O4: aquella calle

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Y si, el también la había cagado de manera monumental.

-Puede ser

Le respondí con tono flojo, pero no pude evitar pensar algo un tanto pesado "Pero al menos no fue por un libro infantil"

-¿Quieres que hablemos de esto en el receso? ya está por tocar la campana y no me gusta perder mis clases, la verdad me da mucha curiosidad el tema y necesito mas informacion de todo esto

-Pero si eres el más flojo del mundo, de seguro te duermes ahí, prestar atención no es lo tuyo

Dijo Christopher, el era el fantasma de Felix, un verdadero lengua suelta y por ello no podía evitar tirar comentarios así, quiza en vida me hubiera agradado más a pesar de su horrible caracter.

-Este de seguro también se duerme, tal para cual, dos estupidos

Y ambos fantasmas rieron, nosotros solo intercambiamos miradas, no querían interrumpirlos y quedar mal allí, el día recien comenzaba y no queria problemas tan pronto.

-Bueno, hablamos más tarde entonces, eapero que duermas bien

Solté una risa nasal y él una carcajada antes de responder.

-Para ti también, nos vemos despues de clases

Felix alargo la "o" mientras que avanzaba por los pasillos y me dejó con una impresión simple, no se veía como una persona problemática o algo por el estilo, se veía...¿Normal? En si odiaba ese término, pero no encontraba otra forma para describirlo, a pesar de haberlo visto mil veces antes no le habia tomado peso a au presencia hasta ahora.

Empecé a caminar hasta el salón de clases y una vez estaba allí, ví a Felix sentarse al otro extremo del salón, este acomodaba su mochila en la mesa para que fuera su almohada y se preparaba para dormir.

Mientras tanto ambos fantasmas fueron al fondo del salón a conversar, ya que estaban a solo un poco de distancia de los chicos que debían atormentar y no tendrian problemas, se dieron la oportunidad de ponerse al día mientras jugaban a las palmas por el aburrimiento, parecianniños pequeños.

Aquellos ruidos molestaban tanto a Felix como a mi, el resto del salón estaba en silencio y nosotros eramos los únicos que podían oír todo eso, era un desastre para mi cabeza.

Ninguno pudo dormir y tuvimos que prestar atención a medias.

Al salir de la clase nos dirigieron los cuatro al patio justo a la parte del fondo, para así hablar más tranquilos y sin interrupciones, ademas de no pareces loquitos.

-No sé como funciona esto la verdad, estoy demasiado perdido con todo

Felix fue el primero en hablar y se gano la mirada de los tres, agradecia que rompiera el hielo en ese momento.

-Yo tampoco, solo se que estaba jugando con palitos y salió esta cosa que parece humo, es tan molesto que nunca voy a volver a tomar palitos, ni siquiera los del sushi

-¿Con palitos? Eso es más tonto que lo mío, ¿Cómo es posible que te pongas a jugar con palitos? ¿Tienes cinco añitos o algo?

-¡Estaba aburrido! Además solo intentaba hacer figuras de un papelito y salió este

-Realmente pareciera que tienes cinco años

-Tú tienes diecinueve y sigues rituales de libros infantiles, no me jodas a mi

Dije eso en un tono más brusco del que esperaba y le dio mucha verguenza, incluso parecia tomate y no pude evitar soltar una pequeña risa.

-Bueno, mejor cambiemos el tema...

Propuso él luego de darse cuenta de que si ganaría nuestro concurso de "quien fue más imbécil para invocar un fantasma" mientras seguiamos ignorando sus respuestas.

-Supongo que solo nos queda acostumbrarnos a estos muertitos

Dije, y a este punto ya estaba resignado, no podían hacer nada más que eso, no teniamos información ni opciones.

-Supongo que tienes razón, que horror

-Deberian estar felices de ver a sus fantasmas personales, somos lo mejor que existe

Se quejó Christopher y pude notar que nos miraba como si fueramos hormigas, me sentia pequeño en esos momentos.

-Toda la razón, channie

En este punto estaba cansado de todo y al mirar a Felix note que habiamos llegado a la misma conclusión, nos iban a seguir de por vida.

Ojalá hubiera tenido razón y estuvieras a mi lado ahora.

-Vayamos a una cafetería o algo más tarde, así sacamos a pasear a los fantasmitas esos, ya que no podemos quitarlos de encima

-Me parece una idea genial, además tengo ganas de tomar cafecito

Si bien no pensaba que Felix aportaría mucho, con eso me bastó, sabía que aquella sugerencia iba a molestar a Minho y con eso me sentía pleno.

-No somos perros, no tienen que sacarnos a pasear

El primero en quejarse fue Minho y lo siguió Christopher, logrando que quiera reír, pero aguante las risas de la mejor forma posible.

-Somos sus fantasmas, no sus putos perros falderos

-Ajá, como digan, ya vámonos o quizá que les puede pasar si sequedan lejos

Con eso entramos a nuestra última clase apenas tocó la campana, en esta si pudimos dormir, ya que colocaron una película y tanto Chan como Minho se distrajeron con eso, dejándoles una hora de paz a ambos.

Ahora me pongo a pensar y quizá disfrutarón tanto la película porque los muertos no las pueden ver de donde sea que vengan.

Al salir avanzamos hasta aquella cafetería que tanto me gustaba, Felix no la conocía así que era mi oportunidad perfecta para mostrarle el mejor lugar del mundo y tener con quien ir en el futuro.

-Te va a encantar, es muy linda, amo la decoración y los pastelitos son lo mejor del mundo

-Claro, cualquier lugar con pastelitos y café es el mejor, soy adicto a esas cosas

Y en medio del trayecto llegamos a esa calle, Minho comenzó a sentirse mal, no le gustaba estar allí, no quería recordar aquel evento que había ocurrido tan solo hace algunas semanas y su ansiedad se notaba a kilometros.

Pasar por donde te mataron no es fácil para ningún fantasma.

Palitos y un fantasma [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora