Shouta vio más cortes y moretones. El héroe subterráneo apretó los puños. ¿Cómo es que no se dio cuenta de esto?

Vio muchas señales de alerta en el niño problemático desde el comienzo del año escolar. Su comportamiento nervioso y asustadizo, cómo no le gustan las explosiones y otros ruidos fuertes, y por qué no tiene autoconservación. No pensó que la madre de Midoriya le haría esto, ya que escuchó de Yagi que la madre del niño es amable a pesar de que era un poco estricta.

Las orejas de Midoriya se enrojecieron ante el silencio entre ellos, al darse cuenta de que no había respondido a la pregunta de su maestro.

"Creo que tus oídos te están jugando una mala pasada, sensei. Sin embargo, gracias por preocuparte, eso es amable de tu parte".