Capítulo I

45 6 0
                                    

12 de noviembre

Aparece un vaso de cerveza enfrente mío.

—¿Qué es esto, Will? Yo no lo ordené.— Le dije al jefe del Bar.

—Me dijeron tus compañeros que hoy era tu cumpleaños y no te veo tan contento por eso, ¿pasa algo?— Me dijo con cierta intriga.

—Si es mi cumpleaños, pero ya no es tan alegre desde esa vez.— Lo dije con la voz cortada.

—¿Hablas desde que murió tu hermano hace 5 años? Sí, eso fue difícil para todos. Todos de los del bar lo extrañamos, las noches no son lo mismo sin él. En fin, la cerveza es un regalo de cumpleaños, bébela antes que se caliente y vete a tu casa que Sophie y Stacy te deben estar esperando para festejar.

Es verdad, salí del trabajo a las 19 p.m. y llevo dos horas aquí, mi esposa e hija deben estar preocupadas. Es momento que deje este lugar y regrese a mi hogar.

Hola, soy Phil, Phil Cooper, tengo 42 años y aunque mucha gente no me crea, mido 180 cm, tengo ojos negros y me gusta resolver crucigramas (algo que herede de mi padre) y soy oficial de la central de Walthamstow, Londres. Estoy casado con el amor de mi adolescencia, Sophie Jones, una mujer rubia de unos 38 años, mide 165 cm, pero es la que manda en la relación. Y junto a ella tuve a mi hermosa hija Stacy Cooper, tiene los mismos ojos verdes que su madre, tan solo tiene 6 años, pero me llena de alegrías cada mañana y sigo adelante por ella.

Por suerte no vivo tan lejos del bar, a sique puedo ir caminando. De seguro las chicas me hicieron algo por mi cumpleaños y yo estoy llegando tarde, ¡qué tonto soy!, espero que sigan despiertas y pasemos un rato en familia.

— Hola cariño, siento haber llegado tarde.— Le dije a Sophie.

—Sí, se nota que lo sientes.— Dijo enfadada. —¿Sabes que Stacy estuvo toda la tarde haciendo tu pastel de cumpleaños? Te espero hasta tarde y se fue a dormir decepcionada porque su padre no vio el regalo que hizo para él. —

—Lo siento, hubo mucho trabajo...-

—¡Es mentira! Sé que estuviste en el bar Phil, tus compañeros me dijeron. No sé por qué estas fechas te pones tan distante y triste, ¿aún es por Jack? Tienes una familia aquí, una hija, la cual te espero para festejar tu cumpleaños y ni siquiera apareciste.— Me dijo a los gritos, y veía como le empezaban a caer lágrimas de los ojos.

—Tú no lo entiendes, no entiendes el dolor y la culpa que siento por la muerte de Jack, él era mi hermano y lo mataron, ¡y no pude resolver su caso, no pude encontrar a su asesino!, no entiendes esta culpa que siento. Lamento volver distante estos días, hace 5 años que espero que no sea mi cumpleaños y volver a pensar en Jack y todo lo que paso.— Le dije enfurecido, ella no entiende toda esta culpa.

—Tienes razón, yo no entiendo todo lo que sientes, en realidad no sé si te entiendo a ti Phil. Lo único que se es que acá tienes a tu familia y la abandonadas. Buenas noches, en la nevera tienes pastel del que hizo tu hija por si quieres comer un poco.— Dijo eso de espaldas yéndose al nuestra habitación.

Me serví un poco del pastel y me senté en la cocina. Creo que Sophie tiene razón, estoy descuidando a mi familia y de seguro hice sentir mal a Stacy por no venir temprano. Me iré a acostar y mañana le pediré disculpas a mi hija.

—Lo siento Sophie. Intentaré cambiar, lo juro.— Se lo dije mientras me acostaba junto a ella.

—Está bien Phil, pero yo no soy la única a quien le debes una disculpa, Stacy estaba emocionada por hoy y quiso hacerte algo lindo.-

—Sí, lo sé, mañana le pediré disculpas a ella también. Buenas noches, cariño, te amo.-

—Buenas noches, Phil.— Me dijo Sophie de forma seca.

13 de noviembre

Estamos en el auto con Stacy yendo a su escuela, desde que se levantó no me ha hablado, pienso que debería iniciar yo.

—Hija...-

—Papi, ¿por qué llegaste tarde anoche? Creí que vendrías para festejar tu cumpleaños juntos.-

—Lo sé, hija, perdóname, tuve mucho trabajo hasta tarde.— Le mentí, no considero que sea lo mejor que sepa que fui al bar y que estoy triste por lo de su tío.

—Ah... entiendo. Eso es triste, quería pasar contigo tu cumpleaños, hasta te hice un pastel.-Se notaba la tristeza en su voz.

—Si y lo comí cuando llegue, te quedo muy rico cariño. Te compensaré lo de anoche, ¿quieres ir por un helado a la salida de tu escuela?.-

—¡Sí, eso me gustaría!— Lo dijo con una sonrisa, veo que volvió la alegría a ella.

—Bueno cariño, ya llegamos a tu escuela, yo te vendré a buscar a la salida y tomaremos un helado. Suerte hija, te amo.

—Adiós papa, yo también te amo.-Lo dijo mientras se bajaba del auto.

Bueno, creo que eso funcionará para que me perdone. Ahora debo ir al trabajo, hay mucho papeleo por hacer. Hace tiempo no hay un buen caso, solo robos a ancianas, gatos perdidos, nada interesante.

—¡Hola compañero, feliz cumpleaños! Siento no haber estado ayer para saludarte, tuve que hacer unas cosas.— Me dijo Charles, mi compañero desde que entre a la central, hemos estado codo a codo siempre y me ha apoyado mucho con la muerte de Jack.— Dime, ¿Cómo la pasaste ayer? ¿Salieron a cenar con Sophie?.— Me preguntó con una mirada pícara.

—Hola Charles. No, no salimos a cenar con Sophie, de hecho llegue tarde a casa, me quede hasta tarde en el bar y ella se enojó mucho conmigo.— Lo dije con un poco de vergüenza.

—Vaya, veo que esta vez te afecto mucho, siento no haber estado para ti ayer. Además, eres un idiota, como vas a llegar tarde el día de tu cumpleaños a tu casa, ¿quieres que Sophie esté pensando que andas con otras personas o qué? Deberías ser un poco más responsable con tu familia.— Lo dijo seriamente. Él si sabe dar sermones sin gritarte e igual hacerte sentir mal, eso me gusta de Charles, es directo, sin culpa.

—No digas tonterías Charles, sabes que no podría estar con otra persona, yo amo mucho a Sophie. Si discutimos a veces, pero eso no hace que no la quiera o busque a otra persona, me gusta desde que éramos jóvenes, no hay mejor que ella que encaje conmigo.

—Sí, sé que la quieres mucho, por eso no debes descuidar tu relación y a tu familia. Bueno, basta de tanta charla, tenemos un gran y divertido papeleo que hacer.— Lo dice riendo y yendo a su oficina.

A pesar lo de anoche, hoy está siendo un buen día, no estoy pensando mucho en mi hermano y no estoy dejando que me afecte, creo que debo seguir adelante y disfrutar de la nueva familia que tengo.

—Bueno Charles, me tengo que ir.— Me levanto de mi silla.— Te dejo el resto de papeleo a ti, nos vemos.-

—Oye espera, ¿ya te vas? No me puedes dejar con toda esta pila de papeles. Además, tienes que quedarte, tenemos que hablar de algo importante.— Su tono de voz paso de gracioso a serio en un instante, debe estar hablando en serio.

—¿Cómo hablar de algo importante? ¿Pasó algo? No me digas que perdiste mucho dinero de nuevo en el casino.— A él le gustan mucho las apuestas en el casino y no siempre le va bien.

—Hahaha, no es eso esta vez, es algo más serio.— Su mirada reflejaba que si lo era. Me estaba empezando a preocupar.

—Bueno, entonces dilo de una vez.— Me estaba poniendo inquieto y más con esa mirada fulminante que me lazó a lo último.

—Ayer no pude venir porque fui a hacerme unos estudios médicos.-Dijo mientras se levantaba de la silla y mirarme de frente.— Phil, me voy a retirar de la central.





La Sombra Detrás De Tu Muerte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora