Love Is A Laserquest

XVIII

Abril 2010

Después de aquel día, no había visto a Alex o hablado con él. Me encontraba en una relación con Asher, pero todo era bastante confuso. Asher era un chico muy lindo y tierno, a veces me desesperaba mucho que era bastante cursi, aparte luego muy posesivo y celoso, pero realmente seguía con él para intentar olvidar a Turner.

Lógicamente, todos mis intentos desesperados por olvidarlo no funcionaron, me sentía mal porque sentía que le era infiel a mi novio, ya que todo el tiempo me la pasaba pensando en otra persona. Todos los días pensaba en hablarle a Alex, pero sería inútil, él había dejado muy claro todo respecto a nosotros. Así que tuve que resignarme y seguir con mi vida, sin él.

Mayo 2010

Me encontraba en un lío mental, creo que era momento de terminar mi relación con Asher, él se encontraba enamorado de mí y yo simplemente no podía sentir ni un poco lo que él sentía por mí. Decidí citarlo en un lado para poder aclarar las cosas.

-Hola, amorcito- Dijo él al llegar al lugar
-Hola..
-¿Todo bien?- Me acobardé al ver sus ojos verdes mirarme con preocupación
-Sí- Intenté sonreírle
-¿Segura?- Le tenía que decir, no podía seguir jugando con él
-Sí..No..Ash, tenemos que hablar
-¿Sobre qué quieres hablar?
-Yo te quiero, te quiero mucho, pero yo no siento el mismo gran amor que tú sientes por mí
-Ya lo sentirás- Me interrumpió, haciendo todo mucho más difícil
-No, Ash. No me siento bien haciendo esto, tú eres muy lindo y mereces a alguien que corresponda todo tu sentir, mereces a alguien mucho mejor que yo
-Pero yo te quiero a ti- Noté como sus ojos se llenaron de lágrimas
-Lo sé y por lo mismo no me siento bien el hecho no sentir lo mismo que tú. Te juro que yo soy la del problema, tú eres muy lindo y como te dije, mereces algo mucho mejor
-Kat...
-Cuídate, Ash
-Está bien- Él se levantó y decidió irse, sabía que lo había lastimado y eso simplemente me hacía sentir peor

26 de Mayo 2010

Hoy era cumpleaños de mi madre, ella había decidido pasar su cumpleaños en la mañana con mi padre en el hospital, en la tarde conmigo y en la noche con su novio. Ella justo se acababa de ir con su novio, yo me encontraba viendo una película cuando mi teléfono sonó, me sorprendió ver el nombre de Alex en la pantalla. Mi corazón comenzó a latir extremadamente rápido y sentí que el aire comenzaba a faltarme, intenté tranquilizarme para poderle contestar y que sonara lo más tranquila posible.

-¿Alex?
-Hola, Kat. ¿Cómo te encuentras?
-Me encuentro bastante bien, ¿Y tú? 
-Me da gusto, yo también me encuentro bien. Perdón que te moleste, sé que hoy es cumpleaños de Lily, le intenté hablar pero decía que el número no existía
-Oh, mi madre cambió de número hace unos días, si quieres te paso su nuevo número
-Te lo agradecería mucho- Se formó un silencio en lo que buscaba el nuevo número de mi madre, después le dicté el nuevo teléfono -Gracias,Kat. Perdón por haberte molestado
-¿Por qué sigues diciendo eso?
-¿Decir qué?
-Qué me molestas- No contestó -No me molestas, Alex. Nunca me molestarás
-Bueno, perdóname
-No te preocupes- Se volvió a formar un silencio incómodo, pero no quería dejar de hablar con él -¿Ya vas a dormir?
-No lo creo, ¿Y tú?
-No lo sé, me encuentro un poco cansada por todo lo de hoy
-¿Qué hiciste hoy?- Alex y yo estuvimos hablando de lo que habíamos hecho en el día y todo se encontraba relativamente bien, después hablamos de las bandas en común que nos gustaban (Como the strokes) y me enseñó algunas canciones de la banda que no conocía. Me emocionó bastante el hecho de escuchar una cancion que él me había recomendado, estaba feliz mientras la escuchaba y seguía hablando con él. Estuvimos hablando de otros ciertos temas. Hasta que terminó mi gran fantasía
-Bueno, Kat. Me dió mucho gusto poder hablar de nuevo contigo y espero mañana u otro día podamos hablar, descansa.
-Descansa, Alex- Colgué y me encontraba sumamente nerviosa y feliz, ¿Era normal sentirme de esa manera? Él me dijo que podíamos hablar mañana u otro día. No podía aguantar hasta que fuera mañana y poder seguir hablando con él, realmente lo quería conmigo. Tenía que hacer algo para que él volviera conmigo, sí o sí.