Desamor [Tk] ✔

Capitulo 22 (FINAL)

Los días pasaban volando como nunca.

Jungkook lloraba mucho por las noches. Todavía no podía asimilar lo idiota que ambos habian sido, pero por suerte, Tae estaba a su lado para decirle que las cosas estaban mejorando.

A pesar de que Taehyung tenía miedo de que las cosas se pusieran mal, hacia todo lo posible por no demostrar sus temores ante Jungkook. No quería joder las cosas.

Aquel día, Jungkook llegaba de dejar a YeonJun en la fiesta de cumpleaños de uno de sus compañeros. Tendrían que pasar a retirarlo dentro de cuatro horas.

—No tenía muchas ganas de ir —Le confesó Jungkook a Tae.

El mayor alzó una ceja.

—¿Tú no querías llevarlo o Junnie no quería asistir a la fiesta?

—Hablo de Junnie. No se si se lleva muy bien con sus compañeros. Dijo que solo iría porque no quería dejar solo a Soobin.

Tae soltó una risita y dejó el trapo en el fregadero. Se limpió las manos y se acercó a Jungkook para tomarlo por la cintura.

—Soobin es como su sombra.

—¿Verdad que si? Ambos van a donde está el otro.

—Me recuerda a ti.

Jungkook se rió.

—Recuerdo que venias a visitarme a la pileta de natación los sábados por la tarde. Más de una vez tus padres se enojaron porque llegabas a cualquier hora.

—Es cierto. Lo peor era que creían que estaba con Tessa.

—Que chica tan tonta.

—Tonta y desagradecida —convino Jungkook de mala gana—. No quiso a Junnie desde que lo vio. Por lo menos tú si lo quieres.

—Bueno, no puedo discutir contra eso. Junnie apenas era un bebé por ese entonces. Pero ahora está mejor.

Jungkook soltó un suspiro y se apoyó en el hombro de Tae. Lo abrazó.

—Solo espero que no lo hayamos traumado.

—¿Te refieres porque tiene dos padres? Si es por lo de Soobin está más que claro que cuando sea grade será gay.

—¿Tú lo crees?

—¿No es obvio?

—Pues...

—Nunca nos dijo si había alguna chica que le llamara la atención. Siempre es Soobin esto, Soobin lo otro, bla, bla, bla...

Jungkook soltó una carcajada.

—Pues sienta lo que sienta siempre lo vamos a amar. De todas formas no me refería a eso, estaba hablando sobre las peleas.

—Él ya no está enojado. Hace ya varios días que no hay peleas en casa, corazón.

Taehyung lo agarró de la mandíbula.

—Yo no quiero que nos peleemos más.

—Yo tampoco.

Tae le sonrió y lo acorraló contra la pared.

—Si gritamos que sean gritos felices ¿no lo crees?

Jungkook soltó una estruendosa carcajada.

—Gritos felices... estoy de acuerdo en eso.

Tae pasó a colocarle sus brazos por encima de la cabeza. Jungkook gimió ante el contacto.

—Parecemos dos adolescentes hormonales.

Era el turno de Tae para reír.

—Lo sé, pero... tenemos cuatro horas a solas. Deberíamos sacarle provecho. Hoy es domingo, así que tu y yo no trabajamos.

Tae le soltó las manos y procedió a agarrarlo de las nalgas para alzarlo y llevarlo a la cama. Cerró la puerta y las cortinas, dejando muy poca luz en el cuarto.

—Tomemos una ducha más tarde —Sugirió Jungkook.

Taehyung sabía que eso significaba la segunda ronda.

Las cosas estaban mejor.

Gracias a ellos a nadie más.

..........

Fin. ¿Les gustó?