El Cambio (Onoda x Aya)

Parte 06: El paso de las horas

El segundo día había llegado. Nuestro equipo protagonista se preparaba para un arduo desafío después de quedar segundos el primer día. El equipo no perdía las esperanzas de salir campeones nuevamente este año, y por eso su motivación estaba intacta.

Sin embargo, pese a que el equipo estaba concentrado, Onoda todavía pensaba en lo que sucedió la noche anterior con su amiga. Aún pensaba en por qué reaccionó de esa forma, y el por qué ella no se separó de él en ese mismo instante. Si no hubiera sido por Miki tal vez se hubiesen besado, y ahora él sería tratado como un pervertido. Estos pensamientos lo hicieron ponerse nervioso y murmurar cosas inentendibles para sus amigos quienes lo miraban de manera extraña.

- ¿Está todo bien, Onoda-kun? - Le preguntó Naruko.

- ¡Aaaah! - El pobre muchacho se asustó por la repentina pregunta de su amigo, provocando que se caiga de la bicicleta.

- Uhm, creo que eso me lo confirma. Oye, no sé que estarás pensando, pero debes calmarte - Dijo el pelirrojo mientras levantaba a su amigo.

- Eh, sí, entiendo, Naruko-kun. Daré lo mejor de mí.

Tras calmarse, el tímido escalador se concentró en observar el ambiente, ya estaban en la línea de salida, el día era caluroso y los espectadores estaban preparados. Entre ellos también destacaban muchos grupos de admiradoras.

- Aquí vamos, 3, 2, 1, ¡ONODA-KUN, ESFUÉRZATE! - Gritaban con fuerza sus admiradoras, generando algo de nerviosismo en el joven, quien decidió saludarlas con timidez, algo que a ellas les encantaba de su personalidad.

- ¡Kyaaa! ¡Que lindo! - Los gritos de ellas causaban algo de irritación en los demás competidores, quienes miraban con algo de envidia al pobre muchacho, quien no hallaba como manejar esto, mientras Naruko e Imaizumi veían divertidos esta escena.

Por otro lado, Aya y Miki se encontraban entre la multitud cercana a la línea de partida, por lo que podían ver con exactitud al equipo Sohoku. Pero ella estaba algo molesta sobre todo cuando acababa de escuchar al club de fans de su querido "cuatro ojos". Esto la irritaba mucho y no podía evitar ponerse celosa, más aún cuando notaba la forma en la que lo miraban.

"Tch, esas estúpidas" - Pensaba mientras apretaba sus puños.

- ¡Aya-chan! - La voz de su amiga la sacó de sus pensamientos. Sin embargo, con ella también estaba molesta.

- ¿Eh? ¿Miki, qué sucede?

- Has estado allí mirando a Onoda-kun desde hace un momento.

- Tch, ¡déjame en paz! - Le respondió bastante cabreada, ya que a su mente venía el casi beso que le pudo haber dado a Onoda, pero debido a la interrupción de Miki no fue posible.

- ¿Por qué estás tan molesta?

- ¡Estoy tranquila! - Gritó llamando la atención de algunas personas a su lado. Al ver esto, se ruborizó y se calmó.

- Entiendo que estés nerviosa por el equipo y por Onoda-kun, sin embargo no debe frustrarte ver que tiene fanáticas, deberías solo apoyarlo.

- C-claro, lo entiendo.

Tras unos minutos más, el segundo día del Interhigh comenzó.

Horas después...

Al terminar el segundo día, el equipo recibió un balde de agua fría al quedar terceros, y los ánimos claramente no eran los mejores. Habían conseguidos dorsales de montaña y sprint, había sido un día casi perfecto, de no ser por el plan de la Academia Hakone quienes se concentraron únicamente en la meta, lo que derivó en su victoria en la carrera final del segundo día. Kyoto Fushimi, liderados por Midousuji quedaron segundos. Todo quedaba para el último día.