Capitulo 8

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-¿Estás bien, cariño? - Sí imbécil, gracias a mí.

-Sí Bank ¿cuándo llegaste?

-En la madrugada, apenas había bajado del avión cuando Miroku me marcó para decirme lo ocurrido. - ¿Miroku? ¿Por qué tendrían que avisarle a este idiota? - Esos malnacidos no saldrán nunca de prisión, te lo juro. ¿Estás segura de que te encuentras bien? - Ya te dijo que sí idiota, suéltala ahora mismo o te arrancaré las extremidades.

-Sí Bank, estoy bien gracias a Sesshomaru. - Kagome rompió el abrazo y volteo a verme, lo tomó de la mano y yo apreté involuntariamente mis puños viendo como se acercaban a mí. - Él es Sesshomaru. - No tuve más opción que ponerme en pie y estirar mi mano en un saludo cordial.

-Mucho gusto, mi nombre es Bankotsu. Muchas gracias por mantener a mi pequeña a salvo, Sesshomaru. ¿Cómo hiciste para someter a dos sujetos tú sólo? Eso fue heroico.

-Práctico diferentes artes marciales desde que era un niño y de hecho estuve a punto de debutar para entrar a las peleas profesionales de la UFC, no fue difícil para mí mandarlos a dormir. - Metí despreocupadamente mis manos en los bolsillos de mi pantalón. No era ego, solamente quería dejar en claro que sí yo quiero le puedo tirar cada diente de su estúpida boca que se jacta llamando "cariño" y "pequeña" a mi mujer.

-Eso no me lo habías dicho. - Dijo Kagome un poco confundida, aunque en su voz pude notar una pizca de reclamo.

-Lo lamento, no creí que fuera importante.

-Bueno, solamente creo que habría sido bueno saber que mi modelo es un peleador profesional y así mi preocupación no hubiera sido tanta cuando enfréntaste a dos sujetos tú sólo. - Expresó Kagome con visible molestia y sin esperar respuesta se dio media vuelta y comenzó a alejarse. ¿De verdad está molesta?

-Disculpen. - salí inmediatamente tras ella, no entiendo la razón del porqué está actuando así pero no puedo estar tranquilo sabiendo que ella está enojada. - Kagome. - La tome del brazo sin lastimarla y ella se detuvo dando media vuelta con algo de fastidio. - ¿Qué sucede? ¿Por qué estás así?

-¡Porque me moría de miedo, Sesshomaru! Moría de miedo al pensar que algo te podría pasar y que fui una cobarde al dejarte ahí con ellos, es por eso que no pude irme del todo, me escondí buscando una piedra o un leño, cualquier cosa para ayudarte, estaba aterrada y desesperada. La desesperación de saber que podrías haber muerto a manos de esos hombres fue horrible y todo ese sentir quizás hubiera sido menos si tú hubieras sido completamente honesto conmigo. - Sentí mi corazón latir emocionado al saber que se había preocupado por mí, que pudo haber huido pero decidió quedarse y buscar algo con lo que auxiliarme. Le tomé ambas manos.

-Lamento mucho lo mal que la pasaste, pero te pido que también me entiendas que para mí contarte eso era completamente irrelevante, se suponía que yo venía a un video musical, no me iba a subir al octágono a pelear. Tienes razón que al decir que esto se habría evitado si nos conociéramos mejor, pero eso aún tiene solución. - Solté una de sus manos y toqué su barbilla. - Me gustaría que te dieras la oportunidad de conocerme y que me permitas conocerte a ti también. - Acaricié su mejilla y Kagome tomó mi mano recargando su hermoso rostro en ella.

-Tienes razón, discúlpame.

-No tengo nada que disculpar. - Me sonrió y me pareció irreal tanta belleza.

-Lamento interrumpir tan conmovedora escena pero Miroku te busca, Kag. - Era ese estúpido de trenza. No han pasado ni 10 minutos de su llegada y ya siento que lo odio.

-Nos vemos en un momento. - Dijo Kagome con una triste sonrisa y yo asentí. Estaba por darme la vuelta y entrar al que había sido mi camerino para tomar mis cosas e irme pero mis intenciones fueron frenadas por la misma voz que había interrumpido nuestro momento entre Kagome y yo.

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