My Oh My

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Han pasado cuatro días desde que estoy en la mansión Cumberbatch

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Han pasado cuatro días desde que estoy en la mansión Cumberbatch. Desde que me trajo, no le he visto ni la sombra. Por el trabajo, ha tenido que salir y vuelve tan tarde que cuándo lo hace estoy durmiendo.

Me levanto como cualquier mañana, mi habitación nueva es perfecta y tiene un lindo balcón vintage que da al ante jardín. No estoy segura de aue hora es, pero en definitiva ya es medio día. Así que me levanto estiro mis brazos sobre mi cabeza y me relajo, antes de tomar mi telefono de la mesa de noche y contestarle los mensajes a Tracy.

"Estoy bien"
"No te extraño"
"No me llames"

Enviar y listo.

De pronto dos toques en mi puerta me asustan. Pero de inmediato pienso que podría tratarse de la ama de llaves la señora Charlotte. Así que me apresuro a abrir.

—Buenos di... —.

Mierda.

Benedict está viendo, mis pechos sueltos bajo la delgada tela del camisón rosa. Entierro las uñas en la madera para no actuar impulsiva y mantenerme en total serenidad, fingiendo que no me importa que me vea así.

—Perdón — se aclara la garganta y me mira a los ojos — pensé que ya estabas despierta.

—Estoy despierta.

Mi voz está tensa. Mi cuerpo lo está. Pero no me voy a mover.

—Claro — parpadea y sonríe. Se rasca la nuca y se apoya torpemente en el marco de la puerta. Cuando se da cuenta que la posición lo hace lucir nervioso, simplemente se cruza de brazos — Solo quería invitarte a desayunar. Desde que estás aquí no hemos podido conversar. Me refiero a, hablar para matar el tiempo. Claro que si quieres quedarte en tu cuarto no tengo problemas.

—No tengo problemas. No ese tipo de problemas.

—¿Tienes problemas? — pregunta curioso y tiernamente inocente.

—Uno muy grande.

—¿De verdad? ¿Y puedo ayudarte? Soy bueno escuchando.

—No entenderías.

—¿Por que?

—Porque son problemas del corazón.

—Ah — dice. H la boca se le queda en una perfecta forma de corazón — ese tipo de problemas.

—Exacto.

¿Qué no iba a entender? Se estaba divorciando. Yo sabía que tenía problemas. No sabía la causa, pero el efecto estaba revoloteando a mi alrededor.

Me cruzo de brazos. Aunque se que eso solo empeora que mis pechos se sientan más grandes no me importa. No si por ello puedo obtener una leve taja de la mirada de un hombre como él.

Gentleman  ━  Benedict Cumberbatch.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora