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[ — No, no mantengo un amorío con ese ser despreciable, mi corazón y alma le pertenecen a Bakugou, nunca pensaría traicionar a la persona que he amado por más de 10 años con un hombre que lo único que lo define es la asquerosidad, y de igual manera, no soy un espía infiltrado, mi sueño desde pequeño siempre ha sido... ]

La televisión por la cual se veía la transmisión en vivo fue apagada por un pelinegro quien solo se dignó irse de aquel cuarto fétido.

— ¡Oye! Twice y yo estábamos viendo que decía el rojito — se quejó Toga parándose de su lugar con intención de encender de nuevo el aparato, sin embargo Dabi se le adelanto explotando el televisor con sus llamas — ¡Eres un idiota Dabi! — la pequeña rubia no iba a tolerar más el comportamiento de su camarada, y menos cuando la explosión casi se daba en su cara

— Al jefe no le interesa nada de lo que diga esa mierda andante ¿Verdad jefe? — el peli azul gruñó en respuesta, estaba más inmerso en el videojuego que en su entorno — Ya lo oíste

— No tienes que mentir Dabi, la explotaste porque el héroe desmintió su amorío y prefiere a ese otro héroe explosivo que a ti — salió Spinner quien afilaba sus cuchillas desde la esquina del cuarto recibiendo una mirada fulminante por aquel par de ojos color zafiro

— ¡Te gusta el rojito! — concluyó Toga ante la declaración del lagarto, soltando una risa escandalosa antes de seguir con la burla — ¿Quién lo diría? El pirómano tiene corazón

— ¡No me gusta esa alimaña! — se apresuró a objetar — Y si me permiten, iré a crear algo de caos, estar encerrado con una bola de idiotas me está pegando la idiotez

— No te dejes atrapar — fue la única condición que dio Shigaraki antes de que la puerta fuese cerrada, no tenía energía para ir a salvar a un hijo de puta que no podía controlar su impulso sádico

Por su parte, Dabi había salido buscando un buen punto para fumar, donde el aire no fuera mucho como para apagarle el cigarrillo pero si el suficiente para no ahogarse con el humo que soltaba en cada calada.

Sus pensamientos volaron directo hacia aquel héroe ahora retirado; maldiciendo por lo bajo al recordar el odio escupido en sus palabras en aquella entrevista. ¿Él un ser despreciable? Al hijo de puta le salvó la vida, ¿Que era asqueroso? No se quejó cuando lo besó, aunque tal vez fue porque tenía su lengua en la garganta del pelirrojo, pero no importaba ¡Él no era asqueroso!

Le enfurecía de sobremanera ser tratado así, pero algo en su interior clamaba por ver de nuevo a ese pelirrojo, suplicando misericordia mientras se retorcía en el suelo, de solo imaginarlo le salía una sonrisita; dándose así la misión de hacerle la vida imposible al rojito hasta que éste imploraba de rodillas que se detuviese.

Le enfurecía de sobremanera ser tratado así, pero algo en su interior clamaba por ver de nuevo a ese pelirrojo, suplicando misericordia mientras se retorcía en el suelo, de solo imaginarlo le salía una sonrisita; dándose así la misión de hacerle l...

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El día después de la conferencia, Bakugou fue citado por su superior a una reunión a la que asistirían todos los grandes héroes de la nación.

Al momento de que todos los notificados de dicha reunión estuvieran presentes, se reprodujo la grabación anticipada de uno de los miles de canales de noticia que hablaban del suceso del pasado día.

Pelos de Mierda [Bakushima]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora