—Lo hiciste bien, Kakarotto—comentó, tras ver a su amigo en su entrenamiento, donde consiguió ganar aquel combate improvisado que hizo con el otro chico bajito—. Sobre ese giro final que hiciste, antes de patear, nunca vi que hicieras algo así.
—¡El maestro Roshi me lo mostró hace unos días! —empuñó sus manos—. ¿Verdad que tiene técnicas muy buenas?
—Sí, sí, como digas—bebió de su botella de jugo, desviando la mirada, algo incómodo del entusiasmo del Son respecto a aquella persona. Sacó su celular, viendo que aquel último mensaje que envió al chico peliverde seguía sin ser visto—. Supongo que me evitará luego de la incomodidad de anoche... Es lo mejor.
—Milk en su competencia de esta mañana estuvo increíble—comentó, sentándose a su lado—. Y a las nueve nos fuimos a desayunar al restaurante de su familia. ¡La comida es deliciosa! —lo miró—. De hecho, Milk dijo que siempre tienen mucha gente en el restaurante, pero que si algún día vas tú con Granola les puede conseguir una mesa.
—¿No le has dicho que él y yo nos conocimos hace menos de un mes?
—Jeje, no—se apoyó en su hombro—. Pero estaría genial que fueran juntos. De verdad tienen comida muy deliciosa.
—Lo tomaré en cuenta—subió su mano a su cabello, el cual sintió un poco húmedo por el sudor—. Necesitas una ducha. En serio apestas.
—Sí, sí... —se levantó y se colgó la mochila—. Quiero ir con Krillin a visitar al maestro. ¿Vienes?
—Olvídalo. Quería ir a la biblioteca a estudiar un poco.
—Vegeta, ¡son vacaciones! Qué aburrido eres—el otro rio—. Nos vemos en casa, Veg.
—Anda, con cuidado—se despidió de un ademán y se levantó él también, para tomar un rumbo distinto. Caminó a un cibercafé, para tomarse un capuchino con hielo mientras trabajaba en su laptop. Se sentó al fondo, sacó su laptop de su mochila y abrió un nuevo documento, para poder editarlo—. Esto se ve bien. Requiere sólo pocas correcciones.
Siguió tecleando un rato, copiando y pegando textos, haciendo cambios y resaltando otros. Estiró un poco su cuello, tratando de destensarse por estar tanto tiempo en la misma posición. Terminó de beber su café, antes de pedir un pastelillo para acompañarlo con un segundo vaso de café helado.
—Sigue sin ver mi mensaje—apoyó su codo sobre la mesa, para sostener su cabeza con su puño—. Bahh, debe estar agotado o con migraña—comenzó a teclear en su computadora por mera curiosidad un "¿Qué pasa si un omega tarda en tomar supresores?".
>>"Cuando una persona en celo tarda demasiado en tomar medicación, se pueden presentar algunos efectos secundarios. Entre ellos se encuentran cuerpo cortado, fiebre, debilidad física, resfriado, defensas bajas, dolor estomacal con o sin vómito, por mencionar los más comunes. Asimismo, puede que vuelvan a tener celos con más frecuencia a pocos días del incidente. Ante las dosis altas de supresores también se pueden mostrar estos efectos"—leyó—. ¿Entonces él estará tan mal? Quizá ni siquiera ha podido levantarse de la cama—soltó aire, con pena.
>>Hace días yo tuve mi celo y también tardé en tomar pastillas. Pero me liberé tocándome, reduciéndolo un poco, y cuando me tomé el medicamento pude recuperarme. Además, tenía a Kakarotto que me ayudó llevándome la comida a la cama. Pero Granola estuvo casi dos horas sin poder hacer nada, y tomó varias dosis de supresores...—miró su celular, viendo que el chico no tenía alguna conexión reciente—. Será mejor que vaya a verlo.
Se levantó, guardó su computadora en su mochila y pidió un café y una dona para llevar. Salió del lugar, y paseando por la banqueta decidió pasar también a un local de comida para poder llevar algo de comida caliente. Asimismo, se animó a pasar a una farmacia por algunos medicamentos y sueros.
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Antipatía
FanfictionEn un mundo donde las personas se guían por sus instintos, situaciones desagradables se pueden presentar. ¿Cómo confiar en seres que son tan repulsivos? ¿Cómo no querer ocultar tu propia naturaleza por "humanos" bestiales, que justifican sus actos t...