El chico de los ojos verdes (Ash×Gladion) (FINALIZADA)

Leyendas de Alola

Días después

Ash y Gladion estaban en la casa del profesor Kukui, viendo una película junto a sus pokémon (que más que verla estaban jugando entre ellos)
La película era de miedo (elegida por Gladion), por lo que, entrenadores y pokémon saltaban del susto de vez en cuando principalmente Ash, que abrazaba con fuerza a Pikachu al no estar acostumbrado a películas de ese tipo, pero llego una parte en que se mostraba un pokemon legendario, más precisamente Ho-Oh que venía en ayuda de los protagonista y Ash parecía increíblemente interesado en el gran pokemon, mirándolo con atento analizando todo en él, Gladion se percató pronto, principalmente por el hecho de que Ash estaba increíblemente quieto a pesar de screamer que acababa de saltar en la pantalla.
Gladion: Oye Ash, ¿te gustan los pokemon legendarios?
Ash: ¿Uh? ¡si! ¡Y mucho! Como he viajado por muchos lugares, he aprendido bastante sobre ellos, incluso estado cerca de algunos y eso en parte, tambien es la razón de porqué tengo un gran aguante al dolor.
Gladion: ¿Que? ¿Que tiene que ver eso?
Ash: Un pokemon legendario no te dejará que te acerques si no eres digno de eso. Tienes que demostrar con fuerza y valentía que eres digno de estar en su presencia, lo que es bastante difícil, considerando la cantidad de leyendas en las que han participado.
Gladion: ¿Leyendas?
Ash: eso es lo hace a un legendario, un Pokémon legendarios, las historias de sus obras y aventuras, que se pasan de generación en generación, son muy importantes.
Gladion: ¿Y sabes alguna?
Ash: ¡claro! ¿Quieres escuchar una?
Gladion: está bien.
Ash: Hay una leyenda, una de mis favoritas, es sobre los 5 jóvenes entrenadores, ellos lograron cambiar al mundo. Se dice que cuando solo eran jóvenes humanos, evitaron una pelea entre los cinco pokémon legendarios más poderosos de el mundo, pero salieron heridos, en recompensa por su valentía, les concedieron habilidades únicas a cada uno de ellos. Recibiendo el nombre de"entrenadores Legendarios" No se saben sus nombres, pero si los tipos de Pokémon que entrenaban, según muchos eran:
Un entrenador de tipo Fuego, valiente y temerario, su habilidad le permitía quemar hasta las cenizas cualquier cosa que deseara
Un entrenador tipo Agua, puro y poderoso, podía controlar las corrientes y llamar pokémon a través de esta.
Una entrenadora tipo Planta, pacifica y agradable.
Un entrenador tipo Eléctrico, con la fuerza de un rayo y la energía de un trueno.
Y él último... El que inicio todo, de este no hay mucha información pero se dice que es el más poderoso, el que encaró a los Legendarios para demostrarles que lo que hacían estaba mal. Se dice que no tiene un tipo exacto a diferencia de su grupo, pero es también el más pacifico, demostraba su fuerza con valentía y perseverancia, y su principal cualidad, era unir a las personas por un bien mayor.
Por separado eran poderosos pero cuando estaban juntos peleando como uno, podían derrotar al mismísimo Arceus.
Se suponía que los entrenadores legendarios vivían mucho, y era así, pero igualmente en algún punto, ellos morían, eran humanos después de todo, así que, todos tenían la habilidad de elegir un sucesor, que seguía seguía su legado, y conservaba las memorias de sus predecesores, eran asombrosos, hasta que un día, el entrenador de fuego Silver, un chico avaricioso y presumido, que aparte era apenas mayor que nosotros, traicionó a los otros 4 entrenadores, atacandolos y intentando entregarlos a su enemigo, y prácticamente sin querer, por no medir su habilidad, acabo matando a tres de los entrenadores legendarios, solo uno se salvó, se dice que el entrenador tipo múltiple, ya que este derrotó a Silver dejándolo vivir, pero Silver hizo algo terrible he imperdonable, le llaman  "La condena  de Silver" y eso fue lo peor de todo: "Condeno a este mundo al odio y la maldad tanto a humanos como a pokemon, que cada uno persona con esperanza, caiga por sus propios sueños, y te condenó a ti entrenador múltiple, a que tus desentiendes siempre mueran jóvenes" dijo Silver, antes de desaparecer sin dejar rastro, desde entonces, ni hay registro de entrenadores Legendarios, o si el entrenador de tipo múltiple sobrevivió... pero dicen que siguen existiendo solo que ya no se muestran, para proteger a la gente de la esperanza, que trae la peligrosa maldición de Silver.
Gladion: wow, eso es... Increíble Ash, la historia suena, simplemente impresionante,  no sabía que te gustaba tanto la mitología como para recordar todo eso
Ash: me gusta mucho, quiero llegar saber todo lo posible de ellos y saber si siguen aquí.
Gladion: ¿Y que pasó con la maldición de Silver?
Ash: no se sabe la verdad, algunos dicen que no pasó nada con eso y otros que la maldición sigue vigente, pero nadie sabe en realidad que pasó con Silver.
Volvieron a recostarse en el sillón, notando que ya pasaban los créditos, ¿Habían estado hablando tanto rato? Vaya, si que el tiempo vuela cuando te diviertes, Gladion se levantó y llevó las cosas que comieron a la cocina, mientras Ash organizaba el sillón y sus pokémon dormían tranquilamente. Pronto llegó el profesor Kukui con la cena, comiendo tranquilamente mientras Ash relataba otra leyenda con la gran interpretación de sus pokémon, pronto el cielo se volvió naranja, Ash salió a la playa, siendo seguido por Gladion, que le daba curiosidad el porqué saldría Ash a esa hora. El pelinegro se sentó tranquilamente en la arena, con el agua casi tocándole los pies, mientras admiraba el atardecer, en la compañía de Pikachu y Litten, que estaba sentado en su regazo. Gladion se quedó a su lado, mirando con él como el sol se escondía detrás del horizonte y el cielo se tornaba azul intenso, dejando ver las mil y una estrellas de las noches de Alola.
Ash: ¿No te parece hermoso?
Gladion: totalmente
Ash: siempre trato de ver el anochecer, en mi hogar no hay tantas estrellas como aquí. ¿Alguna vez has estado en pueblo Paleta?
Gladion: no la verdad, ¿como es?
Ash: es bastante pequeño, pero muy tranquilo, todos en el pueblo se conocen y recibimos bastantes visitas por el laboratorio del profesor Oak. Tal vez algún día podamos ir, te enseñaría todo lo maravilloso que hay allá.
Gladion: me encantaría, tal vez pase algún día.
Ash: ¡Eso espero!
Gladion y Ash se levantaron, y volvieron a la casa, ya era tarde y Ash tenía escuela al día siguiente, se estaban preparando para dormir, cuando se dieron cuenta de que todos sus pokemon se habían dormido en el sillón-cama en el que se turnaban para dormir, a pesar de la incomodidad de dormir en el suelo, no querían moverlos, se veían demasiado cómodos.
Ash: emm... Gladion, ¿en donde se supone que vamos a dormir? Es que, no quiero que se muevan o despertarlos
Gladion: al parecer, supongo que a ambos nos toca dormir en el suelo.
Ash: bien, voy por un saco más para mi.
Gladion: yo arreglaré aquí. Para que no pasemos frío.
Cubrieron el suelo con unos cuantos cobertores y mientras Ash ponía su saco. Ya acostados, Pikachu y Umbreon se acostaron a sus costados, al parecer las mañas de sus pokémon no se les quitaban incluso si podían dormir en un lugar más cómodo, pronto los Pokémon estuvieron dormidos pero...
Gladion: ¿Ash?
Ash: ¿Gladion? ¿Que pasa?
Gladion: puede sonar tonto, pero... ¿me podrías contar otra leyenda? Se que es algo tarde...-
Ash: ¡claro! ¿Cual te gustaría oír?
Gladion: no lo sé, no conozco muchas leyendas, cuéntame la que a ti más te guste.
Ash: veamos... Mi leyenda favorita trata de el cielo nocturno, ¿Te gustaría escuchar esa?
Gladion: me parece bien.
Ash: esta leyenda es de acá en Alola, si no me equivoco, me la contaban para dormir así que no recuerdo absolutamente todo, pero según recuerdo, se trata de que cuando Arceus creó este universo, cada legendario que creó recibió su propia misión, Arceus encomendó llenar el cielo de luz a Solgaleo y Lunala, pero a pesar de su fuerza e intentos, su poder no era suficiente para llenar todo el mundo, así qué, surgió un pokemon sin nombre, al que los humanos llamaron: "El Refulgente" que brillaba por energía propia, al ver el esfuerzo que hacían para llenar el cielo de luz, este ser dió tanto de su poder, que se quedo sin nada, cayendo en un muy profundo sueño, viendo su sacrificio, los pokémon, humanos y legendarios, profundamente agradecidos por su ayuda, decidieron que todos ellos compartirian su energía para ayudar a volver a resurgir al Refulgente. Este se elevó en el cielo y volvió de su sueño, volviendo a entregar su luz y así la paz volvió a Alola una vez más
Gladion: esa leyenda... mi madre solía contarme una historia similar, pero... tú versión es más completa, muestra ese final que faltaba porque nunca nos contó que pasó con el Refulgente, es bastante más creíble, pensar en qué la gente va a agradecer tan enorme sacrificio.
Ash: si, lo es, era una historia que me contaba mi hermano mayor antes de dormir... Era muy pequeño en ese entonces, así que no recuerdo todo, había otra cosa que me contó pero- Ya no importa, bien, es tarde así que, buenas noches Gladion.
Gladion : está bien... descansa Ash
La noche pasa rápido, cuando la luna estaba en su punto más alto y ambos estaban dormidos, el frío de la noche les paso la cuenta y la confianza que le tenían al otro ayudó un poco, se acercaron lentamente el uno al otro, buscando el calor del otro, al final durmiendo juntos y abrazados.

A la mañana siguiente

Rotom dex empezó a sonar muy temprano, con la intención de despertar a Ash, pero notando la posición de Ash y Gladion, considero descortés despertarlo como siempre (porque el atactrueno los despertaría a a ambos) pero para su sorpresa, Gladion despertó poco después que él, a pesar de que él no tenía clases. Pero lo que más les llamaba la atención, era la posición en la que dormían

Narra Gladion
(Ash es el de la derecha y Gladion el de la izquierda, solo que tiene una mano en la cintura de Ash para no se mueva) Agh... ¿Que hora es?
Me pesa el pecho... ¿A-ash? ¿¡Por Arceus porque estamos así?! ¿Fue durante la noche? ¿Oh Arceus que hago? "¡Que bueno que despiertas!" Rotom dex nos miraba desde arriba con una enorme sonrisa, sentí que mis mejillas se ponían calientes al instante. "Estaba por despertar a Ash, pero me daba algo de cosa despertarte como lo hacemos con Ash" ¿Despertarlo como Ash? "¿A que te refieres?" Pregunté por la extraña razón para no querer despertarme "Es que Ash aveces duerme tan profundo que llegamos al extremo de despertarlo con un atactrueno de Pikachu" ¿¡Atactrueno?! Si, menos mal que no quiso despertarme así, iba a moverse cuando noté donde estaba mi brazo izquierdo. Arceus, seguramente mi cara estaba totalmente roja en ese momento, deslice mi brazo con cuidado y me incorporé en el suelo. Miré a Ash unos segundos, ¿era absolutamente necesario despertarlo con un atactrueno? Lo sacudí con cuidado y suavemente "Ash, despierta, o llegarás tarde a clases" fue lo único que se me ocurrió decir, abrió los ojos ligeramente, sentándose en el suelo y restregandose los ojos. "Umm... ¿Que hora es?" preguntó somnoliento, había sido realmente fácil despertarlo, me pareció bastante sorprendente, pero al parecer no era el único sorprendido. "¿¡P-pero como?! ¡Llevo meses despertando a Ash y nunca había sido tan fácil!" Rotom dex parecía muy extrañado Ash lo miro aún más confundido,  y volteó a verme para entender a qué se refería, yo solo me encogí de hombros, tampoco le había entendido. "Bien Ash, te queda una hora para ir a la escuela, tiempo ideal para un desayuno nutritivo y balanceado " El Pokémon rojo sin dudas tenía todo cronometrado, Ash se estiró un poco y se levantó aún medio dormido, literalmente, chocando con la puerta del baño ¿Como había bajado las escaleras sin caerse? Ni idea, volteé a ver a Rotom dex con la intención de explicar la incómoda posición en las que nos encontró, pero el anticipándose me dio una señal para que gustará silencio y diciéndome que guardaría el secreto, vaya que lo sabe todo, al poco rato baje yo también, el profesor Kukui ya estaba despierto preparando el desayuno, mirandome con interés, diablos, ¿Acaso seguía rojo? Pronto Ash llegó y nos sirvió el desayuno, como teníamos tiempo, lo acompañe en su camino a la escuela, él me comentaba cosas que había visto en su viaje y yo simplemente lo miraba, era bastante entretenido oírlo hablar con tanta emoción, que sin darme cuenta, estábamos en la entrada de la escuela Pokémon, ahí cada uno tomó su camino, yo a entrenar y Ash a estudiar.

Una tierna imagen, dos leyendas, un secreto develado y más aventuras para nuestros héroes, ¡Todo esto mientras el viaje continua!

¡Está historia continuará!