No soy un héroe de fantasía

Capitulo 12: Tercer Piso

–Solo dos niveles, esa fue la experiencia que me entrego este sucio gusano –Julio pateo el cuerpo sin vida del gusano varias veces –no solo mi vida estuvo en riesgo, sino que además solo obtuve dos niveles de experiencia aun cuando teníamos cuarenta niveles de diferencia.

Julio restregó su mano en su cara, desde que había sido invocado había pasado por un torbellino de emociones, poco a poco el mismo se da cuenta que su estado psicológico pende de un hilo, ya sea por el peso de estar solo, el sol durante todo el día en el desierto o el peligro de las misiones en cada piso de la mazmorra.

–Sigh... –con dolor en varios sectores de su cuerpo, Julio dejo atrás el cuerpo del gusano, no sin antes quitarle el colmillo más pequeño como símbolo de victoria.

–Algo de aquí debe ser útil para los siguientes pisos –reviso la pila de cadáveres en la sala, las pertenencias de los muertos aún estaban allí, mucho ya era inútil y del resto que seguía siendo útil solo podía tomar lo que podría llevar en su cuerpo, además de lo que podría cargar en la mochila, no tenía idea de que tipo de peligros podrían asechar en los siguientes pisos por lo tanto solo podía avanzar con cuidado.

La armadura en el cuerpo de Julio había vuelto a cambiar, esta vez solo tenía hombreras y rodilleras para protegerse, un escudo en la mano izquierda y una espada larga en la mano derecha, un arco dañado y un par de flechas apenas útiles.

–tercer piso, aquí voy –el joven héroe comenzó a descender por la escalera a paso firme, tenía que desafiar el tercer piso si quería salir de la mazmorra.

Otra vez las paredes cambiaron a medida que bajaba los peldaños, ahora las paredes parecían estar hechas de piedras de rio con moho por varios sectores como si estuviera llegando a la selva.

–humedad –murmuro Julio tocando su brazo, la temperatura se mantenía, pero el ambiente era húmedo a comparación al segundo piso, aun cuando no había entrado en el tercer piso de manera oficial, Julio mantenía la guardia alta, sin dejar pasar ningún detalle a su alrededor.

Los pasos del joven eran cada vez más lentos, pesados pero lentos, firmes, pero al mismo tiempo sin el equilibrio adecuado, cualquier espadachín experto se habría dado cuenta de esto.

Al llegar a la tercera planta vio un escenario completamente nuevo, solo había un puente que conectaba la entrada del tercer piso a la salida del mismo piso, en el centro había una plataforma circular de un radio aproximado a quince metros. Es decir que desde la entrada a la salida había entre cincuenta y sesenta metros.

–¿una batalla? –dudo Julio, miro a los alrededores, desde las paredes salían gruesas raíces y del borde del pasaje que conecta la entrada a la salida, se podía ver un inmenso vacío, es decir que aquel que caía desde el borde entonces estaba condenado a la muerte.

El abismo en los bordes no era lo único interesante en este tercer piso, al mirar hacia arriba se podía ver el inmenso árbol conectado a las raíces de las paredes, además aquel árbol tenía varios frutos, inconscientemente Julio dejo salir saliva desde su boca, racionar la comida que tenía realmente lo estaba asesinando de forma lenta.

Sacudió su cabeza varias veces para entrar en razón, si había algún tipo de batalla entonces lo mejor era estar preparado, no tener la mente en ningún otro tipo de actividades solo en aquello que era importante en este momento.

[Bienvenido al piso 03]

[Cruza hasta el otro lado]

[Suerte aspirante y que tu corazón sea suficientemente fuerte]

–Bien solo tengo que cruzar hasta el otro lado, una condición bastante admirable, ahora ¿cuán seguro es este recorrido?

Julio camino hacia el frente, tenía que pasar el puente, pero teniendo en cuenta los pisos anteriores era obvio que no será fácil, había que mantener todos los sentidos listos para la acción en cualquier lugar.

Desde el comienzo había tenido su vista enfocada en la salida, para cuando estaba cerca de la mitad del trayecto pudo notar que había otra persona en el lugar, levanto la guardia inmediatamente, se acercó lentamente sin quitar su atención del individuo en cuestión.

Era la primera persona que veía en días, Julio podría haber estado feliz en otro tipo de circunstancias, pero ahora está en una mazmorra bastante peligrosa, si había una persona en el lugar entonces no tenía que ser normal.

Aun cuando Julio estaba a pocos metros de la persona esta no hacia ningún tipo de movimiento, apenas respiraba y siempre estaba mirando hacia arriba, las ropas eran de colores grises por eso Julio no lo había visto desde el comienzo, pero su piel estaba seca y arrugada, era un anciano.

–Oye anciano –llamo Julio bajando su arma, el anciano tenía los ojos de color blanco, se acero rápidamente pero el anciano no reaccionaba en absoluto, estaba de pie sin hacer nada –¿puedes oírme anciano? –incluso agitando la mano frente a los ojos no tenía resultado.

–es como si estuviera en un estado de coma, apenas se mantiene vivo, pero no tiene conciencia –Julio saco su espada nuevamente y miro a todos lados –algo sucede en este piso, no es normal.

No había nada en los alrededores, en todo el lugar solo estaba el anciano y el.

Ayudar al anciano parecía ser inútil, no tenía idea de que sucedía o como había sucedido, no tenía tiempo que perder, aún tenía que salir de la mazmorra y encontrar una manera de volver a casa, su abuelo estaba esperándolo, pero no sería por siempre.

Fue mientras avanzaba en su camino que otro objeto apareció en su camino, una de las frutas que estaban en la parte superior de la sala había descendido junto a la rama del árbol.

–un evento bastante conveniente –se burló suavemente para luego pasar a un lado de la fruta –el puente, la falta de monstruos, el árbol, el anciano y la fruta, demasiadas cosas en el mismo lugar, puede que sea joven pero no soy idiota, aun puedo saber cuándo no recibir un caramelo de un extraño.

Julio siguió su camino sin detenerse, la salida estaba a solo unos metros, volvió a levantar su guardia era extraño que no hubieran monstruos, pero no había mucho que hacer, camino hacia la salida y entonces.

[Completaste la misión]

[Atravesaste el puente con éxito]