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T/n.

- buenos días Alonso - saqué un caramelo de hierba buena y se lo entregue

- buenos días señorita Potts - el me entrego un caramelo azul que anunciaba ser de menta, llevo una de sus manos a su oído que estaba decorado con un auricular de seguridad, me miro por unos segundos y dijo algo en voz baja para después pararme - Señorita, disculpe pero su padre la espera en su oficina

- ¿Mi que? - me cruze de brazos

- Pe-perdon, el señor Stark... el jefe... la espera en su oficina - se movió nervioso mientras reía

- gracias "Lonso" voy enseguida - le di una sonrisa de tranquilidad y seguí con mi camino, haciendo retumbar mis hermosos tacones rojos - buenos días

- buenos días señorita Potts - respondieron el personal de oficinas

- ¿Saben si el jefe ya entro? - señale mi oficina

- Ya señorita, hace unos minutos - respondieron unas chicas en voz baja

- gracias - imite su tono de voz y jale la puerta de cristal templado que daba a mi lugar de trabajo - Señor Stark

- Señora Barnes - giró dramáticamente mi silla de cuero blanco donde el estaba sentado - ¿Me quieres explicar que haces aquí?

- aquí trabajo - deje mi bolsa en el perchero que estaba justo a lado - tu me contrataste

- sabes a lo que me refiero - se levantó de mi silla - estás embarazada y mírate, en tacones y llendo de un lado para otro

- papá - no había nadie y además el regaño no era por algo profesional si no por algo personal - tengo un mes, relájate

- tienes un mes que después serán dos, que después serán tres y así hasta que llegues a los nueve, ¡conozco los tiempos de gestación! - reclamo - ¿A caso no recuerdas tu primer embarazo? ¡Hacer esfuerzos te puede hacer daño!

- el doctor dijo que todo estaba en orden - trate de calmarlo

- T/n, no me vas a convencer, lo único que ganarás es que restrinja tu entrada a la empresa por 9 meses - se cruzó de brazos - no dejaré que pongas en riesgo a mi futuro nieto o nieta

Tome aire y trate de calmarme antes de explicarle mi situación, me senté en las sillas que estaban en el escritorio quedando justo frente a el

- Emma no quiere saber nada del bebé si es una niña - le conté mientras ordenaba los lápices y plumas que estaban tirados - hizo una rabieta horrible y tuve que borrarle el recuerdo... Prácticamente ella aún no sabe que estoy embarazada

- ¿Que? ¿Emma? - pregunto sorprendido volviendo a tomar asiento - ¿Hablamos de mi nieta? ¿De la misma niña que no se puede separar de una pelinegra con grandes chinos?

- Si... Creímos que le encantaría la sopresa, pero al parecer se niega a tener una hermana

- ¿Osea que si es un niño si lo va a querer? - cuestiono confundido

- Según sus palabras... Si, solo así - me cruze de brazos - va a sospechar si yo me quedo en casa, cuando los síntomas lleguen, cuando vea que empecemos a acondicionar otra habitación

- haber, haber detente ahí - hizo un gesto con su mano - en algún momento deberán decírselo, pueden ocultarle el embarazo pero cuando nazca el bebé no podrán ocultarlo, y no porque ella no quiera a una niña se le dará la razón

- ¿Ahora sí? Si tú eres el primero en cumplir todo lo que a la niña se le ocurre pedir - le reclamé

- haber ese no es el punto - se hizo el ofendido - no confundas las situaciones

𝙄𝙧𝙤𝙣 𝙎𝙝𝙖𝙙𝙤𝙬.𝚜𝚎𝚌𝚘𝚗𝚍 𝚋𝚘𝚘𝚔 (Bucky Barnes y tú.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora