Parte 01: Sentimientos

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Faltaba un mes para el tercer Interhigh, donde el favoritismo nuevamente volvía a establecerse para Hakone, sin embargo, se tenía una enorme expectativa en un posible tricampeonato de Sohoku con su mayor estrella, Sakamichi Onoda, quien no hacía nada más que entrenar arduamente día a día. Algo que se notaba cambiado en el muchacho, era su mejora en la condición física. Su cambio en musculatura le facilitaba las escaladas, tanto que era imparable para sus compañeros cuando realizaban escaladas en los entrenamientos. Esto hacía que su popularidad no haga más que aumentar cada vez más. Para Aya esto era muy molesto, tanto que decidió hacerle caso a Naruko.

Después del entrenamiento...

"Rayos, estoy cansado" – Pensaba Onoda mientras aparcaba su bicicleta después del entrenamiento. Los últimos meses los entrenamientos eran mucho más exigentes, además de tener que lidiar con sus fans, quienes siempre interrumpían sus actividades de club por pedirle un autógrafo o una foto. De verdad extrañaba un poco su tiempo donde no llamaba la atención.

El "Escalador Cantante" o "Escalador Otaku" eran algunos de sus apodos. Ya se había acostumbrado, además con la responsabilidad de tener que ser el capitán de Sohoku era algo bastante agotador. Dada la popularidad de Sohoku, no era sorpresa que tenga que dar alguna entrevista, algo que en Hakone estaban acostumbrados, pero para él, esto era totalmente nuevo.

"Kanzaki-san me dijo que no podía ir conmigo a la entrevista, rayos, ¿dónde se metieron Imaizumi-kun y Naruko-kun? Le pregunté a Kaburagi-kun y me dijo que debía ir a entrenar con Danchiku-kun" 

"Teshima-san ¿por qué me escogiste a mí como capitán? ¡Necesito que alguien me acompañe!" – Pensaba el frustrado chico, que se preparaba para una pequeña entrevista donde hablaría de cómo se prepara Sohoku para el Interhigh - "¡Tendré que hacerlo solo, rayos!"

- Onoda – Una voz lo sacó de sus pensamientos, al ver quien era se alivió un poco.

- Tachibana-san ¿qué haces aquí?

- S-supe que irías a una entrevista como capitán del Sohoku, y p-pues, q-quería saber si p-puedo ir co-contigo - Dijo mientras intentaba inútilmente controlar su timidez por hacer esto.

Onoda sintió un gran alivio y sin poder contenerse, abrazó a la nerviosa chica, quien no podía más de los nervios.

- ¡Gracias Tachibana-san, eres genial! Esos traidores de Naruko-kun e Imaizumi-kun me dejaron solo con esto – El chico no se percataba que su compañera estaba roja de la vergüenza.

- E-esta bien, puedes soltarme – Dijo Aya intentando calmarse.

"Rayos, ¿por qué haces eso de repente? Eres demasiado...lindo"

Tras calmarse, ambos fueron a aquella entrevista, donde con el apoyo de la chica, Onoda se pudo expresar tranquilamente. Pero también, causó mas de alguna escena extraña que los incomodó a ambos.

Mientras tanto, Naruko e Imaizumi conversaban en la sala del club sobre su ingenioso plan.

- Oye Estrella ¿qué te pareció mi plan? Fue muy inteligente engañar a todos los demás para dejar a esos tortolos solos, ¿no es así?

- Estoy seguro que Tachibana-san solo quiere golpearte.

- ¿Eh? ¿Y por qué debería golpearme? El genio del ciclismo Naruko Shoukichi le permitió acompañar a Onoda-kun a aquel lugar, dime ¿crees que se haya declarado?

- Lo dudo, estaba más nerviosa que el mismo Onoda en el Interhigh. A estas cosas debes darle tiempo, Naruko.

- Tsk, siempre hablas con tanta altanería como si lo supieras todo, Estrella. Ten confianza, pronto veremos a Onoda-kun convertirse en un hombre de verdad.

- No sé si lo intentas ayudar o lo insultas.

Mientras tanto...

Sakamichi y Aya volvían al salón del club después de aquella extraña entrevista. En general no fue mala esta experiencia, pero si algo incómoda.

"Maldición, ¿por qué pensaron eso de mí?" – Pensaba Aya muy nerviosa, quien caminaba al lado de Onoda - "Todo esto es culpa de ese estúpido frijol rojo, lo voy a golpear cuando volvamos".

- O-oye, Tachibana-san - Le llamó Onoda, quien venía algo sonrojado.

- ¿S-si?

- N-no pienses en lo que dijeron ellos, son solo estupideces.

"Estupideces..."

Y es que no era para menos. La primera pregunta que salió de los periodistas al verlos juntos fue "Onoda-san, ¿ella es su pareja?".

Ante esto los nervios y la confusión se apoderaron de inmediato de la pobre chica, quien a duras penas pudo disimular su estado. Pero lo que más la desanimó fue lo que dijo Onoda después: "No, es una compañera de club y una gran amiga".

Pese a estar feliz con que él la considere alguien importante, se sentía rara, una parte muy profunda de su ser deseaba gritar lo que sentía, algo que comenzó siendo curiosidad y con el paso del tiempo se terminó convirtiendo en algo más que admiración.

- Ah, si, claro, estupideces – Su rostro se sintió mareado al oír esto nuevamente.

"¿Por qué me enamoré de ti, maldito cuatro ojos? ¿Acaso fue el verte tan indefenso y ver ese contraste con tu apariencia al pedalear? O tal vez ¿tus tiernos gestos cuando te pones nervioso? ¡Maldición!"

- Eh ¿te sientes bien? – Preguntó el chico de lentes al ver a su amiga tan extraña.

- S-si, no te preocupes – Sin embargo, la curiosidad la obligó a preguntar – Oye, ¿entonces tienes un club de fans? "Rayos, ¿por qué dije eso de repente?"

- Pues, no sé si llamarlo así, en parte aprecio sus muestras de cariño, pero me cuesta asimilarlo.

- Pero ¿no te interesa tener pareja?

- ¿Ehhh? ¿P-por qué lo dices?

- Bueno, ahora eres popular, he visto que muchas chicas te coquetean. ¿No te interesa salir con alguna de ellas?

- B-bueno, de verdad es nuevo lo que vivo hoy en día, siempre he sido tímido, e incluso hoy en día lo sigo siendo, y de repente, ver a tantas chicas gritando mi nombre y a personas que me respetan, me hace sentir bien, pero tampoco me logro acostumbrar.

- ¿A qué te refieres?

- A que en ocasiones pienso que solo me hablan por lo que logré, y extraño un poco mis días donde no destacaba y podía ir a mis lugares favoritos como Akihabara, sin que me conozcan o me detengan cruzando la calle de la esquina – Se detuvo en su camino, confundiendo a Aya, quien lo miraba expectante.

- Entonces, si una chica se te declara ¿saldrías c-con ella?

- Si estuviera con una chica, me gustaría que fuera alguien a quien conozca bien, alguien... que no le moleste como soy fuera del ciclismo, y a quien yo pueda hacer feliz – Dijo mientras una melancólica sonrisa se apoderaba de él.

Ante esto ella se congeló. Su corazón latía con fuerza, tenía ganas de agarrar a este chico y besarlo, pero no podía, al menos no aún. Primero tenía que averiguar que siente él hacia ella.

"De verdad eres increíble"

"¿Me verás siempre como una amiga, o como...algo más? Sea lo que sea, lo averiguaré"

El Cambio (Onoda x Aya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora