Golden Fox ¦Hunter¦

XII

Al llegar a su casa se puso su ropa para trabajar, que consistía principalmente en un short y polera viejos que ya estaban llenos de pintura, escuchó una llamada en su bola de cristal y la respondió.

—Hunter, que raro que llames a esta hora —Dijo Harmonie.

—¿Mal momento? —Preguntó el rubio.

—No, solo me sorprende —Dijo la pelirroja mientras que ataba su cabello y escuchó como le hablaban a Hunter —Pero creo que es mal momento para ti.

—Dame un segundo —Dijo Hunter y fue a abrir la puerta de su habitación, Harmonie lo escuchó decirle a quien sea que estuviera ahí que se largara porque estaba ocupado antes de volverlo a ver a través de ma bola de cristal —Lo siento ya volví.

—¿Hay alguna razón por la cual llamas ahora?

—Solo quería decirte que conseguí ese permiso que te dije, te quiero mostrar un lugar especial, pero no puedo antes del atardecer, lamento que sea tan tarde...

—Hunter, está bien, eres el guardia dorado y estoy segura de que estas muy ocupado —Dijo Harmonie intentando que el rubio se calmara —Y de todas maneras tengo que avanzar un poco con los cuadros.

—Si, en ese caso pasaré por ti al atardecer.

—Aquí te espero —Dijo y en ese momento se escucharon unos golpeas en la puerta —¿Uh? No esperaba a nadie, bueno debo ir a abrir, nos vemos al atardecer.

—Nos vemos —Dijo Hunter y la llamada se cortó, Harmonie corrió a abrir la puerta, era Edric.

—¿Te interrumpo? —Preguntó este viendo que tenía puesta su ropa de trabajo.

—No, aún no empiezo —Dijo y se quitó de la puerta para que Edric pudiera entrar.

—No te preocupes, solo venía a dejarte esto —Dijo y le mostró aquel collar que siempre usaba.

—Últimamente estoy perdiendo muchas cosas.

—Debes tener más cuidado —Dijo y le puso el collar —Manoplas lo encontró tirado y me lo entregó.

—Gracias Ed, y dale las gracias a Amity por mi —Dijo Harmonie y pronto sintió cómo Edric la abrazaba.

—Últimamente te estás poniendo mucho en peligro —Dijo Edric y Harmonie dejó pequeñas caricias en su cabello.

—Créeme que no lo hago a propósito, pero hey, algo bueno salio de esto.

-—¿Qué cosa?

—Ahora estoy en todas las clases, voy a estudiar todo tipo de magia.

—Creí que eso ya lo hacías —Dijo Edric sonriendo.

—Si, pero por mi cuenta lo cual resultaba ser poco productivo —Dijo Harmonie y Edric comenzó a besar sus mejillas.

—Me alegro mucho por ti, de verdad —Dijo y juntó sus frentes —Quisiera quedarme pero...

—¡Edric date prisa no pienso ir sola a recibir a los clientes de mamá! —Gritó Emira y Harmonie dirigió su vista —¡Por cierto hola Harmonie!

—¡Hola Em! —Dijo la pelirroja y besó la mejilla de Edric —Ve antes de que te maten.

—Buena idea, te veo en la escuela —Dijo Edric y le devolvió el beso antes de ir con su hermana, ambos se despidieron con la mano de la pelirroja, gesto que Harmonie imitó.

Terminó uno de los cuadros que tenía y mientras que este se secaba fue a ducharse para poder quitarse pintura que había caído en su rostro, brazos y piernas. En lugar de su típica falda se puso un pantalón negro manteniendo su polera blanca, pero en lugar de su chaleco llevaba puesta una capa igualmente roja. Al atardecer se encontraba esperando a Hunter quien no tardó mucho en llegar, realmente le causaba curiosidad el porqué el guardia dorado tenía tal interés en hablar y salir con ella siempre que tenía la oportunidad.