Esa noche dormimos abrazados, ambos en mi pieza. Nos habíamos extrañado y mucho. Asi que entre lágrimas y charlas ambos quedamos dormidos.
La mañana llegó, y con ella el día del Juicio.
-Kook, vamos levántate, tienes que bañarte.
-ya voy-dije entre bostezos.
-de verdad muchas gracias, no sólo por recordarme sino porque la información que me diste me vino de mucha ayuda. Espero ganar hoy. Sino mi cabeza va a rodar.
-Me alegra haberte ayudado, vas a ver que todo sale a tu favor.
—eso espero...
Una vez listos, bajamos a desayunar y luego partimos en dirección hacia el juzgado. El día habia llegado.
Taehyung estaba tan lindo, lamentablemente el cariño cambió, no podía odiarlo por completo, tenía un sube y baja de emociones respecto a la situación.
—Kook, vamos que se hace tarde
Entramos rápido al juzgado. Yo me quedé detrás observando todos sus movimientos, y a su alrededor. El señor Park se encontraba a su lado, era un hombre con una sonrisa malévola, si bien las apariencias engañan este hombre tiene la pinta de ser culpable.
Al cabo de unos minutos, el juez apareció, la sala se puso de pie y se dio inicio al juicio. Ambos abogados dictaron si discurso final exponiendo sus pruebas, creo que lo que di a Taehyung anoche sirvió porque el abogado contrario presentó nuevas pruebas y Taehyung supo como responder ante estas. Las horas pasaban y el juicio continuaba. La verdad que tenía miedo, si decidían que era culpable la vida de Taehyung corría peligro.Taehyung notó mi preocupación y con una sonrisa trató de calmarme.
Era hora del veredicto final, era el momento donde sabríamos si el acusado era considerado culpable o inocente, y lo más importante si Taehyung conservaría su cabeza o no.
Ya no escuchaba nada, tenía la mente en blanco, tenía miedo... pero el alma me volvió al cuerpo tras escuchar..
—inocente
Eso fue lo único que escuché de la sentencia, era inocente, la cabeza de Taehyung iba a permanecer en su lugar hasta que yo decida arrancarla, si es que podía, ya que ya no lo miraba con los mismos ojos. Maldito amor que te hace ser debil.
Tras el veredicto Taehyung vino corriendo hacia mi, y ambos nos fundimos en un gran abrazo.
—hiciste un gran trabajo
—gracias a tu ayuda, muchas gracias Kook, me sirvió mucho lo de anoche, ahora, ¿qué te parece si vamos a casa y festejamos con mucho alcohol?
—acepto—dije sin másAl llegar a la casa de Taehyung, lo primero que hicimos fue buscar todo el alcohol que tenía escondido.
Nos sentamos en el sillón, y empezamos a beber a beber, charlas, risas, iban y venían. Nos llevábamos bastante bien, demasiado bien diría yo. Si no fuese por el hecho de que aún quería mi cabeza podríamos ser una linda pareja.
El alcohol empezó a hacer efecto, y nuestra conciencia empezó a desaparecer, el calor subía por nuestros cuerpos. Nuestros rostros ya se encontraban de un rojo carmín, y nuestras palabras no tenían mucho sentido.
—Kook, siempre te quise
—yo también Tae, no hubo día en que no pensara en ti
Tras esas palabras, nuestros labios ya se habían reclamado como propios, un beso lento pero lleno de pasión. La profundidad del mismo iba en aumento, necesitábamos más del otro, más cercanía, más contacto. Sus manos comenzaron a desabrochar mi camisa, luego descendieron lentamente delineando cada musculo de mi abdomen hasta llegar a la tira del cinto, el cual fue retirado en un abrir y cerrar de ojos dejando caer mi pantalón.
Taehyung era el que guiaba.
Se arrodilló, pasó sus dedos fríos sobre el elástico del bóxer y terminó por bajarlos. La calidez de su respiración, se acercó a mí miembro generando que el mismo poco a poco comenzará a erectarse. Su lengua, comenzó a recorrer cada vena, para luego introducirlo por completo en su cavidad. Pequeñas embestidas hicieron su aparición, fue algo instintivo, su boca hacía maravillas, y en cuestión de segundos terminé viniendome en ella.
—ahora es mi turno, te quiero dentro Kook—dijo desnudandose por completo
Esas palabras hicieron que me encendiera nuevamente, lo tomé en brazos en modo nupcial, y lo llevé hasta el sillón donde lentamente lo dejé.
Abrí sus piernas, y fui introduciendo de a un dedo para prepararlo, tenía miedo, era mi primera vez y lo iba a hacer con Taehyung, mi enemigo, pero no estaba muy consciente para pensar en eso, en este momento, solo era taetae, el niño que recuerdo.
Una vez preparado, alineé mi miembro en su entrada y comencé a dar pequeñas embestidas, que a pedido de Tae iban en aumento, tanto en ritmo como en profundidad. Éramos un océano de gemidos, su brazos arañando mi espalda. Mis colmillos picaban, pero no debía dejarlos salir, pero me fue imposible, así que sin que Taehyung se de cuenta, cuando ambos llegamos al orgasmo, mordí la almohada que se encontraba a un lado de su cabeza.
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Stay alive
FanfictionUn cazador se enamora del heredero de la tribu de los lobos.... Historia completamente de mi autoria #Kooktae