ESO ES AMOR

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—(Harleen) Las cosas no salieron como esperábamos, la próxima vez...— La chica de cabello rubio no pudo terminar de hablar pues recibió un golpe que la dejó en el suelo sangrando de la nariz mientras se escuchaba una risa que más que transmitir felicidad, transmitía desesperación y miedo.

— La próxima vez… repetir todo una y otra vez, ¡Que divertido! —. Harleen estaba a punto de pararse cuando empezó a ser pateada en su abdomen con una gran ira, terminó por escupir un pequeño chorro de sangre, pero solo para después recibir puñetazos en su rostro y demas cuerpo, ella trataba de cubrirse poniendo sus antebrazos frente a ella al mismo tiempo que se sacudía, pero aquel hombre se puso encima de de ella, atacando con más fuerza, sin descanso, todo mientras no dejaba de reírse — No habría próxima vez si hubieras hecho bien tu trabajo… ahora necesito pensar en una nueva broma, descansa cariño—. El hombre se marchó del lugar sin voltear a ver a la chica quien aún continuaba en el suelo.

Después de tantos años, creería que su cuerpo ya soportaría el dolor, que formaría una capa de piedra, pero no era así; como muchas otras veces, estaba sola, luchando por respirar, tirada en el suelo de un frío almacén abandono mientras brotaba sangre de cuerpo, heridas que no habían sido causadas por alguno de los vigilantes de Gotham, sino por la persona que amaba, se quedó en posición fetal por varios minutos, no tenía fuerzas para levantarse y muy en el fondo no quería hacerlo, cerró los ojos deseando que no los volviera a abrir, en su cuerpo había varios moretones y cicatrices, en sus brazos tenía varias marcas de inyecciones, en sus muñecas había hematomas por todas la veces que fue sujetada y arrastrada contra su voluntad, no era feliz, después de todo lo que le habían hecho, se sentía como un simple saco de carne que no valía nada, pero por alguna razón, sin importar cuantas veces lo intentara, sin importar todas la noches que lloraba, todas sus lesiones, el hambre, la promesas, siempre volvía a él.

"Ya deja de ser tan patética, solo toma un arma y vuelate la cabeza", —(Harley) Callate—. Ya no sabía si se trataba de su mente, el dolor o el cansancio, algunas podía escucharse a sí misma en su mente, pero no se trataban de sus pensamientos, era un ser distinto que hablaba como ella, incluso salía de su cabeza y la podía ver, siempre vestida con su traje de Harley Quinn, —Tienes razón, ni eso puedes hacer, te mereces lo que te hace, eso te hará fuerte, awww, en verdad te ama—.

—(Harley) Claro que no, él… él—.

— Te ama y tú a él, suerte que tuviste, quién hubiera pensado que se fiaría en una inútil como tú—.

—(Harley) ¡Cállate!—. En un acto de desesperación, golpeó su cabeza contra el suelo para que aquella voz desapareciera de su cabeza, acto que hizo hasta que terminó perdiendo la conciencia.

Poco a poco sus ojos se abrieron de nuevo, todo estaba en completo silencio, sentía que solo pasaron unos cuantos segundos, pero al parecer fueron horas, la sangre en el suelo y su rostro estaba seca, las oscuridad llenaba aquel almacén siendo el frío la única compañía que tenía, pasaron los minutos y ella siguió sin moverse, poco a poco las lágrimas empezaron a salir mientras varios pensamientos negativos llenaban su cabeza, quería volver atrás, saber en donde falló, evitar su situación actual.

Sin que sus emociones estuvieran niveladas, se puso de pié, con algo de trabajo empezó a caminar hacia la salida, la noche se veía reducida por la gran cantidad de luces de la ciudad, el silencio era asesinado por el repentino sonar de la patrullas a lo lejos y la lluvia se hacía presente, un día tranquilo en Gotham. Camino como si estuviera ebria, a causa de los golpes contra el suelo que ella misma realizó, se dirigió a un charco de agua sucia, lentamente se agachó para recoger un poco de agua con sus manos, poco a poco; una vez hecho, miró por un tiempo aquella pequeña de fuente de agua que ahora le servía como espejo.

COMO EN LOS VIEJOS TIEMPOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora