• Capítulo 14 •

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   La lluvia afuera se ha convertido en un goteo suave, pero constante. Jimin y Jungkook están sentados en el suelo ahora, con sus espaldas recostadas en la pared, riendo de unos videos graciosos en el celular del mayor. Se bebieron entre los dos toda la botella de soju, y ahora van a la mitad de la primera botella de cerveza.

   Jisoo tomó solamente aquella medida de soju que le sirvió Jimin, y no quiso beber más. Ahora está viendo por la ventana a la ciudad pasada por agua, mientras come las papitas que trajo el rubio, y cada tanto chequea su conversación de WhatsApp con Taehyung.

   El hombre escuchó su audio, pero aún no le responde, y ella podría estar ahora mordiéndose las uñas de la ansiedad, si no fuera porque le parece un hábito asqueroso. En vez de eso se plantea si debería llamarlo y ya.

   Decide parar de dar tantas vueltas y solo hacerlo. Es decir, ¿Qué es lo peor que podría pasar? Con ese pensamiento en mente, presiona el botón para iniciar una llamada.

   El chico le contesta con una voz apagada, y algo temblorosa, que preocupa todavía más a la cadete. Luego de hablar un momento más con él, y recibir sólo algunos monosílabos como respuesta, la muchacha le dice a su novio que intentará ir un momento a verlo.

   Corta la llamada, y se acuclilla enfrente de Jungkook, que sigue sentado en el suelo junto a Jimin.

–Tengo un problema, Jungkookie –Oh, el técnico sabe que su mayor va a pedirle un favor, porque usó el diminutivo de su nombre de la forma más cariñosa–. Mira, acabo de hablar con Tae, y no lo escucho muy bien. Estoy muy preocupada por él, sé que algo le pasa.

   Jungkook mira a la cadete por un momento, aún pensando en lo incorrecto que es jugar así con la mente del pobre hombre. Sin embargo, decide simplemente ahorrarse el sermón.

–Puedes ir con él si quieres, aquí tengo todo bajo control –Asegura el pelinegro.

–Yo no planeo irme a casa pronto –Agrega el rubio–. Y sé bastante sobre los pasos del procedimiento, Namjoon-nim me lo explicó todo detalladamente una vez. Puedo ayudar a Kookie si se llegara a presentar un inconveniente como el de hace un rato.

   La chica ahora está convencida de estar haciendo lo correcto. Agradece, se pone de pie y va a alistar sus cosas rápidamente, porque teme que la lluvia vuelva a aumentar de un momento a otro.

   Antes de dejar la habitación, se gira hacia los muchachos, sonriendo.

–Usen condón –Suelta pícaramente, y luego desaparece del lugar.

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   Es casi medianoche, y en el departamento de Jin el aire es tenso e insoportable. Él y su novio están en medio de una pelea algo intensa. Está sentado en el sofá, viendo al menor recostado en la pared, junto al televisor apagado.

–Comprende, hyong. Si te lo estoy contando antes de hacerlo, no es un engaño.

   En pocas palabras: Tae quiere acostarse con un compañero suyo de la revista. El muchacho está ahora mismo en su departamento, solo esperando la confirmación del pelirrojo. Pero Tae no puede confirmar nada aún, hasta calmar a su alterado novio.

–Es que no entiendo, Tae. ¿No te gusta hacer el amor conmigo? ¿Hay algo que estoy haciendo mal? Sólo dímelo y cambiaré lo que sea.

   El pelirrojo estaba mirando al suelo, y al oír eso da un respingo.

–No Jin, créeme... En serio, créeme que no hay NADA malo en lo que me haces en la habitación, es una de mis partes favoritas de nuestro noviazgo –El menor suspira, sin apartar la vista del castaño–. Este muchacho y yo estamos acumulando tensión sexual desde hace un buen tiempo, solo necesitamos descargarla, y así pasaremos de página.

Eternal Sunshine Of The Spotless Mind (Jintae fanfic) EN ESPAÑOLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora