Yo, cuando nací, fui entregado a un orfanato, el lugar donde botan a los indeseables.
El orfanato se encontraba en medio de la nada, rodeado únicamente por vastos campos que se perdían en el horizonte.
En aquel lugar remoto, la ausencia de puertas de entrada o salida carecía de importancia, pues los huérfanos que lo habitaban no tenían a dónde dirigirse. Estaban completamente solos en el mundo, sin familiares ni hogares a los que regresar.
La lejanía del orfanato y la falta de alternativas convertían sus confines en su única realidad.
El único sitio aparte de los grandes campos era un pequeño río de donde podíamos sacar agua limpia. También existían unas cabañas donde en una dormían las niñas y en otra los niños.
Contaba con algunos corrales para el ganado, de donde sacaban algunos alimentos. También teníamos dos profesoras, una cocinera y una señorita que se encargaba de los más pequeños, como los bebés. Todos ellos se encargaban de un aproximado de veinte niños.
Nunca llegaron a ser abusivos con nosotros, tal vez porque sabían que solo éramos unos pequeños niños que podíamos cometer errores.
Recuerdo que en ese ambiente tranquilo conocí a un niño que se volvió mi mejor amigo. Su nombre era Tau, que significa león, un nombre que iba de acuerdo con su personalidad.
Bajo la luz del día, Tau parecía resplandecer con sus ojos verdes y cabello castaño. Todas esas características, junto con su piel blanca, podrían hacerlo pasar por el hijo de un noble.
Desde pequeño, él era muy animado y siempre destacaba por ser un tanto inquieto. Sin embargo, yo lo admiraba por lo valiente que lograba ser.
Por mi parte, siempre fui tranquilo, con el sueño de convertirme en un gran escritor y disfrutar de una vida apacible. Lamentablemente, obtuve todo lo contrario.
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Sublevación del Mal - Abismo I
FantasyUn niño de tan solo doce años, tiene que afrontar un camino difícil en su vida y ahora empieza a caminar hacia un abismo del cual trata de salir ¿Será capaz de salir del abismo en el que se encuentra? #ReinoEH2023