Lia Elizabeth Bernadotte una joven princesa quien a pesar de tener todo el peso de ser la próxima reina, pensará primero en los demás antes que ella, esto llevándola a conocer a una cierta persona totalmente diferente a ella.
Por otro lado Max Vers...
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◞♡ I SEE YOUR FACE IN EVERY CROWN ◞♡
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EL DEPORTE ERA COMO UNA MONEDA , me agradaba pero a la vez no, tenemos una relación amor odio.
En el colegio, podría ser muy inteligente, pero la clase de deporte solo me agradaba porque me sacaban del salón para estar en el patio.
Otra verdad es que siempre que nos ponían a hacer ejercicio me iba hacia otro lado y caminaba, iba al baño o me escondía para no hacer nada.
No fui muy buena en la mayoría de estos, solo desde niña el ballet, tenis y el patinaje artístico fueron mi pasión, pero hace casi más de un año que los dejé.
Jugar golf es una de esas actividades que me interesan pero a la vez no . Nunca lo había jugado, había asistido a algunos juegos, pero jugarlo yo, no.
Uno de los guardias avisó que una llamada llegó al castillo, no le había tomado importancia pero había dicho que quería hablar conmigo.
— Princesa — una chica me miro — dice que es su maquillista, necesita verla hoy mismo, con ropa deportiva para unas fotos — Jake me miro alzando una ceja y yo solo me quede pensando.
Yo no tengo maquillista, hace tiempo que no hago sesión de fotos, ropa deportiva, yo no uso eso.
— ¿ estas segura que es mi maquillista ? , digo que yo recuerde no he tenido una — hablé intrigada y ella solo se me quedó mirando.
— eso es lo que dice, además creo que está enferma, su voz se escucha como, ahh , ya se, forzada —
Me levante del sillón y me aleje con el teléfono en la mano. No tenía idea quien sería esta persona, hacerse pasar por mi maquillista, por Dios!
Me acerqué el teléfono al oído y al parecer esta persona comenzó a hablar, creo que sintió que estaba yo del otro lado de la línea.
— cómo le decía quiero hablar con la princesa Lia— una voz forzada se escuchaba, era sencillo, un hombre haciéndose pasar por mujer y risas en fondo — necesito mostrarle las nuevas tendencias de maquillaje — seguía hablando tonterías falsas y obviamente me di cuenta que era una broma.
