Desamor [Tk] ✔

Capitulo 5

A eso de la una y media de la tarde Taehyung terminaba su trabajo. Fue directo al Starbucks que quedaba a cinco cuadras y dejó su currículo allí. Le dijeron que en unos días lo llamarían.

No tenía fe. Ya nadie contrataba personas de 28 años. No es que fuera viejo, es que se requerían personas todavía más jóvenes.

Personas más manipulables. No un adulto.

Taehyung decidió dejar también su currículo en una librería cercana. Él tenía experiencia como vendedor, si tenía suerte quizá lo contratasen.

Su alarma sonó. Entre una cosa y la otra ya le tocaba ir a buscar a su hijo al jardín. Caminó las cuadras que lo separaban de la escuela de YeonJun y se quedó en la esquina, viendo como una pareja compraba flores en el puesto.

Taehyung recordó la primera vez que le regaló a Jungkook un corazón conformado por flores. Los ojos de su actual esposo habían brillado como dos estrellas.

Aquella fue la primera vez que alguien le regaló flores a Jungkook.

Taehyung siguió viendo el puesto de flores. Las parejas iban y venían. Se tomaban de la mano, se besaban, se amaban.

¿Él amaba a Jungkook todavía?

No lo sabía. Ya no lo sabía.

No entendía cómo las cosas habían empezado a estar así. Hasta ese punto de no soportarse mutuamente.

Tae se quedó fuera de la escuela de su hijo, esperando, hasta que él por fin salió con cara de pocos amigos y llorando como un marrano.

—¡Se lo voy a decir a papá!

—¡Vieja Bruja! —le gritó Soobin a la maestra desde el escalón —¡Señor Kim, esta Bruja está loca!

Algunos padres reían ante el escandaloso Soobin y YeonJun que estaba detrás de él estaba siendo muy dramático.

—¿Qué sucedió? —le preguntó Tae a Soobin ya que YeonJun no dejaba de llorar.

—Junnie me estaba abrazado y esa Bruja nos dio un tirón.

—¿Qué?

—Que nos dio un tirón. Yo me caí de culo y Junnie se golpeó la cabeza.

Taehyung hizo una mueca y no supo cómo reaccionar ante lo maleducado que era Soobin. Siempre decía las cosas como era, en fin, niños.

—Voy a ir a hablar ¿Dónde está tu madre Soo?

Soobin se alzó de hombros.

—No sé. Papá iba a venir, pero no va a venir, es un idiota.

—Shh, esa boca.

—¡Pero si es verdad!

—Soobin, eres demasiado pequeño para hablar así.

—¿Y?

"Dios mio" - pensó Tae yendo dentro del jardín de niños. Soobin lo siguió detrás como un soldadito en miniatura.

—¿Dónde está la maestra? —le preguntó Tae a una de las señoras de limpieza. La mujer le señaló en el fondo de la institución.

En el camino, Tae se encontró con el director.

—Voy a presentar una denuncia —le advirtió al hombre —. La señora Chang está mostrando comportamientos que no debería frente a mi hijo.

—La escuela se responsabilizará por eso. No hace falta...

—La señora Chang está mostrando conductas agresivas con dos alumnos ¿y usted quiere que yo no haga nada?

El director le frunció el ceño. 

—Chang no se mostraría de esa forma si usted hiciera las cosas bien.

—¡Ay no empiece! —se quejó Soobin, muy molesto.

Taehyung resopló advirtiendo lo que se le venía encima.

—¿Sabe qué? No gasté su tiempo, llevaré a mi hijo a otro lado en donde no sean todos un grupo de homofóbicos anticuados.

—¡Ja Ja! —le dijo Soobin y le sacó la lengua al director. Eso al menos hizo reír a YeonJun.

Tae salió del colegio, dando pisotones. En eso se encontró a la madre de Soobin, afuera, esperando con ojeras y un brazo enyesado.

—Hola Kim.

—Hola. Soobin, háblale a tu madre luego de esto, iré al hospital para ver si Jun no tiene nada ¿si?

—¡Nos vemos! ¡Adiós Junnie!

YeonJun se despidió de su amigo que seguía llorando.

Más tarde el médico le diría que había sido más el susto que la caída.