- cuando estás sonriendo el mundo entero sonríe contigo, cuando estás riendo, el sol brilla, pero cuando estás llorando atraes a la lluvia, así que deja de suspirar y se feliz de nuevo -
El auto llegó casi derrapandose a la entrada del hospital, iba a 230 km por hora y el soldado nisiquiera supo cómo lo logro detener en medio segundo, abrió la puerta dejándola abierta, solo le importaba su esposa que ya estaba bañada en sudor y lágrimas, deliraba y balbuceaba cosas que no lograba escuchar, corrió hasta el asiento del copiloto y saco de ahí a la pobre mujer que ya temblaba notoriamente.
- ya llegamos mi amor, resiste - pidió el sargento mientras la cargaba en sus brazos
- Emma - balbuceaba mientras movía la cabeza de un lado a otro
Susurro un par de palabras más antes de dejar caer su cuerpo sin fuerza
- muñeca - la sacudió viendo que ya tenía los ojos cerrados - ¡T/n! No no no no no
Corrió cargándola, dejando el auto totalmente abierto de ambas puertas, todos los civiles que estaban afuera volteaban a verlo gracias a los gritos que daba el hombre
- ¡Ayúdenme! ¡Ayuda!
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Varios enfermeros y enfermeras se acercaron a el, empujando una camilla dónde la recostaron rápidamente
- ¿Que le ocurrió? - pregunto un doctor que corrió
- empezó a sangrar sin razón, hace 10 minutos
- ¿Sabe cuántos meses de embarazo tiene? - empezaron a correr con la pelinegra en la camilla y el soldado siguiendo el paso
- Si, acaba de cumplir los 8 meses hace 3 días - respondió nervioso, sabía todo acerca del embarazo de su esposa, no se perdió ninguna una cita con la ginecóloga
- t/n Stark Potts, ya fue paciente aquí doctor - llegó una enfermera alcanzandolo con un expediente
- carajo - murmuró él doctor sintiendo el vientre de t/n y luego viendo que ella venía sudando - ¡Vamos a quirófano! ¡Ya! muevanse, muevanse
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Tony.
- ¡Es aquí, es aquí, es aquí, es aquí! - grito Peter mientras yo trataba de frenar el Mustang de golpe para no darle al Mercedes Blanco que estaba enfrente y con las puertas abiertas
