Un ser con un Gran Parecer, Pero con un Pequeño Menester...

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Fue entonces cuando saliendo del hospital el teléfono de Gabriella suena, ella se aparta un poco para contestar el llamado, y yo me quedo parado esperándola unos pasos delante...
Al terminar su llamado ella se acerca a mí y me pide ir directamente al apartamento, le pregunto si ha pasado algo, y ella me dice que no, que sólo se le ha quedado un buzo y empezaba a hacer frío, le digo que no hay inconveniente con eso, que lo hagamos.
Pasados unos cuarenta minutos, y recién llegados al apto vemos que Melanie no estaba allí, que no se encontraba en el lugar, me preocupé y le llamé, y ella al contestar dice:

-Sé cuanto querías estar con Gabs solo, que querías pasar un tiempo solamente con ella, así que he salido del apartamento a buscar donde cenar, no te preocupes por mi, ceno e inmediatamente llego al apto.-

Claramente me consterné un poco por ella, le pedí cuidado y discreción con todo lo que viese y tocase en la calle, y le mandé por mensaje la dirección de la casa de mi tío Roger pues si sucedía cualquier cosa bien me podía llamar, o llegar a allá, pues se me es fácil llegar a allá en cualquier momento pues son familia quienes viven allí...

Fue entonces cuando Gabriella me ve y me pregunta el qué tenemos planeado hacer, a lo que yo le digo;

-Llamaré a mi tío, le diré que si Mel llama o va entrando esté pendiente de que nada malo le suceda, también le pediré el que me llame si ella le llama a él.-

Sucedido lo hecho, no pude evitar estar pendiente del teléfono durante todo el resto de la velada, pues no quería que nada malo le pasase a Melanie, y se lo hice saber a Gabs en múltiples momentos...

-Relájate amor, ella estará bien, ella sabe volver al apto y le mandaste la dirección de un buen lugar a donde llegar si necesitaba algo. Muy seguramente vaya directamente a la casa de tu tío a visitar y comer allí con ellos, para volver después.-
Dice Gabs

-Bonita... Sé que quieres que me calme, que ordene la comida que teníamos pensado ordenar y nos acomodemos en la sala a jugar cartas, pero, por más de que ese sea nuestro plan perfecto, necesito saber que Melanie está bien, no me puedo quedar quieto cuando sé que ella está afuera en una ciudad que no conoce... ¿No te acuerdas cuando los tres fuimos a probar el nuevo campo deportivo de la Uni?, amor, vaya que ella se perdió en los lockers/vestidores de mujeres, linda, tu tuviste que ir a sacarla, y, si en un lugar cerrado con vigilancia ella se perdió, no me convence la idea de ella estando afuera y sola en una ciudad de América en donde no conoce a nada ni a nadie...-
-Tengo una idea, le mandaré una foto de Theo a Melanie, y le diré que vaya al Restaurant que cene allí y que se quede allí hasta que Theo termine su turno, y que entonces el la acompañe hasta aquí, ¿Qué piensas de esa idea?-

-A ella no le gustaría ser vigilada por alguien quien no conoce, es más, creo que a nadie le gustaría eso, si te soy sincera...-
-Es mejor idea que nosotros vayamos a buscarla y cuidarla, encontrarnos los tres afuera y hacer los tres algo juntos, para entonces poder presentarle a Theodore...-

En aquel momento suena mi teléfono, era Melanie, diciéndome que fue a la casa de mi tío Roger.
Me pidió que fuera con Gabriella enseguida, pues estaba sucediendo algo que en lo que era pertinente en lo que estuviésemos, le comenté que ya habíamos conocido a Valkirie, mas ella suma a la llamada el que mi tío ya le había comentado de ello y que no era cuestión de ello. Me dijo que era cuestión de Cosmo.
En aquel momento fue instintivo en mi el tomar mi abrigo, el decirle a Gab que tomase sus cosas, y decirle el que tenemos que salir inmediatamente.

Indiferente de lo que sucediese sabía que necesitaba estar en aquel lugar.

Pasados unos treinta minutos, y encontrándonos en el lugar, fuimos directamente a donde mi tío y Melanie se encontraban, ellos estaban en la sala cercana al patio, justo dónde sucedió lo acontecido...

Al ver a Cosmo recostado con un pelón en la espalda y otro en una pata, no pude quedarme quieto y callado, y lancé una pregunta al cielo en busca de no una respuesta, sino, de ser posibilidad, una solución a lo que se posaba antes mis ojos.
Ver este animal, tan hermoso animal, tan cordial y jovial, lamentarse en su costado, llorándose su dolor, simplemente me rompe mi alma, pues mientras lo veía recostado haciendo sus males menos peores, más sentía que más perdía la posibilidad de abrazarle cómo aquella vez cuando pequeños éramos y nos cubríamos de los truenos...
Quise, tener respuesta, pero mi tío se negó a decir nada pues bien sabía que nada sería consuelo ni suficientemente bueno para mí, y quería que algo lo fuera, por eso me encontraba con la necesidad de escuchar la opinión de quien cuidaba de él activamente, más sólo fui un lamento más en un mar de desconsuelo...

-Lindo... Vámonos, ¿Si?, hagamos lo que pensamos hacer, recojamos a Melanie y vámonos a casa...- Dice Gabriella intentando recomponer la situación.

Melanie hace una ronda de miradas al rededor del lugar, y lanza una observación cómo si de un boomerang se tratase, pues cuando la dijo, bien se le devolvió a su ser en forma de realización, casi asemejándose a una cachetada simbólica...
-No quiero ser incisiva, pero si de enfermedades se trata bien se le puede llevar a una clínica veterinaria, ¿No?-

A decir por la cara de mi tío, el ya lo ha estado haciendo, pero el mismo resultado seguía dándose...

-Él... Ya lo hemos estado llevando a la veterinaria, y la doctora sigue diciendo lo mismo; 5 meses de vida tiene, y por más de que hemos intentado comprarle más tiempo con medicinas y tratamientos, mas, la muerte es celosa, y el tiempo también, lo quieren ya sólo para ellos, y su cuerpo no puede con eso. Todo lo que queda por hacer es permitirle descansar en su lecho de paz y cobijo, pues mientras más tenga eso, más posibilidades de que duela menos su existencia en sus últimos parpadeos...-

Yo quería abrazarlo. Rascarle detrás de su oreja izquierda tanto cómo le gustaba que hiciera, y me sentía adolorido, pensativo, y estaba culminado por el hecho de que una gran fuente de felicidad se estaba muriendo ante mi visión...
Quise irme contra todo pronóstico e ir a su cuna y tomar la manta que le regalé justo antes de que se vinieran a EE.UU. y ponérsela encima, Cosa que si terminé haciendo, pero la misma imagen de verle sufrir con una muestra de unión encima fue el detonante para un llanto incesante, para un miedo escalofriante, de perder a quién se amó con cuál amor mayor se tuvo...

Gabriella, me abraza, me dice que por que me ama es mejor irnos, y Mel me dice que mañana habrán cosas importantes que hacer así que mejor enfocarnos en eso...
Yo todo lo que tenía en mi cabeza era el recuerdo de cuando este bello animal y yo nos hacíamos dentro de una carpa que armaba cada que tenía oportunidad de colocar el telescopio afuera de la casa finca de mis padres, y nos poníamos a ver el cielo, el desde sus pequeños ojitos, y yo viéndolo con mayor detalle desde el telescopio...

Me desenvuelvo de los brazos de mi novia, le tomo la mano, y le pido reconciliación con el hecho de que quiero devolverme a México cuanto antes...
Fue entonces cuando mi tío se me acerca, pone su mano en mi hombro, y con una sonrisa a medio quebrar nos pide seguirlo...
Unos pasos después de la casa/cuna de Cosmo había una caja de tamaño mediano con unas cobijas encima y un osito de felpa y trapo a medio dañar, para entonces cuando he de ver el oso, mi tío suelta el alarido del siglo; -JESS!!, ¡No me digas que pulgoso volvió a salirse de la caja!-, para luego salir corriendo a fijarse debajo de los sillones y sofás y detrás de las cortinas...

Fue entonces cuando Mel pregunta; -¿De qué estamos en búsqueda?- para toparse con lo que se buscaba en primer lugar detrás de ella...

-¡Hola amiguito!, ¿¡Quién tú eres!?, mejor dicho, ¿De quién tú eres?-

Gabs y yo volteamos hacia Melanie para verla cargando una cría de Cosmo.

-¡¡Pero que cosita bonita!!- Orilla hacia afuera la frase Gabriella.

-Ehmmm, Tío, hemos encontrado lo que buscabas!- grito desde el otro fin de la casa...

Mi tío mientras más se acercaba más ponía una sonrisa en su rostro, más parecía querer decir, "Cuando una puerta se cierra, otra más grande se abre"...

Parecía que todos queríamos acuñarle la frase a la situación de, "No importa que le pase a Cosmo,. nosotros tenemos algo que nunca nos permitirá olvidarlo"...
En aquel momento por tanto barullo la bebé se despierta y empieza sollozar desconsoladamente, para entonces llegarme una realización a mi corazón, la cual, mientras más triste aparentaba ser para algunos, mayor beneficio le daba a quienes realmente la necesitaban...

Mientras mi tía Jesse se hacía cargo de la bebé, mi tío se acercaba a nosotros y Melanie le hacía pucheros a tan preciosa criatura, yo le digo a Gabriella;

-Bonita... Si alejarme de este animalito significa permitirle crecer al lado de otra criaturita quién le cuide igual de bien o mejor, créeme que eso es lo que quiero. No interesa por el qué vinimos, lo que importa es que lo hicimos, y tuvimos la oportunidad de decirle un adiós a alguien especial, y saludar a un alguien nuevo quien a nuestra vida traerá mucha gratificación. Me gustaría que Val, la bebé, tenga al perrito, su mascota...-

Al haber tenido a mi tío en frente, y haberle comentado a groso modo lo que le dije a Gabs, mi tío no pudo más que enorgullecerse de mí, y agradecerme por haber venido, por haberlos visitado en un momento clave de sus, y ahora, nuestras vidas...

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⏰ Última actualización: Jul 11, 2022 ⏰

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