𝐋𝐎𝐓𝐓𝐔𝐒 𝐅𝐋𝐎𝐖𝐄𝐑 | 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓𝐒𝐓𝐎𝐏𝐏𝐄𝐑

5 - Constellations

Pequeños vidrios rotos, botellas de cervezas vacías regadas por el piso y adolescentes liberando sus agresivos instintos contra vehículos inanimados abandonados, eran parte del ambiente en el que Nick y Charlie, se encontraban.

Y mientras el pelinegro destrozaba lo que alguna vez fue un auto, ellos solo se dedicaban a reír en una esquina del lugar, cuando el pelinegro se frustraba por qué alguna parte del automóvil no se desprendía de su lugar.

Estando así por varios minutos hasta que uno de los 5 cadetes que se encontraban ahí, más conocido como David, tomo uno de los tantos bates que tenían y se acercó a ellos.

- Ahora es turno de los niños. - indico extendiendo el mango del bate en la dirección de los dos.

- Ammm... - soltó algo indeciso Charlie ante la propuesta.

- Vamos, será divertido. - sonrió moviendo un poco el objeto.

- Yo lo haré. - soltó Nick tomando el objeto de aluminio.

- Veamos de que eres capaz prodigio del rugby. - soltó alentador el pelinegro apoyado en su más recién obra de arte destructiva.

Y después de esas palabras, el castaño se acercó a uno de los autos lanzando el primer golpe, que a decir verdad fue bastante flojo, provocando una reacción en el grupo, en su mayoría risas por la poca fuerza del golpe.

- Puedes hacerlo más fuerte que eso. - Dijo la única chica que se encontraba ahí, quien fue presentada por Lucas con el nombre de Laura. - Nadie se va a molestar porque lo rompas, vamos.

Y soltando un poco de aire, el castaño lanzo otro golpe provocando que la ventana del objeto se desprendiera, provocando una ola de adrenalina en su cuerpo, la cual le dió la energía para seguir rompiendo cada parte posible del vehículo.

Mientras que cerca de el, Lucas decidió acercarse al rizado, pasando sus brazos por los hombros de este.

- Estás sudado. - comento con una sonrisa al ver la camiseta del contrario, húmeda por su sudor.

- Si, eso suele pasar. - hablo sacandole una pequeña carcajada al rizado. - Se ve que lo disfruta. - dijo señalando a Nick quien se encontraba golpeando el auto con bastante energía.

- Pues sí. - comento sonriente.

- Tu pequeño novio tiene talento para esto. - comento buscando una reacción del rizado, la cual obtuvo rápidamente.

- El no es mi... Quiero decir, no somos... - soltó en un intento por aclarar la situación, aunque bueno, ni el entendía la situación que tenía con Nick, ni mucho menos con Lucas, ¿Acaso es posible ser amigo de una persona que te gusta y con la que ya te habías besado anteriormente?

Y mientras el rizado se comía la cabeza con esas preguntas, el castaño termino con su trabajo cansado y con el cabello húmedo por el sudor, acercándose al grupo, siendo felicitado con algunas palmadas en la espalda y palabras de ánimo.

- Ya que uno termino, ahora le toca al otro. - dijo David tomando el bate de las manos de Nick y dandole este a Charlie.

- ¿Yo? - soltó inseguro el rizado.

- Creo que el no podrá con un auto. - comento Laura. - Alguien que le traiga una bicicleta.

- En camino. - soltó el pelinegro, perdiéndose entre los vehículos, en busca de una bicicleta.

⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘⫘ׂׅ⫘ׂׅ⫘⫘ׂׅ⫘ׂׅ

- Debiste hacerlo más despacio. - dijo el pelinegro con una pequeña sonrisa, mientras mantenía una bolsa de hielo en el hombro del rizado, pues le había dado con tanta fuerza a la bicicleta que se lesionó el hombro, nada grave pero si que le había dolido.

- Ya se. - soltó algo frustrado consigo mismo.

- ¿De dónde sacaste el hielo de todos modos? - pregunto Nick confuso, pues de la nada había sacado esa bolsa de hielo, como si estuviera lista para esas situaciones.

- De la hielera. - dijo apuntando con su cabeza al objeto a un metro de distancia de ellos.

Pues ahora se encontraban en una zona del deshuesadero dónde no habían luces y se veían con más facilidad el cielo nocturno.

Zona en la que se encontraban pues todos los amigos de Lucas, se habían ido ya, con la excusa de que ya era tarde.

- ¿Entonces siempre traes bolsas de hielo aquí? - pregunto el rizado.

- Sip, son para mantener frías las cervezas. - dijo mientras se acercaba a la hielera luego de dejar la bolsa de hielo, en las manos del rizado. - ¿Gustan una? - invito luego de abrir la hielera.

- No creo que debamos tomar alcohol, somos menores de edad. - dijo Nick.

- Yo sigo siendo menor de edad y aún así he bebido. - dijo el pelinegro. - Vamos solo un trago. - a lo que el castaño tomo la botella influenciado por el pelinegro, dándole a esta un sorbo.

Y segundos después la estaba escupiendo a un lado, por su horrible sabor, sacándole una risa al pelinegro.

- Si, no es para todo el mundo. - dijo tomando el envase, bebiendo este. - subiendo a la parte de arriba de un auto, en dónde se encontraban Nick y Charlie, acomodándose entre ellos.

- El cielo es lindo. - dijo Charlie. - Se pueden ver todas las constelaciones.

- Yo nunca las aprendí. - confesó Nick.

- Esa es la osa mayor. - dijo confiado Lucas, apuntando a un grupo de estrellas cualquiera.

- De hecho ese es el cinturón de Orión. - aclaro mientras soltaba una suave risa.

- ¿Así que ahora eres un nerd de la astronomía? - pregunto sonriendo el pelinegro.

- No lo soy. - soltó ligeramente indignado.

- Sí que lo es. - atacó Nick. - Me obligó a ver un documental de 6 horas, sobre la composición de los cometas.

- ¡Tu dijiste que querías saber de qué estaban hechos! - le recordó.

- Pero yo me refería a los cereales cometa, no a los cometas de verdad. - soltó junto a una pequeña risa.

- Pues debiste haberlo dicho. - dijo sonriendo volteando su rostro para adelante.

- Eres inteligente, me gustan las personas inteligentes. - comento Lucas, ya algo afectado por el alcohol en sus venas.

- Gracias. - sonrió con un sonrojo empezando a formarse en sus mejillas.

Y lo siguiente que pasó no solo sorprendió a Charlie, sino tambien a Nick, pues el pelinegro, tenía sus labios en los del rizado.

Separándose de Charlie solo por la necesidad de hacer lo mismo con Nick, con quién no solo se quedó en un ligero pico, como con el rizado, sino que fue algo más intenso, apasionado y extrañamente reconfortante para los dos.

Siendo algunos segundos después que Lucas finalmente se separó del castaño.

- Yo... - soltó algo temeroso.

𝐍𝐨𝐭𝐚: 𝐌𝐞 𝐨𝐥𝐯𝐢𝐝𝐞 𝐪𝐮𝐞 𝐚𝐲𝐞𝐫 𝐞𝐫𝐚 𝐯𝐢𝐞𝐫𝐧𝐞𝐬, 𝐬𝐨𝐫𝐫𝐲!