Todo lo que tiene Tristan Everly lo ha conseguido con esfuerzo, y al parecer, su nombre seguirá en lo alto de Hollywood y de la industria musical por muchísimos años más. Los medios y el entorno lo aman, y aquello facilita cada paso que da.
Dominic...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tristan
Había transcurrido una semana desde que Dom estuvo en casa. Siete días desde que había visto su sonrisa burlesca y tuve mis labios sobre los suyos.
Aquel día lo besé precisamente por eso, porque tenía el presentimiento de que su conversación con Skye nos distanciaría. Sin embargo, luego de que ella me dijera que lo había perdonado, creí que nuestra rutina seguiría con normalidad, no pensé que aun así desaparecería.
Y, en serio, desapareció. No respondió mensajes ni llamadas ni las hizo por su cuenta.
Sabía que estaba en semana de ensayos con la banda, porque faltaban muy pocos días para que viajaran a Inglaterra y tuvieran el concierto que abriría su gira por Europa. Pero esperaba al menos una señal que me dijera que estaba bien. También una de que, a pesar de estar ocupado, seguía pensando en mí y extrañándome.
Podría haberme dejado llevar por los pensamientos de que estaba aprovechando aquella semana para tomarse un respiro de mí porque solo se mantenía cerca al ser parte de su trabajo. Después de todo, ya había aclarado las cosas con Skye y se había quitado un peso de encima; podía seguir con tranquilidad. Podría haber asumido mucho, pero fue Mara quien, como siempre, frenó el desorden en mi mente y me recordó que si seguía actuando con base a escenarios ficticios, solo la pasaría mal.
Por esa razón iba de camino al recinto en el que se encontraba ensayando, luego de pedirle la dirección a Caleb y que este me la enviara no sin antes hacerme preguntas cargadas de curiosidad. De hecho, su último mensaje decía: «Después de todo, tu enemies to lovers era más lovers que cualquier otra cosa», a lo que solo respondí con el emoji de la pistola de agua.
Además, hace un par de días habían publicado su entrevista y los medios y las redes sociales enloquecieron una vez más.
Estaba el grupo que creía en sus palabras y que decía que luego de reconocer sus errores, merecía una nueva oportunidad, pues parecía sincero; y quienes aprovecharon la ocasión para criticar cada detalle de lo que expresó.
Leí a personas que creían que aquella instancia solo había tenido la intención de mostrar a Dominic como una víctima; otras preguntaban cuánto le habían pagado sus padres a Kane para contribuir en ello; mientras que algunas concentraron sus esfuerzos en luchar contra los efectos positivos de la entrevista, creando largas publicaciones en las que enlistaban todas las conductas cuestionables que él había tenido.
No podía saber cómo estaba siendo para él vivir aquello, pero por mi parte, Caleb me recomendó tomar un descanso de las redes luego de que respondiera un par de tweets defendiendo a Dominic. No dije nada irrespetuoso, pero según él, se percibía fácilmente mi enfado, y si no me detenía, aquello tendría un efecto contraproducente para ambos.
No podíamos dar un paso atrás cuando Caleb ya se había encargado de ir uno más hacia adelante, pues había ejecutado la parte del plan en la que las fuentes cercanas confirmaban mi relación con Dom. No era una novedad luego de las fotos que nos tomaron en Australia, pero una certeza siempre causaba más furor.
