MI CHICO MALO || KOOKMIN

12

Al día siguiente Jeon estaba nuevamente en la universidad caminando escuchando música a todo volumen atrás vez de sus audífonos, esta vez no quería asistir a su primera hora de clases así que fue directamente al pateo trasero para dibujar o simplemente dormir un poco más.

Pero lo que no se había dado cuenta es que un pequeño angelito lo estaba siguiendo y llamándolo por su nombre pero no lo escuchaba por obvias razones, hasta que se dio cuenta de su presencia cuando se quiso sentar debajo del árbol esta vez Jimin se le puse en medio del camino.

Jeon sonrió por dentro y se quitó sus audífonos para escucharlo pues amaba su voz.

- ¿Qué pasa?-

Le pregunto sin interés pues debía mantener una imagen fría y de chico malo, Park levanto su mirada y vi un pequeño sonrojo en sus mejillas.

- Y-yo...- Jimin respiró hondo para agarrar valor.- Te tengo un regalo.-

Hablo rápido pero se le entendió y ahí fue donde Jeon se dio cuenta recién que entre las pequeñas manos ahí estaba el regalo.

El pequeño tomo la mano de este y puso el regalo que había comprado el día de ayer pensado en lo feliz que le haría al peli negro. Este lo abrió ante la atenta mirada del más bajo de ambos y cuando vio una caja de plumones profesionales para dibujar y colorear sus dibujos su corazón latió y levantado la mirada de golpe a ver esos ojitos que lo miraban con alegría y sobre todo con amor.

- No era necesario pero gracias...-

Y sin pensarlo jalo a este hacia él para abrazarlo cosa que hizo a Jimin ponerse nervioso pero sobre todo extremadamente feliz porque le había gustado su regalo.

El pequeño solo se acurrucó en aquel abrazo cálido y tan soñado.

Jeon se separó un poco de este y junto sus frentes mirándolo detalladamente provocando un pequeño nerviosismo en Jimin y que sus mejillas se volvieran más rojas. Eso hizo que el más alto sonriera de manera tierna, llevo una de sus manos a los cabellos que cubrían la frente del más bajo y le dejo un beso en aquel lugar.

- Ya no puedo esperar más...-

Susurro haciendo confundir un poco a Jimin pero solamente el más alto de los dos entendió sus propias palabras y el gran significado que tenían para él y sobre todo para su corazón.