Harry y Louis son residentes en el Hospital Saint Thomas de Londres.
Harry es residente de Neurología y Louis es residente de Cirugía pediátrica.
No tienen nada en común más allá de su amor por la medicina y su pasión por salvar vidas.
O eso es l...
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Harry PDV
Despierto porque la luz que entra mediante la ventana de la habitación de hotel, me pega directo a los ojos. Me he olvidado de cerrar las cortinas anoche y la verdad es que me estoy arrepintiendo totalmente de mi estupidez.
Lo primero que noto, una vez que he despertado y me he dado cuenta de que la claridad que me pegaba a la cara, era la luz natural, fue que tengo resaca y una bien grande. Me duele la cabeza terriblemente y siento que si me muevo muy rápido, vaciaré el contenido de mi estómago sin detenimiento alguno.
Me golpeo mentalmente por ser tan estúpido, no estoy acostumbrado a beber en esta cantidad, bueno la verdad, es que no estoy acostumbrado a beber y punto. La última vez que bebí mi peso en cerveza y tequila, fue hace casi tres años, en una de las fiestas de fraternidad que ofrecía algún amigo de Niall y a la cual me arrastró y me arrepentí de ello en cuanto todo el contenido de mi estómago comenzó a salirse de mi estómago.
Me digo a mí mismo que todo está bien, que tengo que ser cuidadoso con mis movimientos, necesito tomar una ducha, tragar algunas tabletas de tylenol y beber al menos dos tazas de café y tal vez, solo tal vez, comer algo, si mi estómago me lo permite.
Dejo la comodidad de mi cama al darme cuenta de que es más tarde de lo que pensé y no tengo tanto tiempo para hacer todo lo que necesito hacer antes de irnos. Así que me pongo de pie, tomo una ducha medianamente fría, me preparo la primera taza de café del día y me trago dos tabletas de tylenol con un par de tragos de agua. Guardo dentro de mi maleta las últimas cosas que necesito y me aseguro de no olvidar los cargadores de mi móvil y de mi computadora, ya me ha pasado antes y no es divertido ni económico el tener que reponerlos.
Una vez que he acabado mi taza de café, me preparo otra y tomo mis cosas, saliendo de la habitación tras dar una última mirada. Tomo el elevador y llego a la recepción donde veo a la mayoría de mis compañeros, entre ellos a Louis, quien luce un poco diferente, la verdad es que no sé explicarlo, pero tiene algo.
Hay una especie de flashback volviendo a mi cabeza cuando me acercó a él, cuando el aroma de su perfume me golpea, pero no puedo recordar bien. La noche anterior es solo una especie de torbellino de alcohol y luces.
—Buenos días—le digo, mi voz sonando un poco más ronca de lo normal.
—Buenos días Harry, tengo noticias
—¿Qué pasó? —puedo notar la emoción en su voz y eso me intriga, que ha sucedido para que él suene así.
—Thomas despertó, mi madre me envió un mensaje para avisarme y que estaba preguntando por mí.
