In the desert |× Moon Knight ×|

Capitulo Ocho: Renuncio a tí

Bushman se imponía en medio del pasillo y de su mano derecha tenía afirmada a Nailah del cuello de la camiseta. La sangre brotaba desde su boca y nariz y corría por su cara.

Bushman sonrió con maldad al ver a Kamilah salir de aquel pasillo.

— Nailah —la voz de Kamilah salió en un susurro al ver a su hermana repleta de sangre.

— ¿La quieres? —cuestionó Bushman levantando a la chica de la camiseta.

— Kam...—pronunció ella con dificultad mirando a Kamilah a los ojos.

— Si la quieres, hagamos un cambio —propuso con una sonrisa malvada.

Kamilah levantó la mirada hasta el hombre y respiró con fuerza, haciendo resonar su respiración en las paredes.

— Que es lo que quieres —

_ Esto no me gusta, Kamilah _advirtió Seth_ No me gusta nada _

— Yo la libero...pero tú vienes conmigo —propuso el mercenario.

— Si la liberas aquí va a morir desangrada —

— Ese es el punto—lanzó a Nailah hacia Kamilah como si de un pedazo de tela se tratara— Tu vas a renunciar a tu dios...—

Kamilah había corrido hasta su hermana y se agachó a ver el estado en el que se encontraba, pero al escuchar las palabras de aquel hombre su cuerpo se paralizó.

— ¿A...a qué te refieres con eso? —le preguntó levantando la mirada.

— Sé que eres un avatar, vamos Kamilah. Si renuncias a tu dios, él puede salvar a tu hermana. Tu consigues lo que quieres y yo consigo lo que quiero —

—¡Y por qué me quieres a mi! ¿¡Que tengo de especial!? —

— El corazón de Marc Spector, ¿Que más? —respondió con obviedad— Si te tengo a ti, lo tengo a él y es más valioso que el maldito dios del desierto —

Kamilah suspiró y miró en dirección de Seth. Pero no estaba y si ella decía las palabras, simplemente sería la última vez que lo vería.

Ya había sentido la perdida de Seth cuando lo encerraron los dioses y el sentirla de nuevo, en conjunto con la de Marc, Steven y Jake...Iba a ser algo horrible. Pero tenía que salvar a su hermana, tenía que intentarlo al menos, aunque eso implicara irse con Bushman y que el trío de novios que tenía fueran en su busca. Iba a hacer lo posible porque el mercenario no los consiguiera.

— Está bien —respondió recibiendo una sonrisa de satisfacción de parte del mercenario— Pero quiero ver qué ella esté bien antes de irme contigo —

— Tienes mi palabra —dijo aún con la sonrisa malvada sobre su rostro.

El dios del Desierto había ido en busca del avatar del dios de la Luna.

Marc lo miró extrañado cuando apareció frente a él y el enojo comenzó a invadirlo.

— ¿¡Que haces aquí!? —le grito al dios— ¿No se supone que estarías con Kamilah? —Marc empezó a correr por los pasillos sin pensarlo.

_ Es tu amigo, Marc _respondió Seth siguiendo a Marc_ Si Kamilah está en peligro es tu culpa _

— Que amigo, ¿Bushman? —Seth alzó las cejas, como si fuese obvio— ¡Maldito hijo de puta! —gritó Marc mientras aceleraba el paso.

Corrió por algunos pasillos sin poder encontrar algún indicio del paradero de Kamilah, hasta que volvió a escuchar la voz del dios.

_ ¿¡Puedes escucharme por una maldita vez!? _