Parte 5

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El rostro de esa parca Gu Ryeon seguía apareciendo en los sueños de Park JoongGil, desde hacía mucho tiempo.

Curiosamente fue desde el momento en que ya no la tuvo a su lado, como subordinada, que el rostro de ella aparecía en sus sueños mas oscuros.

Era por eso que casi no dormía, porque no toleraba saber que, de alguna manera bizarra, estaba transmutando su realidad a los sueños. No comprendía por qué esas ensoñaciones consistían en verla desaparecer una y otra vez y no poder hacer nada al respecto. En su sueño el sentimiento de impotencia era tal y el dolor tan insoportable que inmediatamente lo asociaba como una pesadilla, recurrente y muy incómoda.

Nunca fue a donde la emperatriz de jade para comprobar si ella conocía el motivo de lo que le pasaba, solo existía una persona que quizá, solo quizá tuviera la respuesta pero no iba a acercarse a ella y menos a preguntarle cosas relacionadas con su propia privacidad.

Eso, aun así, no lo contenía de vigilar los pasos de Gu Ryeon de una manera nada apropiada. Era por eso, por ver su rostro serio y mirada lejana, que acudía ocasionalmente a recoger almas que ella salvaba y que morían seguidamente, de causas naturales, porque eso le daba la oportunidad de verla sin que fuera sospechoso. Sus puestos de trabajo se odiaban y no estaba en él derribar esa reputación, ni mucho menos podía existir siquiera el rumor de que contrafraternizaban porque eso perjudicaría a la emperatriz de jade. Por eso la recordaba perfectamente aquella vez que ella interfirió o estuvo a punto, con el suicidio de una persona, siendo subordinada. Él hizo que soltara a esa persona y eso fue el inicio de aquella separación.

Aun asi, sin que los propios miembros de su equipo se dieran cuenta, se escabullía a mirarla trabajar evaluando las cualidades que, sin duda, los infernales debían tener; sin principios, aguerrida y demente. Tenia una manera especial de confrontar, con medios poco ortodoxos cuando la extrema situación lo requería. Tomaba venganza en función de las personas que caían en los deseos de sucidio.

Fueron características que no pudo ver en aquel tiempo que estuvieron en la misma división, tenía pasión y era algo con lo que intrínsecamente se sentía identificado. Incluso fue testigo del cambio de color en su cabello y notó la frecuencia eterna con la que usaba aquella sombra de ojos de color rojo, en curioso contraste con su nuevo cabello.

"Todas las personas eligen su camino, y siempre hay consecuencias por sus decisiones"

Eran palabras que la emperatriz de jade siempre mencionaba cada vez que se reunían con Gu Ryeon y él estaba por retirarse, asi que eso también le llevaba a preguntarse muchas veces, qué era lo que tenía Gu Ryeon para que la emperatriz de jade le tuviera tantas consideraciones.

Hasta estuvo presente el día en que integraron a un recluta a ese grupo de perdedores, cuando utilizó aquello que ella misma parecía sentir indicando que la muerte era peor que la realidad al suicidarse. Y lo recordaba bien porque fue ese día el que tuvo que recoger el alma de un mafioso, que era como aquellos que,en el momento en que les llegaba la muerte buscaban a dios.

Ese día también tuvieron una reunión para discutir algo sobre "aquel grupo" que era como conocían todos los demás jefes de departamento de gestión de riesgo, nuevamente todos, especialmente el señor Ha, cuestionando el origen de la emisaria Gu, quien, haciendo gala de su arrogancia desmedida, no se dejó intimidar de de ninguno de ellos.

Él mismo, como por inercia, cuestionaba los indicadores poco rescatables de la labor de ese equipo, ganándose la mirada de ella tan neutra y fría como la de él mismo, cuando Gu Ryeon le inquirió por detener el progreso del propio equipo de riesgo.

Pues, si estaba en manos de él ellos no tendrían personal para desperdiciar en sus labores inútiles, especialmente porque verla seguía recordando lo mucho que odiaba a los suicidas, sus egoístas almas y sus debilidades de mente. Sin prestar atención a cualquier argumento que ella ponía en la mesa, dejaba que sus palabras transmitieran aquel resentimiento hacia ella.

TOMORROW'S REAPERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora