La casa de enfrente parecía estar deshabitada. No se escuchaba ni un solo ruido y la puerta seguía adornada con el letrero de cerrado.
Una y otra vez repaso con la mirada el letrero que parecía burlarse de él.
Miro la hora en su teléfono.
- ¿No es un poco tarde para abrir un café? Ya todos se habrán ido a trabajar a esta hora.
Señaló sin perder de vista el letrero de cerrado, como si mágicamente fuera a cambiar de repente a "abierto"
- Supongo que hoy abrirán más tarde... Hay otro café un par de calles abajo, puedes ir ahí. No te perderás, aquí es imposible.
Inha se acomodó el cabello y le palmeó la espalda a su hermano antes de salir.
- Volveré a las 4:00 para comer juntos ¿Está bien? Si te da hambre puedes comer fruta o alguna galleta mientras me esperas, solo por favor no arruines tu apetito, te tengo una sorpresa que de verdad te va a encantar
Jude sonrío suavemente mientras asentía
Espero frente a la ventana aun cuando Inha ya se había ido y espero un poco más y un poco más
- ¿Cómo quieren que ese negocio funcione si lo abren cada vez que quieren?
¿Por qué estaba tan enojado? No tenía sentido. Tal vez era la abstinencia de cafeína la que lo hacía sentirse gruñon. Tomó su abrigo y aun refunfuñando, le dio un último vistazo a la casa de enfrente... Y se fue.
Un par de calles abajo encontró el otro café
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Frágil
FantasyMatthew Nilsen es muy atractivo y sumamente superficial. A Estado esperando ansioso a que la luna le rebele a la preciosa mujer destinada a ser su mate, sin embargo quedará profundamente decepcionado cuando un rayo de la diosa madre ilumine a la per...