No soy un héroe de fantasía

Capitulo 19: Cuarto piso

–ha... ha... ha... –los jadeos constantes venían desde una sola personas, aquel joven en el puente no era otro que Julio Mathers, aquel que había eliminado a todos los duendes del tercer piso y ahora era coronado como rey duende.

Los pasos de Julio eran flojos pero firmes, camino hasta donde estaba el cadáver de pie –Tu caíste en la ilusión y nunca lograste salir, lamentable –desenvaino su espada –te entregare descanso desconocido –aquellas fueron las últimas palabras para el cadáver antes de pie que ahora yacía en el suelo sin vida.

–Maldita diosa –gruño molesto el joven dejando caer su cuerpo en el suelo, solo recordar a la diosa que lo invoco en este mundo le provocaba un cambio de humor capaz de hacerle explotar de ira.

Fueron algunos minutos de descanso y se levantó una vez más para descender hasta el cuarto y último piso de la mazmorra, en este punto Julio no quería ver un laberinto esperándolo como en la ilusión, si fuera de este modo entonces simplemente se quedaría más tiempo decidiendo lo que debería hacer.

[Ingresaste al piso 04]

–Muy bien, veamos de que se trata todo esto –Miro a sus alrededores no había nada especial, la verdad esta vez no había nada de nada.

–Al menos la ilusión tenía un laberinto como las películas de la televisión, pero esto es simplemente... nada –mientras Julio se quejaba dio un paso en el interior de la sala y entonces sintió como su cuerpo se hacía más pesado, al dar el segundo paso sintió como su cuerpo era oprimido contra el suelo con más fuerza que antes –¿Qué?

Solo eran dos pasos, pero ya podía sentir como si estuviera levantando pesas en cada mano, la salida del piso en este momento se veía tan cerca pero tan lejos al mismo tiempo.

«Quizás la respuesta sea utilizar la menor cantidad posible de pasos para cruzar la sala»

En la mente de Julio se formuló el plan adecuado, su atención se enfocó en la salida, preparo su cuerpo listo para saltar, era claro que su fuerza había aumentado, sus estadísticas no podían mentir mucho menos cuando el mismo presencio el efecto de esto.

«uno, dos, ¡tres!»

Julio se impulso hacia adelante usando toda su fuerza, pero al mismo tiempo que avanzaba en el aire podía sentir el peso en su cuerpo y antes de darse cuenta toco el suelo a toda velocidad como una rata en una trampa.

–¡Ugh!

Los quejidos de Julio llenaban la sala, en vano utilizaba toda su fuerza para romper el campo de gravedad que lo tenia preso contra el suelo.

«Realmente debería haberme quedado en la ilusión» en la mente de julio las escenas de la ilusión aun estaban frescas, pero al mismo tiempo existían los recuerdos del momento en el que apareció en el desierto, la expresión de su cara cambio inmediatamente y con una mueca de desagrado en su mente dijo «maldita diosa, ella es la culpable de todo esto»

[Puntos 112 -> 100]

[Fuerza 83 -> 95]

Para avanzar en aquella habitación utilizo algunos puntos para aumentar la fuerza de su cuerpo, lentamente comenzó a levantarse, ser podía incluso escuchar el rechinar de sus articulaciones, pero ni con eso podrían detenerlo.

–Coraza del rey duende –menciono en voz alta e inmediatamente desde el cuerpo de Julio se podía ver el aura color verde que le cubría cada una de sus partes.

–No... hay manera... en la que me rinda –incluso el hecho de mover la boca ya era un gran desafío, pero no seria impedimento para seguir adelante.

Por cada paso el peso seguía aumentando y cuando había dado diez pasos desde la última caída la resistencia del propio piso había cedido, los pies de Julio se clavaron en el suelo y por cada paso había otro agujero en el suelo.

[Fuerza 95 -> 100]

[Alcanzaste el límite de estadística fuerza para tu nivel]

«¿limite, enserio? Podrías haberlo mencionado antes de entrar en este piso, quizás una advertencia habría ayudado»

Aquellos cinco puntos solo le sirvieron a Julio para avanzar otros tres pasos cuando noto que desde su pierna izquierda salió el ruido de un vidrio roto.

–¡AGH! –fue un grito ahogado ya que incluso si lo quería abrir la boca le era imposible.

«mierda, mierda, mierda mierda mierda»

Dio un par de parpadeos, lucho moverse, pero era la primera vez a lo largo de toda su vida que se rompía un hueso de esa manera.

Al momento de moverse perdió el equilibrio y cayó hacia atrás, incluso con la resistencia al dolor el shock emocional era una historia diferente.

–Eres un bebe llorón

En los oídos de Julio apareció una voz extraña, una voz que nunca había escuchado antes, en particular no debería haber ninguna voz en ese lugar y mucho menos una chillona.

Julio lucho firmemente hasta cuando su mandíbula se movió una vez más.

–Genial, ahora escucho voces

lucho por llevar sus manos hasta su cabeza, pero simplemente era imposible, en ese momento estaba tirado en el suelo con una pierna rota y sintiendo el peso del mundo sobre su cuerpo.

–no, no estas escuchando voces idiota

Julio parpadeo varias veces, al escuchar la voz extraña una vez más en su oído.

–es una broma ¿verdad?

Pregunto el joven sin lograr comprender lo que estaba pasando, seguía escuchando la voz, pero no había nadie cerca, por mas que observara los alrededores.

–En la pared izquierda, en el centro de la pared, soy un poco más pequeña que tú, pero deberías poder verme.

Siguiendo la voz Julio puso su atención en la dirección indicada, forzó sus propios ojos para enfocar lo que parecía ser una pequeña celda enterrada en la muralla con una pequeña persona dentro.

–genial, un duende parlante