Retorno a una Pesadilla (16)

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"Oh, deja de gritar, traté de advertirte, Noah"

Dijo el sheriff a través de los ecos del disparo que aún resonaban en el campamento.

Caí de rodillas y grité en la nieve hasta que reventé todos los capilares de mi cara.

"Joder, hijo..."

Dijo el sheriff disgustado.

"Basta de teatro, ni siquiera me puse así cuando murió tu madre..."

Tú la mataste!"

Le grité.

Tú la asesinaste!"

Se encogió de hombros.

"He matado a mucha gente. Aunque, debo decir, lamento no volver a tener un turno con ella. Por lo general, no me gustan las rubias, pero había algo en ella. De tal padre, tal hijo, supongo..."

Él se rió.

"Le dije que no viniera, le dije que no viniera..."

Murmuré, apenas coherente.

Cállate! ¡Cállate! ¡Cállate la boca!"

Le grité. Grigg dio un paso hacia mí, pero mi padre lo detuvo con una mano.

"Déjale que haga su rabieta. Hizo lo mismo cuando le quité sus juguetes cuando era niño, esto no es diferente..."

Richards pasó por encima del cuerpo sin vida de Carmen e intercambió algunas palabras en voz baja con el sheriff. No podía escucharlos debido a la agitación seca de mi estómago, que no se detuvo hasta que me dolieron los músculos abdominales por la fuerza de ellos.

"Richards acaba de tener una idea interesante: te espera un verdadero placer, Noah. Levantadle"

Dijo el sheriff a los hombres detrás de mí. Me levantaron y me empujaron en dirección a mi padre. Tropecé, pero no caí.

"Ya no lo usamos demasiado debido al ruido, pero, ¿Qué tal si tiramos el cuerpo de tu novia al Hombre Brillante y esparcimos sus fragmentos de hueso por toda la montaña?"

Me dio una palmada en la espalda.

"¡De esa manera ella puede estar aquí en la mina por toda la eternidad! Apuesto a que a ella le gustaría eso..."

Estaba temblando tan violentamente que apenas podía limpiarme la sangre de los ojos.

"No..."

Dije y volví a caer de rodillas en la nieve.

"¿No? ¿Estás seguro?"

Preguntó. Podía escuchar la sonrisa en su voz.

"No. No por favor..."

Mi voz quebró mis palabras.

La sonrisa del sheriff se convirtió en una mirada de disgusto.

"No ruegues..."

Escupió.

"Te hace parecer débil. Levántate..."

"Por favor, no la toques"

Continué.

"¿Sabes qué pasa, Noah? No eres lo suficientemente hombre para coger lo que quieres. No eres lo suficientemente fuerte para decir: a la mierda lo educado, a la mierda las consecuencias, a la mierda la ley"

Eres un puto policía!"

Me ahogué.

"¿Ves? Ahora hay un poco de espíritu. A veces en la vida solo tienes que reclamar lo que debería ser tuyo. Sobre eso se construye la sociedad. Ahora nuestra operación puede no funcionar dentro de las leyes del país, pero seguro que trabajamos dentro del gobierno"

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