«Que empieze el juego»
Allyson
Escuché un vidrio quebrarse por lo cual me desperté y rápido me levanté de la cama.
«¿Qué está pasando?»
Aspen estaba peleando con alguien.
Solo ví en el momento que le clavo una estaca en todo el pecho.
—¡Allyson, rápido!, Hay que irnos de aquí— dijo sofocado.
Mi vista se perdía en la persona que estaba tirada en la habitación con la estaca penetrando su pecho.
Aspen se acerca a mi y me toma de los hombros —¡Allyson, no tenemos tiempo!— dice moviéndome rápidamente.
—¿Qué pasa?— dije con mi vista aún puesta en aquel chico.
Se escuchaban más cosas partirse afuera de la habitación, y había mucho ruido.
—Ponte esto y vámonos— dijo aspen lanzando la túnica roja por el aire.
Me la coloque lo más rápido que pude, y me coloque mis botas.
—Escúchame, nos han encontrado, están afuera y hay muchos de ellos, necesito que pelees y utilices tus poderes, eres la más poderosa de todos nosotros, y no tengas miedo, cuidaré de ti pasé lo que pasé, ¿Está bien?— dijo abrazándome.
Yo solo asentí con mi cabeza y no tenía miedo, ya me había preparado mental y físicamente para esto, estaba decidida combatir con ellos, por quitarle la vida a mi madre, a Arthur y a aquellas personas inocentes.
Aspen me tomo de la mano y abrió la puerta. todo estaba echo un desastre había sangre en las paredes, todo estaba desordenado y roto, y los chicos... peleaban contra otros.
—¡Allyson, ven con nosotras!— dijo Mía tomándome de las manos.
—Espera, pero y Aspen...
—Estaré bien Piccola, las alcanzaré pronto. Ten cuidado y cuida a las chicas también— dijo sosteniendo mi cara entre sus cálidas manos.
Le plante un beso en sus labios y salí del sitio con Mia.
Las chicas estaban afuera esperándonos, junto con Augustine y Asher.
—Vamos— dijo Asher tomándome de la cintura.
Con los poderes de vampiros podíamos correr rápido y saltar muy alto, pero con mis poderes de sacerdotisa podía volar, pero no lograba mantener el equilibrio completamente, aún me costaba un poco, por lo que tuve que correr al igual que los demás.
Llegamos a la cabaña y nos metimos adentro de ella, los chicos sacaron algunas cosas y habían arcos y flechas también, ya había tenido práctica con ellas, las chicas me habían enseñado y soy muy buena con la puntería.
—Ok, tenemos que cuidarnos todos las espaldas, no podemos dejar que nadie muera, y aunque es algo que no podemos prometer, hagamos que no pase— dijo Augustine dando largos pasos por toda la habitación.
—Haber, solo...concentrarse y estén preparados— dije amarrando las cuerdas de mis botas.
Pasaron unos segundos de silencio cuando se escuchó como tocaron la puerta de madera, dejando a todos en pleno silencio.
Está se abrió dando a ver el rostro de Aspen, Nick, y Benjamin, mi corazón se relajo y todos suspiramos.
—Salgan afuera, no creo que sea bueno, pelear adentro de una cabaña— dijo tomando aire por su boca.
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Los Giordanos
VampireAllyson era una chica normal con una vida no muy distinta a las demás,en un pueblo tranquilo y humilde. Pero pronto llegaría algo inesperado a su vida, Los Giordanos... ¿Podrá mantener su vida normal luego de haberse cruzado con ellos?