Secuestro y Obsesión (VegasChay)

Celos

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Cuando los labios de Vegas tocan los de Porchay, el beso es devuelto, Chay envuelve sus brazos alrededor del cuello de Vegas manteniéndolo cerca. Es intenso y cariñoso, el mayor tenía miedo de asustar al menor, que el otro se alejara, tenía miedo de separarse, trataba de contener sus propias manos.

Estoy besando a Vegas
Joder ¿qué quieres decir con que estoy besando a Vegas?
Me secuestró, mató a un tipo delante de mí. Porsche me matará
Kim
Jesús ¿qué hago?

Finalmente la mano de Vegas va a la nuca de Porchay, lo que desestabiliza sus dudas, ese beso era una droga y ambos eran adictos, no podían parar. Es emocionante para Vegas ver cómo Chay chupa su labio durante el beso, mientras lo mira a los ojos, el hombre suspira al verlo.

¿Qué me está haciendo este chico? ¿Por qué me siento de esta manera?

Vegas intenta controlarse y actuar como lo hace con todos los demás, por lo que sujeta fuertemente el cabello de Porchay, en cuanto hace eso y se aparta un poco para observar la reacción, se arrepiente. Porchay tiene los ojos cerrados con los labios entreabiertos en un O que suelta un gemido, la escena es excitante, demasiado excitante. Jala a Chay por la cintura y lo pone en su regazo, con las piernas del más joven alrededor de su cintura y se levanta así que lo acuesta en otro sofá, fuera de la visión de la oveja, pero en este momento Vegas ni siquiera recuerda la camera, el box, de Kim, está centrado en ese momento, en esa persona.

– Vegas… – Chay suspira y por un momento se recompone, llevándose la mano a la cara impactado consigo mismo – Eeehhh… Creo que mejor me voy a mi habitación – Porchay está sin aliento, se levanta y toma la caja y la guitarra.

- Buenas noches, Porchay – dice Vegas sin aliento a la espalda del chico que corría por el pasillo.

Porchay estaba nervioso, se sentía culpable, a pesar de que Kim y él no habían hecho nada oficial, sentía que lo estaba engañando, incluso si lo que sentía por Vegas no era amor real, incluso si solo era algo pasajero. , será mejor que aclare sus sentimientos y termine esa relación como es debido. Salió de la habitación, tomó la guitarra y la caja y la dejó en el armario.

La casa estaba en silencio, pero ninguno de los dos residentes dormía, estaban mirando el techo del dormitorio. Vegas pensó en una manera de robar la atención de Porchay de una vez por todas, consideró cómo el chico se había escapado de él y definitivamente era culpa de Kim.

...

Por la mañana, Porchay ya estaba despierto cuando Vegas salió de su habitación, los dos se encontraron en la cocina, el mayor estaba irritado y por eso evitaba la mirada del otro y el menor estaba avergonzado por el beso de anoche y con miedo de vuelva a suceder antes de que aclare las cosas con Kim. Off notó el ambiente incómodo entre los dos, sirvió el desayuno que como siempre fue decidido por Vegas.

- ¿Vegas? - lo llamó Porchay cuando el hombre se levantó para dejar su plato en el fregadero.

- Hm - Vegas solo indicó que estaba escuchando, no dejó de caminar y ni siquiera volteó a mirar al más joven.

- ¿Me puedes hacer un favor? - pregunta Porchay.

- ¿Claro porque no? Me encanta hacer favores - dice Vegas irónico, poniendo los ojos en blanco y dedicándose a lavar los platos para no tener que darse la vuelta y encarar al menor.

- Necesito hablar con Kim, algo a solas hoy - pide Porchay, Vegas no se da la vuelta - Digo solo porque sé que necesitarás escucharlo, y hasta lo prefiero.

¿Este mocoso realmente quiere que mire y escuche a los dos juntos? ¿Quiere ponerme celoso o frotarme su relación en la cara?

- ¿Sólo eso? Bien ¿algo más que su majestad quiera? - Vegas se burla.

- Tal vez helado - bromea Porchay.

Vegas gira la cabeza y mira a Porchay con el rabillo del ojo, respira hondo y trata de contener los celos. Planeaba robarle a Porchay, por lo que necesitaba que el chico quisiera estar con él y no tenerle miedo por otro brote frente a él. Pero solo la mirada hizo que Chay se congelara en su lugar.

– Es broma – se rió nerviosamente.

- Hm...

Básicamente, Porchay se escapó de la cocina, se fue a esconder a su habitación donde se quedó hasta que escuchó que Vegas se iba de la casa, incluso había olvidado lo aterrador que era ese hombre. ¿Terriblemente hermoso y sexy? Sí, pero también aterradoramente amenazante.

Vegas se dirige hacia la casa de la familia principal como todas las mañanas, cuando vio a Kim con una mirada fría en la puerta de la casa, ya imaginó lo que vendría. Se bajo del auto y vio como Kim se acercaba casi marchando hacia él y dio un primer golpe, era lo que Vegas necesitaba para perder el control, golpeó a Kim y los guardias intentaron separarlos.

- ¿Qué coño está pasando aquí? - esa era la voz de Kinn que salía del ascensor después de que Big corriera a advertirle de la pelea que se estaba dando afuera.

Incluso con los guardias de seguridad sosteniéndolos, los dos continuaron forcejeando y golpeando a los guardias para alcanzar al otro, impulsados ​​por los celos.

– Ese hermano de mierda tuyo me golpeó – respondió Vegas, los dos dejaron de luchar cuando Kinn intervino.

- ¿Kim? – Kinn miró a su propio hermano buscando alguna explicación a todo eso.

- Vamos Kim, explica qué pasó para que te enojaras, pero empieza desde el principio, desde el evento en tu antigua escuela – lo retó Vegas, los dos se enfrentaron con odio.

– Eso no es asunto tuyo, Kinn, déjanos resolverlo – murmuró Kim, dirigiéndose hacia el ascensor de donde venieron Kinn, Porsche y Khun.

Kinn mira confundido a los dos que tenían algunos moretones en la cara por los golpes intercambiados, pero sabía que no obtendría información tan fácilmente de ninguno de los dos. Le dio la espalda a Vegas y se dirigió al ascensor con sus hermanos y su novio, Vegas tomó el otro ascensor disponible. Vegas tocó su labio sangrante y sonrió, Kim realmente se puso celoso y Porchay cedió a su beso, todo iba perfecto para que realmente pudiera obtener lo que ahora decidió que era suyo, Chay.

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