—Déjame ver si entendí—comentó, antes de meter un bocado de pasta en su boca—. ¿Sólo llevarás clases estos dos semestres?
—Sí...—soltó aire—. No me molesta. Digo, así saldré temprano todos los días este año. Pero esperaba entrar de lleno al laboratorio. Para ser mi primer día de propedéuticos, salí decepcionado.
—Siempre puedes tomar actividades extra aparte—comentó, hojeando el folleto de la oferta que le mostró el chico—. Las materias se ven complicadas.
—Algo...—levantó el menú—. ¿Puedo pedir postre?
—¿Eh? —sonrió—. Claro, Granola.
—Gracias...—tan sólo terminaron el plato fuerte pidieron algo dulce—. ¿A qué hora debes regresar a la empresa?
—A la hora que sea—apoyó su cabeza en su puño, mirando con una sonrisa al otro—. Como llegué temprano, adelanté algunas cosas.
—Me parece perfecto—sonrió al probar el relleno de la tartaleta—. Las moras están muy dulces.
—Las clases de manejo, ¿seguirán en el mismo horario?
—Sí. El primer mes de clases es un poco tranquilo, así que podré tomarlas en el mismo horario. Me siento confiado, le pude perder el miedo rápido.
—Está excelente. Cuando te den la licencia, vayamos a la agencia a conseguir un auto que se te acomode.
—¿Para qué? Si siempre estamos yendo juntos o por el mismo rumbo.
—Pues...—sonrió—. Tienes razón. Te prestaré el mío cuando lo necesites.
—Perfecto—con su cuchara le ofreció al chico, quien aceptó el bocado—. Me queda esta y la próxima semana de cursos introductorios. Y después empezaré clases oficiales.
—Nunca creí conocer a alguien ansioso por empezar las clases.
—Je, je, je—robó una galleta de nuez del plato del otro—. Nos mostrarán los laboratorios y veremos el trabajo de todos los investigadores de ahí—bebió de su malteada—. Pero posiblemente meta varias materias con el doctor Daish.
—¿Quién? —alzó su mirada—. ¿El tipo gruñón al que le caigo mal sólo por existir?
—No le caes mal, sólo cree que podrías ser mala influencia para mí—aclaró, dejando con un gesto ligeramente molesto del otro.
—¿Seguro? Se la pasó viéndome mal cuando te propuso estudiar allá—el otro rio bajito—. ¿Por qué con él?
—Es investigador de nivel III—el otro hizo un gesto de no entender—. Es un nivel alto. Eso significa que sus contribuciones son muy grandes—ensanchó su sonrisa—. No lo sabía, pero al investigar más me di cuenta de que cité dos de sus trabajos en mi tesis. No me había dado cuenta porque eran trabajos en otro idioma.
—Ya veo... —sonrió—. Bueno, si eso quieres, y crees poder aguantar el mal genio que ese hombre parece que se carga siempre...
—No creo que sea mala persona. Si acaso un poco amargado—robó otra galleta de su plato—. Estaré bien.
—Aun así, si crees que se empieza a tomar cosas muy a lo personal, procura tomar clases con alguien más.
—Sí, lo sé—dejó su plato vacío a un lado—. Descansé excelente en las vacaciones. Nunca me había tomado tanto tiempo.
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Antipatía
FanfictionEn un mundo donde las personas se guían por sus instintos, situaciones desagradables se pueden presentar. ¿Cómo confiar en seres que son tan repulsivos? ¿Cómo no querer ocultar tu propia naturaleza por "humanos" bestiales, que justifican sus actos t...