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Park iba tan confiado y distraído conduciendo, que no cayó en cuenta de que iba a exceso de velocidad cuando paso junto a un auto policial que estaba allí controlando

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Park iba tan confiado y distraído conduciendo, que no cayó en cuenta de que iba a exceso de velocidad cuando paso junto a un auto policial que estaba allí controlando. Rápidamente los uniformados encendieron sus balizas mientras lo perseguían, indicándole que se detenga y así lo hizo.

Ya orillado a un lado del camino, los oficiales se acercaron para informarle de la infracción que acababa de cometer. Le pasaron una multa junto a una citación y todo habría quedado así, si no fuera por la presencia del niño que llamo la atención de uno de los hombres. 

- Hey pequeño, debes decirle a tu abuelo cuando va demasiado rápido o los pondrá en peligro.

Le habla con una sonrisa amable por la ventanilla del auto. 

- Claro que sí, yo me encargo señor oficial.

El hombre le sonríe una ultima vez, antes de revisar un mensaje que le mandaron de la central de policía. Allí estaba un cartel de búsqueda de un pequeño niño y la orden de captura al hombre que lo secuestro.

- Muy bien señor Park, conduzca con cuidado y recuerde presentarse a la citación.

- Claro señor.

El hombre estaba listo para arrancar hasta que un grito se escucha.

- ¡No lo dejes irse!

El policia más cercano detiene el auto, abriendo la puerta del conductor para evitar que se escape mientras su compañero busca las esposas e informa que tienen al niño y el sospechoso.

- Queda arrestado por secuestro a un menor.

Rápidamente hacen todo el prosedmiento para poder llevar al pequeño Seungmin con su angustiada familia. Y es así como 2 horas despues el señor Park esta en prisión preventiva mientras se planifica su juicio, y el niño camina por los pasillos del hospital junto a su tío para conocer a su nuevo hermanito y ver a su padre omega.

- Mira quien esta aquí.

Kai asoma la cabeza por la puerta antes de abrirla por completo, revelando el cuerpo del menor.

- Oh por la lunaa, es mi niño.

Con los ojos vidriosos y el cuerpo adolorido por la reciente cesaría, Jimin se acerca al niño para abrazarlo fuerte y llenarlo de besos. Pero justo cuando sus dedos están a un milímetro de tocarlo, todo le da vuelta y cae en la oscuridad.

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