[Cuídalo Bien] ;;TaeGi/KookGi;;

||Epílogo||

Mi mejor amigo había dejado esta vida el 7 de junio del 2015.

Ocho días antes de que él le propusiese matrimonio a YoonGi.

Haciéndome prometer que cuidaría bien de él... 

Fue un duro e inesperado golpe para todos nosotros. Hubieron muchas lágrimas, muchos gritos, enojos, maldiciones y también aceptaciones.

Pero sobre todo, hubieron miradas juzgadoras, creyeron que era un abusivo, el peor amigo que pudiese existir, todo por haberme enamorado de YoonGi y ni siquiera voy a justificarme, tenían razón, era de lo peor...

Innumerables veces me maldije por mi estúpido atrevimiento, una cosa era que en algún momento él me gustase cuando éramos adolescentes, pero ahora el asunto cambiaba drásticamente, además que JungKook ya no estaba, sin embargo por medio de diferentes sueños, mi mejor amigo me dejó en claro que yo no debía de preocuparme por el cómo se sentiría "A final de cuentas, estoy muerto" eran las palabras que me decía "Deseo lo mejor para las dos personas que más me han importado en la vida y si lo mejor para ambos es que estén juntos, espero que se cumpla" escucharlo le traía cierta paz a mi ajetreada mente.

JungKook... Yo deseo que donde sea que estés, te encuentres bien... Pronto nos reencontraremos, pelos...

— Oye pá, papá quiere que vengas a ayudarle a poner la mesa. —La voz a mis espaldas hizo que me alejará de mis pensamientos, Jae se encontraba en la puerta que daba acceso a este bonito patio trasero que teníamos en nuestro hogar, sonreí mientras caminaba hacia él para revolver sus cabellos— ¡Pá! No tengo quince.

— Cierto, tienes diez años.

— ¡Eh! —Sin darle tiempo a responder, me adentré a nuestro hogar dejando a un quejoso hombrecito de 20 años en el patio.

Llevábamos viviendo en Suecia aproximadamente tres años y nos habíamos adaptado bastante fácil, JaeKyun hizo amigos rápidamente aunque tuvo que comunicarse en inglés durante nueve meses. Ver lo mucho que había crecido y no sólo físicamente, era bastante nostálgico... No lucía para nada como aquel chiquillo que conocimos por primera vez, temeroso y reservado, ahora era una bomba total y nadie jamás se atrevió a volver a lastimarlo.

Fácilmente podía decir que me sentía orgulloso.

Hace apenas dos años finalmente se había acostumbrado a llamarnos "papás", fue tan emocionante como cuando un bebé dice sus primeras palabras, recuerdo que YoonGi terminó llorando mientras abrazaba a JaeKyun.

Por supuesto, yo también lloré.

Pero ese punto no es necesario abarcarlo.

Después estaba el asunto entre YoonGi y yo... Pues... Nos casamos siete meses después de llegar a Suecia.

¿Cómo fue la propuesta? En realidad todo fue sencillo, mis amigos y familia estaban al momento del anuncio, fue una escusa el reunirnos en un restaurante para celebrar que nos mudábamos, la expresión en el rostro de YoonGi fue todo un poema, simplemente se había girado unos segundos para hablar con SunHee y cuando regresó su atención a la mesa yo ya me encontraba de rodillas a su costado, extendiéndole la pequeña cajita que contenía el bonito anillo con detalles de flores.

La sorpresa entre todos no se hizo esperar, puesto que solamente mi padre, mi hermana, los hermanos de YoonGi, SunHee y JaeKyun eran conocedores del verdadero motivo tras esa reunión. YoonGi había cubierto su rostro con sus manos mientras yo daba mi pequeño discurso sobre lo maravilloso que era y lo mucho que lo amaba para finalizar con un "¿Me otorgas el privilegio de ser tu esposo?" Las luces se habían apagado en ese momento dejando que las velas en la gran mesa fuesen nuestro único resplandor, para cuando YoonGi dijo el "Sí" todo el lugar se llenó de fuegos artificiales y música.